No. 151-152 / 2023 / ensayo
Rebecca Marilyn Rodríguez Ríos
UNIVERSIDAD INTERCULTURAL DE SAN LUIS POTOSÍ
Resumen: El presente trabajo pretende abrir reflexiones y propiciar el diálogo respecto a la pertinencia de la inclusión de la cultura digital como elemento de interés dentro del modelo educativo de las Universidades Interculturales; específicamente, en la malla curricular de la Licenciatura en Comunicación Intercultural. Todo ello con base en el análisis del concepto de cultura digital como recurso sociocognitivo dentro de la educación en México, las necesidades que fluyen desde los paradigmas tecnológicos y las competencias necesarias para desarrollarse dentro de la sociedad de la información y el conocimiento.
Abstract: This paper aims to open reflections and encourage dialogue regarding the relevance of the inclusion of digital culture as an element of interest within the educational model of Intercultural Universities, specifically, in the curriculum of the Bachelor’s Degree in Intercultural Communication. All this, based on the analysis of the concept of digital culture as a socio-cognitive resource within education in Mexico, the needs that flow from the technological paradigms and the skills needed to develop within the information and knowledge society.
Objetivos en el modelo educativo de las Universidades Interculturales
Las Universidades Interculturales (UI) son un subsistema de educación superior que nace bajo la necesidad de atender la gran diversidad cultural que existe en México.
De los objetivos del modelo educativo intercultural, podemos resaltar los siguientes.En primer lugar, se procura que las UI abran espacios para el diálogo entre los saberes regionales; es decir, los saberes que se gestan en las comunidades mayormente indígenas y quedan delimitados en sus áreas con los conocimientos académicos formales en los que se basa la mayor carga del capital cultural. Respecto del cultivo de saberes diversos, Casillas y Santini (2009) indican que:
Las UI pretenden revalorar los saberes de los pueblos indígenas y propiciar un proceso de síntesis con los avances del conocimiento científico, así como fomentar la difusión de los valores propios de las comunidades con el desarrollo científico y cultural contemporáneo (Casillas y Santini, 2009: 9).
Se hace todo esto procurando alejarse del ejercicio hegemónico de la valorización del saber a partir de la fuente para crear conciencia de la generación de conocimiento, el cual es atravesado, además, por las cosmovisiones de las comunidades indígenas.
Como segundo objetivo, las UI buscan proporcionar atención educativa a “jóvenes, que, por razones de antecedentes escolares, culturales y de residencia, han tenido muy pocas oportunidades de cursar estudios superiores” (Casillas y Santini, 2009: 8). Hacen especial énfasis en los jóvenes de comunidades indígenas, pero no limitan la población estudiantil en este sector. Hay un reconocimiento también de aquellas poblaciones que han sido estructuralmente marginadas por sus características, ideologías o espacios de procedencia.
Por último, en el proceso de formación de los profesionales de las diferentes opciones en la oferta educativa, el modelo intercultural busca formar personas competentes que no sólo hagan uso de sus competencias en el espacio laboral, sino que también propicien modelos y propuestas que apoyen al desarrollo cultural, económico y social de los pueblos indígenas o grupos socialmente marginados.
Por ello, en cada malla curricular de los programas educativos se encuentran asignaturas que tienen como finalidad reconocer la diversidad biocultural de la región en donde está ubicada la institución y se propicia la vinculación comunitaria como elemento fundamental del reconocimiento del entorno social y la aplicación de proyectos significativos para la comunidad en cuestión y para el estudiante.
Partiendo del enfoque desde el cual se busca desarrollar a los profesionales en las UI, identificaremos las características del programa educativo de la Licenciatura en Comunicación Intercultural. Cabe destacar que cada UI tiene elementos diferenciadores en cada una de las descripciones de sus programas de licenciatura.
En el sitio web de una de las Universidades Interculturales que se encuentran en el territorio mexicano se ofrece la siguiente reseña:
El Licenciado en Comunicación Intercultural es un profesionista capaz de implementar proyectos de comunicación intercultural que recuperen y difundan las diferentes expresiones culturales de su zona de influencia e interacción, investiga problemáticas de relaciones interculturales y genera estrategias de comunicación que contribuyan a fomentar la participación de los diversos actores en la toma de decisiones, producir material impreso, audiovisual y multimedia para la valoración de las identidades culturales y contribuir a la visibilización de la diversidad biocultural (Universidad Intercultural de San Luis Potosí, 2019)
Dentro de la reseña anterior, es importante señalar cómo se construye el objeto de interés en el reconocimiento de las expresiones y sistemas culturales en los espacios de influencia de los alumnos y la misión de fomentar una participación activa de los miembros de las comunidades en espacios de interés público. Desde allí se pretende la representación de sus intereses para coadyuvar a que los temas de importancia para estas comunidades tengan diálogo en las esferas públicas. Es aquí en donde comenzaremos a entrelazar la necesidad de abrir la perspectiva cultural hacia los espacios digitales y, a su vez, la importancia de su reconocimiento e inclusión dentro del diseño de las mallas curriculares de las Universidades Interculturales (UI)
La cultura digital: expandiendo las fronteras de la interculturalidad
Tener un objeto tan complejo como la cultura provee de una gran ventaja: la posibilidad de ampliarlo con base en los cambios históricos que ha tenido la sociedad y, sobre todo, los que han modificado sus formas de socializar. Debemos recordar que una de las piezas angulares de la cultura son las formas de comunicación humana. Éstas se identifican con un amplio espectro desde la comunicación no verbal, la comunicación gráfica, los códigos lingüísticos, etcétera. La comunicación ha sido el vehículo transformador y catalizador de los elementos culturales que dotan de identidad a una comunidad.
