Comunicación educativa: Tendencias de investigación en el 2012

  • Resulta fundamental revisar el tipo de investigación que se produce en el área de comunicación educativa, principalmente la llevada a cabo en el año 2012 (la cual está marcada por el contexto de años anteriores), pues ello permitirá evidenciar los avances y omisiones dentro del área de investigación, las problemáticas encontradas, así como los rumbos a seguir para crear mejores contextos de aprendizaje en México.
Fotografía: Gobierno de la ciudad de Buenos Aires @ Flickr

Fotografía: Gobierno de la ciudad de Buenos Aires @ Flickr

Por Caridad García Hernández / Margarita Espinosa M.

Es historia que los campos de conocimiento de la comunicación y la educación se fusionaron para dar pie a un nuevo campo conocido como Comunicación Educativa. A lo largo de más de cinco décadas, los investigadores de ambas áreas han compartido preocu-paciones y objetos de investigación comunes, donde el elemento conductor ha sido la tecnología: la imprenta, el correo y la mensajería, la radio, la televisión, el lanzamiento de satélites, la digitalización de la tecnología y sus constantes innovaciones desde los años ochenta han aportado nuevos elementos comunicativos a los procesos de enseñanza-aprendizaje.

Así, desde la comunicación hemos observado que los diferentes medios han organizado y diseñado nuevas formas de transmisión de la información. Especialistas en este ámbito –como refiere Crovi– han innovado en la producción de materiales audiovisuales que propicien el aprendizaje; la redacción de mensajes y elaboración de guiones acordes a objetivos didácticos, y la creación de dispositivos que permitan la interacción entre educandos y educadores como elemento fundamental del pensamiento crítico. Y desde la perspectiva educativa, los especialistas en ciencias de la educación han aportado reflexiones sobre el diseño instruccional de acuerdo con los medios de comunicación; a la generación  de contenidos textuales, audiovisuales e hipertextuales que propicien el autoaprendizaje en los estudiantes, el estudio de interacciones entre educandos y educadores con base en modelos educacionales innovadores y de acuerdo con las condiciones propias de los medios de comunicación y de los avances tecnológicos.

Sin embargo, aun cuando hay una historia de confluencia entre estos dos ámbitos de conocimiento, reconocida por los especialistas de ambos territorios, la integración de esos dos campos teóricos ha sido muy lenta, aunque no se ha dejado de arrojar luz sobre los factores centrales (instituciones, medios tecnológicos, mensajes, actitudes de los actores educativos, saberes, por mencionar algunos) que inciden en el proceso de aprendizaje, lo cual ha dado pie a la realización de propuesta específicas encaminadas a subsanar la problemática encontrada.

Por tal motivo es importante revisar el tipo de investigación que se produce en el área de comunicación educativa, principalmente la llevada a cabo en el año 2012 (la cual está marcada por el contexto de años anteriores), pues ello permitirá evidenciar los avances y omisiones dentro del área de investigación, las problemáticas encontradas, así como los rumbos a seguir para crear mejores contextos de aprendizaje en México.

El Encuentro anual que realiza la Asociación Mexicana de Investigadores de la Comunicación resulta un espacio pertinente para vislumbrar las tendencias de la investigación en comunicación educativa, ya que en este Encuentro asisten  investigadores de diversas instituciones  de todo el país.

En 2012 se presentaron 19 proyectos de investigación. Si se considera la temática abordada, se pueden reconocer cuatro grupos :

1) Tecnología en el ámbito educativo

a) La institución (1)

b) Actores involucrados

I. Educadores (2)

II. Educandos (4)

c) Los medios tecnológicos (5)

2) Otros espacios educativos:

los museos (2).

3) Contenidos educativos (3).

4) Reflexiones teóricas (2).

 

1. Tecnología en el ámbito educativo

Mencionábamos anteriormente que el punto de encuentro principal de la comunicación y la educación ha sido la tecnología. El interés por su estudio se ha enfocado, en el presente, tanto a su potencialidadcual recurso didáctico como a su uso y apropiación, pues el saber manejar las tecnologías de información y comunicación constituye un capital cultural fundamental en el desempeño de los individuos dentro del campo social actual en el que nos movemos. El estudio de este tópico sigue siendo el de mayor interés para los estudiosos de la comunicación educativa. En la AMIC se presentaron 12 trabajos que lo abordan; se analiza tanto el papel de la institución, de los actores involucrados (educadores y educandos) y el de los medios tecnológicos como herramientas pedagógicas.

En cuanto al papel de las instituciones educativas en el uso de la tecnología, los análisis reportan que éstas han respondido de alguna manera a las exigencias globales de incorporar las nuevas tecnologías al ámbito educativo; para ello se ha dotado a las escuelas de infraestructura, sin embargo, el mayor obstáculo que se ha encontrado es el rechazo, consciente o inconsciente, del profesorado para la adopción de estas herramientas en su labor didáctica.

