No. 155 / enero-junio 2025 / reseña
Ian Baruch Soto García
UNIVERSIDAD AUTÓNOMA METROPOLITANA
El disfrute de escribir. Experiencia de escritura creativa en el Municipio de Muna
Inés Cornejo Portugal, Carlos Maas Tum, Vicente Castellanos Cerda y Mario Bellatin
(CONAHCYT 319132) Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Cuajimalpa Ver PDF
Leer sobre escritura que van más allá de lo convencional también es un disfrute. Este libro llegó a mis manos como un obsequio durante su primera presentación en la Feria del Libro del Palacio de Minería. Recuerdo que me atrapó la sencillez reveladora de una idea: “para aprender a escribir, simplemente hay que escribir”. Comencé la lectura mientras viajaba en una vagoneta, y por las ventanas vi subir a los chicos de secundaria en las calles nubladas de Santa Fe. Fue entonces cuando el libro cobró una nueva perspectiva y me pregunté: ¿qué habría pasado si en mi secundaria hubieran existido talleres como los que propone este libro? Espacios que son capaces de transformar la relación entre docente y alumno, y de convertir el aula en un proceso circular donde los estudiantes también enseñan mientras aprenden.
Quizá esta reseña no habría tardado tanto en nacer si antes hubiera conocido propuestas como esta. Este texto fue elaborado desde la asistencia editorial de la revista. Escribirlo fue, en sí, un gran aprendizaje. Me encontré con un libro que me reiteró la importancia de disfrutar el acto mismo de escribir. Además, consideramos que su inclusión en este número era pertinente para dar un acercamiento más profundo al concepto de Producción Horizontal del Conocimiento (PHC).
Claves para el disfrute de escribir
Este libro nos introduce a una experiencia de escritura creativa realizada en el municipio de Muna, Yucatán. Se originó en una experiencia creativa que consistió en la conformación de un club de lectura llamado “Entre líneas y palabras”, desarrollado en una escuela secundaria con adolescentes de 13 a 15 años, y que culminó con un curso-taller de escritura creativa. La obra permite adentrarnos al universo de ideas de estudiantes cuyos relatos e historias nos ofrecen valiosas reflexiones sobre su manera de ver y pensar el mundo.
El disfrute de escribir se fundamenta en la Producción Horizontal del Conocimiento, en la cual todas las partes tienen la misma importancia al contribuir en la investigación. Los investigadores no impusieron su conocimiento: se sentaron con los alumnos, autoridades y profesores en sus aulas y espacios comunes para dar forma a la investigación. Existió una autentica valoración de saberes.
La obra forma parte del proyecto de investigación e incidencia “Escribe y lee tu mundo. Cultura científica y escritura creativa para la inclusión social”. Éste surgió de la necesidad de fomentar la lectura y escritura como herramientas que permitan y ayuden a los adolescentes, y en general a todas las personas, a expresar mejor sus ideas, entenderse y comunicarse con mayor claridad y encontrar caminos por medio del diálogo para la resolución de conflictos, entre otras cosas. Esta práctica no suele formar parte de la rutina cotidiana de los adolescentes. La propuesta de este libro ofrece un modelo de lecto-escritura que puede ser replicado en otros contextos además de que esta es una solución que inspira a disfrutar sobre la escritura.
El propósito principal de El disfrute de escribir es recopilar una serie de poemas, cuentos y reflexiones que surgieron en los talleres de escritura. Estos textos van más allá de transmitir información pues fomenta la expresión, la imaginación, la inspiración y la duda, y abre un espacio para que las voces jóvenes encuentren forma, sentido y un lugar en la palabra escrita.
El disfrute de escribir reconoce la importancia de conceptos clave desde la perspectiva de la horizontalidad como práctica de investigación-incidencia. Se destacan conceptos como la co-labor, entendida como el vínculo que se construye entre interlocutores situados en distintos niveles de relación, el pronunciamiento como eje de la comunicación y la creación conjunta que permite incorporar activamente los conceptos de los otros.
