Ataques a la prensa

El Universal, Cultura, 24 de noviembre de 2008.

Botica

Jorge Mélendez Preciado

A María Luisa Erreguerena, por su palafoxiano

La crisis que vivimos, inocultable a pesar de los dislates frecuentes del calderonismo, impacta a todos. A los medios, especialmente de dos maneras: la coartación de la libertad de opinión e información y la miseria de apoyos a los impresos. En el primer caso, El Universal lo ha documentado (Editorial, 19 de noviembre). Además, hay dos periodistas asilados en Canadá, entre ellos un alto jerarca; otro par quiso obtener refugio en Estados Unidos y no lo logró y Emilio Gutiérrez fue detenido al tratar de quedarse en gringolandia. Todos han sido amenazados por bandas delincuenciales. Lo que muestra claramente, la desconfianza en la protección y la justicia mexicana. También, aumentan las demandas contra periodistas, otra forma de que los poderosos hagan de las suyas sin contrapeso. Recientemente se dio a conocer el presupuesto federal. ¡Seis mil millones de pesos se autorizaron al gobierno para sus anuncios! De ellos, únicamente 300 serán para los impresos, ya que 95 por ciento se le otorga a la televisión (básicamente) y radio. En un momento que, por apuros económicos, la gente compra menos diarios, lo que se pretende es que muchos de ellos truenen. Algo que han confiado voceros gubernamentales a funcionarios de prensa. Si a todo esto le sumamos que muchos almacenes y empresas privadas están en graves problemas (Cemex, CM y otras más), la publicidad privada irá, necesariamente, a la baja. Por lo tanto, la situación de los diarios y periodistas es alarmante. Claro, próximamente habrá discursos oficiales acerca de que vamos bien, hay libertades y tenemos un rumbo firme que hace palidecer hasta Obama. La realidad es otra.

El macizo

El tránsito en el DF va de mal en peor. Las múltiples obras emprendidas por Marcelo Ebrard han exasperado incluso a militantes del PRD. Pero la estrella de que nada funcione correctamente es: Armando Quintero. El encargado de ordenar el transporte sanciona a microbuseros que se accidentan, pero deja que miles de unidades sigan en estado lamentable y, lo más preocupante, que los manejadores hagan lo que les viene en gana: paran a media calle, no respetan los semáforos, insultan a los usuarios y hasta cobran de más cuando les place. Mientras tanto, Quintero protege a su hermano que sigue acumulando taxis. Un ex priista que obtuvo muchas placas en administraciones pasadas, dice que los Quintero tienen mil. Hay más anomalías.

El buen “Circo Ataibo”

Una ejemplo, claro y evidente, que PIT Uno formó bien y con profundidad a quienes estuvieron a su lado, lo mostró el segundo de los Pacos, quien en un programa televisivo acerca de Villa (dos horas), mostró lo importante de enseñar la historia lúdicamente. Quien atacó Columbus era, faltaba más, contradictorio pero dispuesto a jugársela por los suyos. Hay descubrimientos múltiples en la programa, entre ellos que tenemos historiadores desconocidos tan importantes como muchos académicos estirados y la contradicción yanqui. Sería conveniente que History Chanel repitiera la emisión.

Dislate y oropel

Quizá contagiada por los regímenes panistas, que no son pulcros en sus expresiones, Josefina Vázquez Mota anda confundiendo a Fuentes con Paz y el título de la más famosa obra de aquél. Bien que haya ofrecido disculpas la secretaria. ¡Urgen asesores! Mientras tanto, concluyeron los actos más relumbrantes de Carlos el escritor. Ahora lo mejor será leerlo, aun en obras fallidas: La cabeza de la hidra. Falto crítica seria que hiciera un balance sin tantas loas. Germán Dehesa se enojó. Y no invitaron, que sepamos, a José Buil, polemista del autor de La muerte de Artemio Cruz.

Actual

Frente al sacudimiento económico que padecemos, el cual va para largo, es indispensable leer no sólo a Marx, que aumentó sus ventas en Berlín en 300 por ciento, sino también a Muhammad Yunus: El banquero de los pobres (Paidós). Su experiencia de cómo los microcréditos abaten la pobreza y no las obras faraónicas. Ojo, Hacienda.

Periodista de El Financiero y El Universal.
Correo electrónico: jamelendez@prodigy.net.mx

El siguiente es un ejemplo de cómo debe de citar el artículo anterior

Meléndez Preciado, Jorge, «Ataques a la prensa», en El Universal,
núm 33, 269, 24 –XI– 2008, Cultural.

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