Debido a lo anterior, otros análisis focalizan como objeto de estudio al profesorado. Estas investigaciones dan cuenta de las diversas competencias (de su área de enseñanza, didáctica, tecnológica) que debe poseer el docente. Reportan la dimensión didáctica y tecnológica como áreas que deben ser desarrolladas por los docentes. Asimismo, dan cuenta  de algunos de los motivos que han afectado la apropiación de las nuevas tecnologías por parte de los profesores como son las percepciones (representaciones sociales) que tienen sobre la utilidad de la tecnología. Un buen número de ellos no cree que las tecnologías digitales apoyen realmente el aprendizaje.

Los alumnos han representado otro de los focos de interés en el campo de la comunicación educativa. Los estudios privilegian sobre todo conocer, medir, el acceso, el uso y la apropiación que los estudiantes tienen de las tecnologías digitales, pues se busca conocer la competencia tecnológica que posee el alumnado. Asimismo, un par de investigaciones de este grupo toma como objeto de análisis a jóvenes rezagados en sus estudios y a jóvenes trabajadores de la Fábrica de Artes y Oficios del Distrito Federal (FARO); con el propósito de que se desarrollen oportunidades de alfabetización digital en esta población que, por diversos motivos, ha quedado fuera de la educación formal en tecnología.

Otro grupo de investigadores examina las herramientas tecnológicas y su potencialidad como herramientas pedagógicas. Aquí se distinguen primeramente los estudios enfocados a medios tradicionales (televisión y cine específicamente); a partir de una caracterización de éstos se plantea que en México no han sido explotados en el terreno pedagógico, ya sea por cuestiones ideológicas, de presupuesto o por un desconocimiento de lo que estos medios pueden lograr en el terreno educativo.

Tres investigaciones más que focalizan la tecnología como un medio educativo lo hacen a partir del análisis de plataformas y redes sociales. Se parte de la idea de que la educación en línea es una posibilidad para combatir el rezago educativo de los países, pero ésta ha encontrado problemas, por ello, los análisis buscan detectar la problemática con la que se enfrentan los usuarios. Un grupo de académicos se da a la tarea de evaluar el diseño de un curso, mientras que otro se orienta a la revisión de los diversos elementos que tiene una plataforma. Ambos grupos concluyen que factores como el desconocimiento de la propia herramienta como la actitud de los participantes son factores que inciden significativamente en el aprendizaje en línea. Un tercer estudio examina las redes sociales, específicamente, la interacción característica de ese espacio. Se analizan los mensajes y la  influencia recíproca que se logra mediante dichas interacciones, ello con el fin de explorar este espacio como un ámbito de aprendizaje.

 

2. Otros espacios educativos: los museos

La investigación en comunicación educativa registra un interés por el estudio de espacios que privilegian la educación informal, tal es el caso de los museos. Parece ser que el objeto mismo de investigación (el museo) enfoca necesariamente, en la actualidad, la atención tanto de la dimensión comunicativa como de la dimensión pedagógica. En el par de trabajos presentados en la AMIC en 2012 se argumenta desde los marcos teóricos de la comunicación y de la pedagogía la necesidad de que ambas disciplinas sean consideradas en la construcción de museos, reales y virtuales, con el fin de ofrecer el contexto adecuado al visitante para una mejor aprehensión de contenidos tanto cognitivos como actitudinales.

 

3. Contenidos educativos

Algunos estudios realizados durante 2012 desde la óptica de la comunicación educativa dan cuenta de problemáticas detectadas en ciertos estados de la República Mexicana (riesgos de toda índole que afectan a la sociedad entera, obesidad en niños y poco desarrollo de habilidades comunicativas de los egresados de una carrera universitaria). Así, se mencionan el papel que deberían desempeñar los medios masivos de comunicación, las redes sociales, la tecnología digital en el combate de dicha problemática.

 

Reflexiones teóricas

Hemos nombrado así al último grupo temático de investigaciones en comunicación educativa, pues se trata de un par de estudios realizados a partir de revisiones teóricas. El primero de ellos da cuenta  de la relación histórica entre la comunicación y la educación; mientras que el segundo focaliza la importancia de “escuchar” en el aula como requisito para el aprendizaje.

Hasta aquí la revisión temática de las 19 investigaciones en comunicación educativa presentadas este año en el espacio de la AMIC. Ahora bien, si consideramos otro parámetro de organización de estos grupos como el de educación formal, no formal e informal, tenemos que se privilegió el estudio de fenómenos que acontecen en las escuelas, o en los espacios, reales y virtuales, que dependen de las instituciones educativas, pues son 14 los estudios que se ubican dentro del concepto de educación formal. En tanto que el estudio de algún fenómeno que acontece en el ámbito de la educación informal, es decir, aquel aprendizaje que se da fuera de las aulas, en la cotidianidad de los actores sociales y que se presenta en el transcurso de toda la vida, registró cuatro proyectos de investigación. Un solo proyecto consideró como objeto de estudio la educación no formal, aquella práctica que si bien es sistemática y metódica, no forma parte del sistema educativo graduado.

