Los derechos de las audiencias
Dimensión social de la libertad de expresión

Adriana Solórzano Fuentes | Ensayo | Colaboración invitada
La libertad de expresión es un principio fundamental de cualquier democracia; sobre todo de aquella caracterizada por una deliberación pública robusta, cotidiana y fructífera. A este binomio libertad de expresión/deliberación se suma la necesidad de la plaza pública; es decir, el espacio físico o virtual donde la ciudadanía interactúa y se expresa en torno a temas de interés público. En el caso de las sociedades contemporáneas, los medios de comunicación se constituyen como uno de estos espacios y, por ello, entre otras razones, es necesario garantizar que en éstos pueda ejercerse cabalmente la libertad de expresión. Hay dos grandes antípodas desde la cuales se pueden conceptualizar los derechos de las audiencias: definirlos como una derivación natural de la libertad de expresión, perspectiva que buscamos demostrar en este texto; o, en contraste, otro concepto: la falacia de clasificarlos como censura. Para poder analizar la dicotomía será preciso definir el derecho humano a la libertad de expresión y mostrar la vinculación de los derechos de las audiencias con éste. En el otro extremo, revisaremos los límites de la libertad de expresión y analizaremos si los derechos de las audiencias podrían considerarse censura.

En defensa de los derechos de las audiencias

Jerónimo Luis Repoll | Ensayo | Colaboración invitada
Esta reflexión caracteriza el proceso que va de la Reforma Constitucional en materia de Telecomunicaciones y Radiodifusión (2013), la promulgación de la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión (2014), la contrarreforma decretada en 2017, centrada en la derogación y reforma del articulado sobre derechos de las audiencias y defensoría de la audiencia, y hasta la resolución de 2022 de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) a favor de quienes interpusieron amparos sobre dicho decreto. Estos cambios desplegaron una falsa tensión entre la defensa de la libertad de expresión y los derechos de las audiencias. La disputa se extendió tanto en los terrenos de los tres poderes del Estado mexicano como en el escenario mediático, en el cual la Cámara de la Industria de la Radio y la Televisión (CIRT) empleó toda su artillería en defensa de los intereses empresariales.