Este libro también resulta significativo para ejemplificar la PHC, pues plantea la horizontalidad como una práctica de investigación-incidencia que reconoce la diferencia y desde ahí dialoga con todos los participantes. Nos recuerda la importancia de pronunciar la palabra propia para hacer una mejor lectura de la realidad.
Sobre la estructura del texto
Esta entrega nos lleva a las aulas de la Escuela Secundaria Estatal Número 16 “Doctor Jaime Torres Bodet” del municipio de Muna, Yucatán, donde un grupo de investigadores, profesores, estudiantes, autoridades del plantel y un escritor desarrollaron este proyecto como actividad extracurricular.
Es una antología colectiva que combina distintos géneros. El libro reúne poemas, cuentos, preguntas y reflexiones escritas por los participantes. También, integra testimonios y análisis de los avances percibidos. Ofrece un modelo de herramientas y técnicas para la enseñanza de la escritura creativa.
El material sigue una secuencia cronológica y episódica que inicia con el acercamiento a la gente y a la vida cotidiana del municipio de Muna. A partir de ahí, construye una imagen progresiva del ambiente del taller y de quienes se integran a él. Narra la creación de un proyecto de lectura que integró distintos conocimientos y produjo una caja de herramientas que no trae instrucciones, pero enseña a jugar con las palabras. A lo largo de estos encuentros se recopilan y documentan emociones y aprendizajes, y se comparten los textos producidos por los adolescentes. El proceso culmina con una crónica visual que retrata la experiencia del taller guiado por el escritor Mario Bellatin y deja ver el impacto del proyecto en la comunidad. Finalmente, la obra cierra con una serie de reflexiones acerca de la rutina encantada de inventar mundos con la pluma, cuando escribir deja de ser un mandato y se convierte en descubrimiento.
El registro lingüístico de la obra varía entre distintos recursos: desde la narración de los encuentros y experiencias compartidas entre alumnos, profesores e investigadores, hasta reflexiones sobre el impacto de las actividades realizadas. También se incorpora la voz de los estudiantes de la Secundaria No. 16 “Doctor Jaime Torres Bodet”, quienes presentan poesía y cuentos brillantes e imaginativos que abordan anécdotas, ideas, emociones, concepciones sobre su vida cotidiana e, incluso, su percepción sobre los talleres de lectura y escritura. Emplea un lenguaje técnico accesible, que facilita la comprensión sin perder rigor, lo cual permite que cualquier lector pueda disfrutar y apropiarse del contenido. Mantiene un ritmo claro y pausado que posibilita seguir la voz de cada participante y comprender el papel que desempeñó dentro del proyecto.
El libro cuenta con un prólogo, introducción y cinco capítulos. El prólogo da una bienvenida cálida y reflexiva; su tono analítico establece un puente con algunas experiencias e historias que encontramos a lo largo de la obra. La introducción nos ofrece un marco referencial que nos anticipa cómo los talleres y círculos de lectura, sobre los que leeremos más adelante, transforman la relación entre docentes y estudiantes. Propone un proceso circular en el que también los alumnos tienen algo que enseñar.
El primer capítulo, “Un día en Muna”, nos lleva a la experiencia de vivir en ese lugar donde grandes narradores nacen y se forman compartiendo sus tradiciones, cosmogonía y anécdotas de forma oral. Nos sitúa en un pequeño pueblo, donde la principal actividad es el campo y donde también algunas personas se enfrentan a dificultades como falta de acceso a servicios básicos, a la desintegración familiar o a la convivencia con la drogadicción entre otros problemas. Aun así, el municipio es rico en historias: los aconteceres en la milpa, las leyendas, los relatos de la escuela, de la familia o la posición de las estrellas, el rocío de las flores, el sol de la tarde; todo encuentra aquí su modo de ser contado.