En cuanto a los modos de investigación se optó preferentemente por el análisis cualitativo. Catorce proyectos de investigación declaran haber utilizado como instrumentos para este tipo de análisis técnicas como la Investigación acción participativa, focus group, la entrevista semiestructurada y revisión documental. En tanto que el análisis cuantitativo fue realizado por tres proyectos de investigación a partir de cuestionarios estructurados. Dos estudios utilizaron modos de investigación mixto (cuantitativo y cualitativo).

 

Tareas pendientes

Hace más de 50 años Paulo Freire destacó la importancia de la comunicación como elemento base de la educación –“el hombre fue creado para comunicarse con los otros hombres”– y subrayó la importancia del diálogo en la construcción del conocimiento. En tal sentido nos parece relevante subrayar que las investigaciones en este campo, en términos generales, muestran una preocupación por los problemas que se manifiestan en la educación, desde distintas miradas de la comunicación. Éste fue el motivo principal de sus trabajos de investigación.

Los medios de comunicación constituyen uno de los elementos centrales que da pie a investigación (interacciones, apropiación), la elaboración de mensajes (análisis de mensajes y materiales didácticos), el análisis de interacciones (estudiantes y profesores). El trabajo empírico es el predominante, mientras que el trabajo teórico solo ocupa algunos casos.

Este último aspecto es una llamada de atención sobre una de las tareas pendientes de quienes nos interesamos en la investigación en comunicación educativa, es decir, la profundización en marcos teóricos y reflexiones epistemológicas en los cuales se perciba esta integración entre comunicación y educación (la cual en ocasiones queda totalmente diluida), privilegiando el conocimiento que tenemos los comunicólogos sobre los diferentes aspectos que habría que aportar desde nuestro ámbito: comprender el funcionamiento/comportamiento de elementos en los procesos de comunicación en procesos de enseñanza aprendizaje.

No cabe duda de que la AMIC ha hecho un importante trabajo en la integración de investigadores del campo que, en este caso en particular, se reúne con cierta regularidad año con año para reportar avances. La revisión de los trabajos publicados en los últimos 10 años da cuenta de la maduración registrada por un ámbito comunicativo de reciente creación, pues aun cuando la comunicación y la educación han estado hermanadas a lo largo de la historia desde los cursos por correspondencia, o a través de la radio, por citar algunos ejemplos, es entre 1950 y 1970, cuando se vieron los primeros estudios aún incipientes y todavía inclinados hacia el proceso educativo. Las investigaciones realizadas en 2012 evidencian que todavía la dimensión comunicativa, en ocasiones, queda desvanecida.

Por último, cabe apuntar que el campo de la comunicación educativa es muy amplio y abarca muchos más ámbitos que el institucional y que el uso y apropiación de tecnologías. Incluso podría afirmarse que en los entornos de la vida cotidiana (educación informal), es donde se realizan procesos de enseñanza aprendizaje fundamentales para el desarrollo del sujeto en la sociedad, donde los agentes construyen representaciones sociales y donde se alimentan y configuran múltiples capitales culturales apropiados socialmente.

Este tipo de aprendizaje, poco estudiado, influye poderosamente no solo en la actuación del sujeto en sociedad, sino en su relación con las instituciones educativas, con la apropiación de la tecnología, en las interacciones mediáticas, y con todo aquello que implica la educación formal. Estos escenarios también tendrán que abordarse desde la mirada que articule la comunicación con la educación.

Nota

1) Los números entre paréntesis indica el número de proyectos pertenecientes a esa temática.

 

Referencias

Asociación Mexicana de Investigadores de la Comunicación (2012). Análisis sobre la construcción del campo de estudio y la producción de conocimiento. Memorias XXIV Encuentro Nacional. Recuperado de: http://www.amicmexico.org/biblioteca/encuentro2012/www.amic2012.uadec.mx/index.html.

Asociación Mexicana de Investigadores de Comunicación (2011). La violencia y la comunicación. Memorias XXIII Encuentro Nacional. Recuperado de: http://www.amicmexico.org/biblioteca/encuentro2011/memorias.html.

Crovi, D. (2007). Comunicación educativa y mediaciones tecnológicas. Hacia nuevos ambientes de aprendizaje. México: Instituto Latinoamericano de la Comunicación Educativa.

———y Garay, L.M. (2011). “Comunicación y educación: hacia una construcción de estado del arte”. En Vega, A. (coord.). La comunicación en México: una agenda de investigación. 2ª edición. México: CEIICH, PCPYS-UNAM.

Freire, P. (2009). La educación como práctica para la libertad. 2ª edición. México: Siglo XXI.

 

Profesoras investigadoras de tiempo completo Titular “C”, de la Universidad Autónoma Metropolitana, unidad Cuajimalpa en la Ciudad de México. Integrantes del grupo de investigación en Comunicación educativa en sistemas abiertos y a distancia.

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