Representaciones

El Universal, Cultura, 22 de septiembre de 2008.

Botica

Jorge Mélendez Preciado

“La violencia es apropiación del mundo por destrucción”, al decir de Sastre citado por Fernando Savater en: Contra las patrias (Tusquets). A eso nos hemos acostumbrado por la nociva televisión, el cine de bobalicón y el intervencionismo yanqui. Por eso queremos hacer la guerra al vecino, al adversario, al no coincidente. Para ganar batallas trascendentes, es necesario escuchar al otro y convencer con un lenguaje razonado, seductor. Los más recientes acontecimientos muestran lo contrario. Felipe Calderón pasea contento saludando el 16 de septiembre, y llega 48 horas después a Morelia. Juan Camilo Mouriño dice, irresponsablemente, que el ataque en Michoacán es terrorista, según las leyes, en vez de hablar de un acto de ese calibre. Los dos hablan de unidad nacional y antes enviaron un mensaje insultante: no aumento al IPN y UNAM, no obstante sus logros, y baja en el rubro asignado a Salud, a pesar que las adicciones subieron 50% en seis años. Pero eso sí, abonarán más al Fobaproa y, sin duda, crecerá el dinero de las llamadas fuerzas de seguridad. La unidad nacional es un asunto muy trillado y lejano. ¿Lo entenderán los jóvenes que necesitan forzosamente emigrar por falta de oportunidades? ¿Será entendible en la clase política fragmentada y parasitaria? ¿Lo promocionarán dueños de medios que se exilan en Estados Unidos por temor a los secuestros? ¿Será propaganda de los diputados albiazules ligados a los barones de la droga? Urge proyecto nacional y discursos mesurados, no incendiarios.

Insólito

“Con…(su) empecinamiento en conservar en su gabinete de gobierno y en los principales puestos públicos a sus amigos y gente inepta, es difícil que Felipe Calderón se conserve en el poder”. Lo anterior no son palabras de los “golpistas” de izquierda, sino de un general retirado, escribe Javier Ibarrola en Milenio Diario (17 de septiembre). Por esos días hay cambios en el aeropuerto —sale el eficaz Ernesto Velasco— en la SCT y en Economía y llegan, siempre, amigos de Calderón. Que tal.

Otro dolor

Los colegas Ricardo Rocha —buena salud— y José Carreño Carlón se refieren en su colaboración semanal a películas donde George Clooney es actor importante; ello para ilustrar sus tesis. Una de las mejores del estadounidense es: Buenas noches, buena suerte, dirigida por él, en la cual (¡ojo!) periodistas de televisión desafían al sistema con la verdad. Pero en el caso de la masacre en Tijuana convendría ver Carandiru de Héctor Babenco. En Brasil, 1992, asesinaron a 111 reclusos, supuestamente para que hubiera orden. La brutalidad de los azules es constante, prohijada por los gobernantes.

El horror

Gracias a dos colaboradores (AMO y Café) puedo ver cuestiones asombrosas. Por un lado, la conversación entre el rival de Laura Bosso, Jaime Bayly, con el director radial de la Confederación del Episcopado Español, Francisco Jiménez Losanto, donde ambos “juegan” a quienes matan primero: Fidel Castro, Hugo Chávez, Evo Morales o Rafael Correa, todo porque supuestamente éstos atentan contra “la libertad del hombre”; espantoso. En el segundo asunto, la BBC titula a su corto: El poder de las pesadillas. En el mismo se dice: hoy los políticos no prometen riquezas, sino aniquilar a quienes real o supuestamente atentan contra la sociedad; terrible.

Nueva etapa

Desde hace rato se inició el combate a fondo entre Calderón y Manlio Fabio Beltrones. Ahora subió de tono por las nuevas facilidades a los concesionarios radiales, asunto que sacó a relucir inicialmente el priísta. Calderón envió la ley no importando que burlara sentencia de la SCJN y estuvieran en contra Creel y Corral, entre otros. Todo por las elecciones de 2009. O “pago de facturas”. Seguramente ambas.

Periodista de El Financiero y El Universal.
Correo electrónico: jamelendez@prodigy.net.mx

El siguiente es un ejemplo de cómo debe de citar el artículo anterior

Meléndez Preciado, Jorge, «Representaciones», en El Universal,
núm 33, 206, 22 –IX– 2008, Cultural