Actualmente, el campo de la comunicación humana es atravesado por las nuevas prácticas que se gestan desde los espacios virtuales donde se crean comunidades y se gestan nuevos intercambios comunicativos diversos como la propuesta más reciente de Mark Zuckerberg: el Metaverso. Respecto a este punto, Hinojo y Leiva (2022: 5) reflexionan que “la virtualización de los procesos sociales, culturales, económicos y educativos está modificando la propia fisonomía de los actos y hechos humanos en un desarrollo dinámico y complejo”.
Por otro lado, tenemos también la digitalización constante de los procesos de comunicación ya existentes, la cual no se limita a las prácticas sociales comunicativas: lo digital atraviesa toda práctica humana como describe Riverón (2016: 3): “la digitalización como tal toca a todas las formas patrimoniales, artísticas o industriales culturales, aunque afecte más profundamente a actividades como bibliotecas, archivos, audiovisual, edición, multimedia”.
Es precisamente esta digitalización de los procesos sociales lo que da lugar a la categoría de cultura digital. El concepto de cultura digital es un elemento de importancia que debe ser considerado dentro de los marcos de construcción curricular. Esto es remarcado por la Secretaría de Educación Pública (SEP) dentro del acuerdo número 17/08/22 por el que se establece y regula el Marco Curricular Común de la Educación Media Superior, publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el dos de septiembre del año 2022. Éste describe a la cultura digital como uno de los recursos sociocognitivos (aprendizajes articuladores comunes). El artículo 13 señala lo siguiente:
Cultura Digital es un recurso sociocognitivo que promueve en el estudiantado el pensar y reflexionar sobre las aplicaciones y los efectos de la tecnología, la capacidad de adaptarse a la diversidad y disponibilidad de los contextos y circunstancias de las y los estudiantes (…) Las Categorías que componen este recurso sociocognitivo son: la Ciudadanía Digital; Comunicación y colaboración; Pensamiento algorítmico y Creatividad digital. (SEP, 2022)
Esta declaración parece reflejar y reforzar el reconocimiento a la formación integral de los estudiantes, misma que se trasversa a todos los niveles educativos. Identificar la cultura digital como recurso sociocognitivo resalta su papel como herramienta para el aprendizaje y el desarrollo de las competencias necesarias para la participación plena en la sociedad contemporánea. Además de las habilidades del uso de tecnologías, la SEP hace un claro énfasis en la reflexión de los efectos de las tecnologías, lo cual implica fomentar en el alumnado una comprensión crítica de cómo se manifiestan los efectos de las tecnologías digitales dentro de las comunidades y la sociedad.
Con base en lo anterior, conviene retomar el análisis de la pertinencia de la cultura digital en las mallas curriculares de las UI. En el caso de la Licenciatura en Comunicación Intercultural, es de importancia remarcar que, dentro del campo de la comunicación, las nuevas prácticas comunicativas representan un objeto de estudio, si no emergente, por lo menos abordado por algunas ramificaciones disciplinares de la comunicación. Respecto al interés del estudioso de la comunicación por la cultura digital, Littlejohn y Foss (2009) argumentan:
At the heart of any digital culture are social interaction and a network of relationships; communication scholars have an abiding interest in studying issues of identity, community, and access in relation to them. [En el corazón de cualquier cultura digital están la interacción social y una red de relaciones; los académicos de la comunicación tienen un interés permanente en estudiar cuestiones de identidad, comunidad y acceso en relación con ellos] (Littlejohn y Foss, 2009: 309)
Pero, sobre todo, uno de los aspectos relevantes por destacar dentro del desarrollo de las competencias del profesional de la comunicación intercultural como agente activo del estudio de la cultura digital será pensar en cómo la construcción del ciudadano digital es un elemento importante para llevar temas de interés hacia las esferas de discusión y participación, que han migrado ahora a los espacios digitales, además de incluir una identificación de los nuevos formatos y contenidos que apoyen a la divulgación de las identidades culturales diversas. Sin olvidar que también es importante el abordaje crítico de los efectos de la tecnología digital que afectan a las comunidades, siguiendo con la propuesta de la SEP (2022).
La integración de la cultura digital y las reflexiones en torno a los efectos de la digitalización nos lleva a comenzar a identificar la necesidad de la integración de los estudios de la cultura digital en las Universidades Interculturales. La reflexión crítica también implica visibilizar a la digitalización como un elemento más de diferencia y marginación de las sociedades estructuralmente segregadas. Por ello, conviene también añadir a este texto una reflexión respecto a la brecha digital como consecuencia de la globalización de las tecnologías digitales.
