¿Laberinto sin salida?
Foto: "Iglesia, cruz, cielo, telefonía…" por Inti @ Flickr
Blog de Gabriel Sosa Plata en El Universal, 30 de julio de 2010
Gabriel Sosa Plata
Las licitaciones de espectro radioeléctrico han colocado a la Cofetel en un laberinto sin salida. Toda decisión de la banda 1.9 Ghz será polémica y tendrá consecuencias jurídicas, políticas y económicas
Es una pena para los consumidores, para el sector y para el país. Y todos perderemos porque, indudablemente, se retrasará la entrada de nuevos servicios, jugadores y cuantiosas inversiones en telecomunicaciones.
El tema de las licitaciones ha generado una confrontación pública entre operadores, periodistas, asociaciones, legisladores, especialistas y gobierno. No es para menos. Están en juego millones de dólares y el futuro de un negocio muy redituable. Las acusaciones entre ambos bandos han sido terribles. Quizás hemos contribuido en ello, pero en esto hay un responsable: el gobierno (SCT y Secretaría de Hacienda) y los órganos reguladores (Cofetel y Cofeco) que dieron su visto bueno a unas bases de licitación que desde su diseño fueron cuestionadas por su claro favoritismo hacia algunos operadores.
Ante dicha inequidad y por no prever el daño patrimonial que se podría generar al Estado como resultado de la licitación, los “firmantes” de esas bases podrían enfrentarse a denuncias administrativas y penales que podrían derivar, en el mejor de los casos, en su inhabilitación.
También son responsables los legisladores que, bajo la presión de un intenso cabildeo, aprobaron la exención durante dos años del pago de derechos a los ganadores de la multicitada licitación 21. La historia de la aprobación de las reformas de 2006 parece repetirse. Un conjunto de intereses se impuso sobre la clase política y las consecuencias fueron tremendas, por ejemplo, en materia de refrendos de radiodifusión.
Afirmar que quienes cuestionamos la licitación deseamos que prevalezca el monopolio en telefonía móvil es una manera de desvirtuar el problema. La polémica se centra en la reserva exclusiva de frecuencias para los nuevos operadores y el pago inicial que hará Televisa-Nextel (180 millones de pesos) frente al resto de los operadores (más de 5 mil millones de pesos) por la misma cantidad de espectro. En lo demás se coincide: que la alianza pagará derechos durante los años siguientes (como las demás empresas ganadoras), que esto traerá beneficios al Estado por uso y explotación del espectro radioeléctrico, que habrá más competencia e inversiones, que muy probablemente bajarán los precios y que los consumidores tendremos más beneficios.
Las dificultades de la Cofetel se agudizan por el juicio de controversia constitucional que diputados presentarán en contra del presidente Calderón por el nombramiento de Mony de Swaan como comisionado de ese órgano regulador. El PRI y otras fuerzas políticas están dispuestos a tirar al colaborador del titular de la SCT porque a su parecer no cumple con los requisitos que establece la ley. Con este acto, la oposición busca otros propósitos: ganar espacios de negociación política, recuperar (¿para quién?) al órgano regulador y acotar un espacio que podría serle muy útil a Juan Molinar Horcasitas en sus aspiraciones presidenciales. Por si fuera poco, a todo esto se agrega la denuncia ante la PGR por la colusión de funcionarios para elegir a De Swaan como presidente de la Cofetel.
Mony de Swaan ha tenido un diálogo directo con legisladores, con directivos de asociaciones, de empresas del sector y periodistas, sobre su propio nombramiento y las licitaciones. Como buen político, ha sido tolerante y trata de ganarse la confianza de sus opositores. También la próxima semana recibirá a diversas organizaciones no gubernamentales para conocer los temas que les preocupan sobre el sector.
Su disposición a escuchar es tan amplia que, incluso, en twitter, invitó a un debate entre las partes sobre las licitaciones en el que él fungiría como moderador. Sin embargo, no podría serlo porque también es un actor importante en el proceso. Recordemos que el día del anuncio de su nombramiento, el 30 de junio, Juan Molinar, destacó que su excoordinador de asesores “fue pieza clave para el éxito de políticas como las licitaciones de espectro que actualmente están en proceso”.
Como vemos, continuará el desgaste, más páginas escritas sobre el tema, más abogados, más falta de credibilidad hacia el órgano regulador y más pérdidas… y todo por querer comerse casi todo el pastel de una mordida.
Concentración de radio y televisión
En EU, la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) realiza una consulta sobre la concentración de estaciones de radio y tv. Desde 1996, una entidad sólo puede poseer hasta ocho estaciones de un mercado de 45 estaciones o más. El principal operador de la radio, Clear Channel, pide que la FCC modifique dichos límites para crear dos nuevos “niveles”: de ocho a 12 estaciones por grupo en los mercados más grandes, y de ocho a 10 en los mercados que tienen de 55 a 56 emisoras.
Sin embargo, diversas organizaciones como Media Alliance, Common Cause y Prometheus Radio Project se oponen. Afirman que los límites de la radio local deben ser, incluso, más estrictos para fomentar la diversidad de puntos de vista y mejorar el servicio local. En México aún estamos muy lejos de esos estándares. La legislación es tan laxa que aquí algunos operadores, con el pretexto de la convergencia, pueden crecer con nuevas concesiones y más concentraciones, incluso bajo el amparo de la Cofeco.
Voces de la Libertad es un extraordinario libro publicado por la Unión de Expendedores y Voceadores de los Periódicos de México, A.C., con motivo del Bicentenario. La obra reúne fotografías y textos alusivos a nuestros voceadores. Hay textos de Jacobo Zabludovsky, Carlos Monsiváis, Elena Poniatowska, Humberto Musacchio, José Luis Camacho y otros. Felicidades.
Profesor e investigador de la UAM Xochimilco.
Columnista del noticiario Pulso de la mañana
y coordinador del Consejo Editorial de la Revista Mexicana de Comunicación.
El siguiente es un ejemplo de cómo debe citar el anterior artículo:
Sosa Plata, Gabriel, «¿Laberinto sin salida?»
en Revista Mexicana de Comunicación. Disponible en:
http://www.mexicanadecomunicacion.com.mx/sosa.htm
Fecha de consulta: México,30– julio–2010