El segundo capítulo, “Club de lectura Entre líneas y palabras”, profundiza en el primer acercamiento con los alumnos de la escuela secundaria y muestra cómo pudieron apropiarse del lenguaje como una herramienta de expresión. El capítulo transcribe una charla colectiva entre la directora de la secundaria, Ligia Aurora Chi Garma, los profesores Yareli Oliva León Canto y Carlos Mas Tun, y los investigadores Inés Cornejo Portugal y Vicente Castellanos Cerda. A través del diálogo, se reflexiona sobre los alcances y limitaciones de la experiencia, y sobre cómo este espacio abrió posibilidades para leer, conversar e interactuar de otro modo.
El tercer capítulo, “El disfrute de escribir”, recopila los diversos poemas y cuentos creados durante los talleres de escritura. Los jóvenes autores nos muestran cómo la escritura creativa va más allá de transmitir información; que se trata también de imaginar y dar forma a lo que antes no existía en palabras. Fomenta la expresión personal y la imaginación de quien escribe. Comenzamos a conocer que, a través de los textos, existe una conexión importante entre quien lee y el quien escribe.
“Crónica visual” es el cuarto capitulo y nos lleva al primer pupitre del salón de la secundaria para observar al escritor Mario Bellatin dirigir el curso-taller de escritura creativa. Conocemos las emociones de los chicos que participaron, algunas anécdotas de su vida cotidiana y la manera en que la organización y las enseñanzas del taller contribuyeron a generar momentos de auténtica horizontalidad en sus interacciones. Así surgieron también historias e ideas que nos recuerdan la brillantez y el ingenio propios de la adolescencia.
La obra cierra con las reflexiones acerca del proceso de escritura creativa. Desde ellas, se entiende a la comunicación humana como un proceso colectivo-compartido capaz de provocar interesantes reflexiones a través de la escritura. Se introducen conceptos fundamentales para comprender la horizontalidad que guía el proyecto, como el pronunciamiento y la co-labor, los cuales propician el encuentro con el otro y favorecen la apertura hacia lo diverso desde el reconocimiento de nuestras diferencias.
Muna, semillero de narradores
Las experiencias reunidas en este libro revelan un equilibrio entre diversas voces. En un círculo de confianza, el grupo de docentes, estudiantes, investigadores y autoridades construyó un ambiente en el que las ideas, el pensamiento y el arte de la imaginación dieron sentido tanto a sus textos como a su crecimiento como escritores.
Los jóvenes comparten sus ideas, inquietudes, dudas e, incluso, aspectos de su vida cotidiana. Esto permitió reforzar la relación educador-educando desde una nueva perspectiva, en la cual sus fortalezas e incertidumbres abren caminos para acceder al conocimiento desde la materia que estudian.
Los coordinadores de esta obra evidencian los beneficios pedagógicos tanto en el desarrollo emocional y social como en el acto mismo de escribir, leer y compartir ideas. De la inexperiencia de los estudiantes surge una nueva forma de abordar la lectura, la escritura y la lectura en voz alta de sus propios textos. Y en ese eco pasa algo. Las palabras permanecen más tiempo en el aire. No eran talleres convencionales: eran algo más.
Muna, reconocida como una cuna de narradores por la transmisión oral de relatos y cultura de generación en generación, ofreció un escenario propicio para los talleres realizados en la secundaria estatal Dr. Jaime Bodet, de los cuales surgieron textos sorprendentes, ingeniosos y creativos. A lo largo del proceso, las inquietudes, dudas y necesidades del alumnado fueron tomando forma como artefactos dispersos que, al irse escuchando, respondiendo y atendiendo, se sumaron a una caja de herramientas no de metal, sino de palabras que afilan la escritura y le dan forma al pensamiento.
Encontramos momentos de verdad, de quiebre o de belleza que emergen sin buscarse: desde anécdotas de amor, un tema recurrente en la adolescencia, hasta historias que simplemente comparten un instante o un sueño, o lo que para ellos representa “un momento de paz”. Desde allí piensan y observan: sus sentidos, sus sentimientos, su entorno.