Brecha digital, nuevas representaciones de la desigualdad
Hablar de brecha digital nos lleva directamente a ligarla fuertemente con los aspectos de accesibilidad de las tecnologías; es decir, el nivel de conectividad que prevalece en las zonas rurales, el acceso a dispositivos digitales y la competencia en su uso. No obstante, la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) del año 2021, que emite el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, identifica un crecimiento en la conectividad en las áreas rurales con respecto del porcentaje marcado en el año 2020 (INEGI, s.f).
Delimitar los diálogos de la brecha digital al ámbito de las infraestructuras es terminar el debate en cuanto el porcentaje de conectividad llegue a una cifra significativamente alta. Conceptualmente, la brecha digital conlleva más sub espacios de análisis complejos que no se limitan al análisis de la conectividad con respecto de la infraestructura digital o el manejo y acceso a los dispositivos tecnológicos, como lo indica Reygadas (2008) “No se trata sólo de disparidades en cuanto al uso de computadoras y conexiones a Internet, sino a la cuestión más amplia de las desigualdades en el acceso al conocimiento y la tecnología” (08).
Uno de los aspectos de interés al abordar la brecha digital como parte de los fenómenos de la cultura digital que se aborden en la malla curricular de la Licenciatura en Comunicación Intercultural es la alfabetización digital. La alfabetización digital es descrita como la capacidad de los usuarios de las tecnologías digitales para aprovechar al máximo las posibilidades que brindan las herramientas digitales no s+olo en el ámbito de generación y apropiación del conocimiento, sino también en las nuevas formas de remuneración que ofrecen las plataformas digitales. Esto se convierte en un elemento importante al hablar del desarrollo económico de las comunidades indígenas, comunidades desplazadas, migrantes o socialmente excluidas y es también uno de los elementos clave que involucra a los estudiantes de UI en proyectos activos que generen espacios de alfabetización digital dentro de las comunidades que se han visto marginadas de los procesos de digitalización y por ello se encuentran al margen de las nuevas formas de producción económica y de desarrollo (Reygadas, 2008)
Reflexión final. Explorar nuevas representaciones en el espacio digital
Las interacciones interculturales ya no ocurren solamente de manera física, sino también a través de los diversos medios y dispositivos digitales. Los estudios que aborden la interculturalidad como base conceptual deberán tener en cuenta la dimensión digital para comprender cómo las diversas expresiones culturales convergen y se relacionan en los espacios virtuales y medios digitales. A su vez, la integración del componente de cultura digital, debe ser un detonador de análisis reflexivos sobre las desigualdades que conlleva el acceso y uso de las tecnologías digitales para ofrecer un panorama completo de cómo se llevan estas interacciones interculturales.
En el caso de la Licenciatura en Comunicación Intercultural, la integración del estudio de la cultura digital puede extenderse a explorar nuevas formas de representación, identidad, comunidad y, sobre todo, reflexionar sobre el acceso a las herramientas de tecnología digital además de la representación de las comunidades indígenas y otros grupos socialmente marginados en los espacios virtuales para, de esta manera, formar profesionales comprometidos en el diseño de proyectos de incidencia que permitan la inclusión de estas comunidades y grupos sociales a las dinámicas propias de la sociedad de la información y el conocimiento.
Fuentes
- Casillas, M.L. y Santini, L. (2009). Universidad Intercultural Modelo Educativo. Secretaría de Educación Pública. https://www.unich.edu.mx/wp-content/uploads/2012/04/Modelo2.pdf
- Universidad Intercultural de San Luis Potosí (2019). Oferta educativa. https://www.uicslp.edu.mx/paginas/carreras.html
- Hinojo, F. y Leiva, J. (2022). Competencia Digital e Interculturalidad: Hacia una Escuela Inclusiva y en Red. REICE. Revista Iberoamericana sobre Calidad, Eficacia y Cambio en Educación. 20(2), 5-9. https://doi.org/10.15366/reice2022.20.2
- Littlejohn, S. W., y Foss, K. A. (2009). Encyclopedia of Communication Theory. Londres, California y Nueva Delhi: Sage Publications. DOI:10.4135/9781412959384
- Riverón, G. (2016). La cultura digital en la sociedad moderna. RITI Journal. 4 (8). https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=7242782
- Acuerdo número 17/08/22 [SEP]. Por el que se establece y regula el Marco Curricular Común de la Educación Media Superior. 2 de septiembre de 2022.
- Instituto Nacional de Estadística y Geografía (s.f). Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) 2021. https://www.inegi.org.mx/programas/dutih/2021/#Informacion_general
- Reygadas, L. (2008). Tres matrices generadoras de desigualdades. En R. Cordera, P. Ramírez y A. Ziccardi (coords.). Pobreza urbana, desigualdad y exclusión social en la ciudad del siglo XXI (pp. 92-114). México: Siglo XXI y Universidad Nacional Autónoma de México.