Ave de paso
Inés Cornejo Portugal, Vicente Castellanos Cerda | Visuales
Durante nueve años, el proyecto migratorio de Merli y Wilson fue un conjunto de trayectos de ida y vuelta. Él, con objetivos establecidos, asumió una serie de retos desde que decidió salir de Santa Elena, trabajar en San Francisco en la industria restaurantera y, finalmente, al retornar a su hogar. El proyecto no fue lineal, sino cíclico y, sobre todo, acordado y compartido con la pareja. Fue una decisión que tomó con su esposa para reunir dinero suficiente y para estar juntos. Los 2 mil dólares que él ganaba se los enviaba a Merli para construir su casa. Wilson tiene en la actualidad un negocio de venta de gasolina. Merli comparte con otras mujeres un taller de costura en una cooperativa que crearon gracias al apoyo del gobierno. El proyecto migratorio de esta pareja tuvo éxito.