Aparecen concepciones interesantes, ingeniosas, a veces ingenuas, pero siempre honestas: ¿qué es la belleza?, ¿qué es el amor propio?, ¿qué significa ser perfecta o perfecto? Estas preguntas nos revelan la aparente sencillez de sus ideas, pero también lo mucho que atraviesan en esta etapa.
Hay historias llenas de imaginación: como la de dos samuráis que vivían en conflicto hasta que un suceso en el campo de batalla transformó sus vidas. O textos poéticos que comparten sensaciones sobre el entorno y los pequeños detalles: los sonidos de la primavera, las plantas, los libros, el calor y los colores del día. Textos que invitan a imaginar, a asomarse a su cotidianidad, al instante preciso al que ellos querían llevarnos.
Y tal vez a ti también te pase: lees un cuento escrito por uno de ellos y, sin darte cuenta, entras en conversación contigo mismo; te quedas viendo la pared como si acabaras de escuchar una historia de esas que uno querría seguir explorando, que despiertan ganas de saber más.
Impacto educativo y social
Este libro aporta un nuevo método para la enseñanza de la lectura y la escritura, fácilmente aplicable desde la educación básica; ¿y por qué no hasta la educación superior? Ofrece un espacio para desarrollar la imaginación y compartirla con los demás a través de la palabra.
Es un texto útil para estudiantes, docentes, investigadores, diseñadores de políticas educativas y planes de estudio, así como para facilitadores de talleres. Más allá de su carácter académico, ofrece una experiencia agradable, interactiva y reflexiva sobre el arte de la escritura.
La imagen que permanece al cerrar el libro es la del aula: los salones de clase, el taller de lectura en marcha, con estudiantes y docentes compartiendo palabras e ideas. Esa escena despierta una reflexión profunda sobre la importancia de fomentar el pronunciamiento desde edades tempranas: la capacidad de comunicarse, de expresarse de forma oral o escrita, es una práctica necesaria en nuestra vida diaria. Vivimos en un mundo saturado de mensajes, y es fundamental aprender a interpretar, a escuchar y a dirigirnos al otro con claridad y respeto.
También resulta fundamental la colaboración y la construcción de comunidad: incorporar las ideas y los conceptos de los otros no sólo enriquece nuestro pensamiento, sino que abre posibilidades para relacionarnos mejor con los demás y con el mundo. En ese sentido, la horizontalidad se vuelve una noción clave: en el ejercicio de la investigación, así como en la enseñanza, reconocer nuestras diferencias y dialogar desde ellas es esencial para construir conocimiento de manera ética y compartida.
La atmósfera que deja el libro invita a repensar la labor del educador en relación con el educando. Fortalecer ese vínculo permite que la transmisión del conocimiento sea más efectiva al ser más humana. El maestro aparece como un guía que camina junto al alumno en su proceso de descubrimiento. La escritura creativa, en este contexto, no es únicamente una técnica: es una herramienta para pensar, conectar ideas, darle forma al aprendizaje y profundizar en la comprensión del mundo.
Esta obra es relevante para los estudios en comunicación de la ciencia. A través de la lectura y la escritura, aprendemos a insertarnos en una cultura de saberes, información y conocimiento. Esto incide directamente en el desarrollo académico de los estudiantes en todas las áreas: matemáticas, química, biología, ciencias sociales y humanidades. Fomentar el pronunciamiento, la interacción crítica y el uso consciente de la palabra mejora no solo nuestras relaciones sociales, sino también nuestra relación con el conocimiento, la ciencia y la tecnología.
El texto invita a reflexionar sobre el papel de la co-labor en la integración de los planes de estudio en las escuelas. A partir de esta reflexión, surgen las siguientes preguntas: ¿cómo diseñar guías que, desde la horizontalidad, rompan las barreras de comunicación para facilitar una mejor integración de las personas en los espacios culturales, escolares y en sus comunidades? Y, finalmente, ¿cómo construir estructuras científicas y tecnológicas más horizontales a nivel nacional?