¿Equidad?

Botica

Jorge Mélendez Preciado

Las elecciones que habrá en julio muestran que la democracia mexicana va en retroceso. Ello porque existe apoyo oficial al partido en el gobierno, lo cual desde tiempo atrás se veía a través del envío de millones de cartas de programas sociales, dinero a montones para becas, salud e incontables anuncios televisivos. De las seis entidades en las cuales tendremos cambio de mandatario, según las encuestas, únicamente en Querétaro triunfará el PAN. Curioso, en un estado donde el anterior déspota, Ignacio Loyola, erigió un aeropuerto y una clínica inmensa, ambos edificios los demolieron por su anómala construcción. No obstante ello, triunfó el albiazul, Francisco Garrido Patrón. Represor en toda la línea, lo mismo hizo apresar a Concepción Moreno, una señora que daba apoyo a los migrantes que pasaban por ese territorio; mandó detener a Jacinta Marcial, Alberta y Teresa, acusadas de “plagiar a Afis”, y en su último informe posibilitó que reprimieran al poeta Julio Figueroa, quien protestó por el asesinato de Antonio Hernández a manos de un millonario exonerado. ¿Por qué no obstante esos atropellos e inmensos despojos el panismo sigue dueño de Querétaro? Gracias a las “acciones” sociales, muchas de ellas provenientes del centro del país, entre las que se cuentan: becas para alumnos con 77 años de edad, reparto de despensas, dinero a grupos vulnerables y hasta la compra de algunos vivales que se presentan como opositores bajo las siglas del PRD y otras franquicias. Lo mismo que hacía el PRI, ahora bajo la sombra de un partido que se decía honesto. Tiene razón Pepe Reveles en: Las manos sucias del PAN, el alumno ha superado al maestro. La política sin ética continúa. ¿Hasta cuándo?

Preocupados, aunque no tanto

Televisa está en dificultades financieras por sus préstamos con el exterior. No obstante, saben qué aquí todo marcha alegremente pues no se le toca ni con una mínima sanción. Lo cual exhibe, nuevamente, el poder real en México.

Exabruptos

Sin con Vicente Fox la política exterior fue un carnaval, en la actualidad resulta una tragedia. La burla de Nicolás Sarkozy a todos los poderes, se dio porque en Los Pinos no saben quiénes son los personajes que invitan ni cómo enfrentar los problemas. Diferentes compañeros en los medios alertaron sobre el fajador que venía con la princesa apetecida. Nadie hizo caso. Luego surgieron los aspavientos contra Estados Unidos por declaraciones incisivas aunque en general ciertas: hay un terrible problema con el narcotráfico. Incluso, en este caso, se echó mano del viejo nacionalismo, el cual es contradictorio con el nuevo papel del blanquiazul, afiliado a la ODCA , cuyos dirigentes son Manuel Espino y el esquizoide de Fox. Fernando Savater dice en: Contra las patrias «todo nacionalismo es una teocracia explícita e implícita”. Tal vez por eso el dios intocable muda de parecer y nadie reclama. Menos

Germán Martínez que disculpa a Carstens de los abucheos que recibe, festeja que Molinar sea correligionario leal y a cada rato dice: “sigo insistiendo” (sic).

Regresión

Nuevamente Puebla está en la mira. Ahora, debido a que la alianza PAN-PRI, con el camaleónico Panal, logró que en el Congreso del estado fuera suprimido el aborto, sin importar las circunstancias del embarazo, y sancionara la eutanasia. La resolución se logró, no obstante que Beatriz Paredes y hasta Emilio Gamboa enviaron a compañeros para evitar que Othón Bailleres, jefe de los diputados locales, lograra sus propósitos. Frente a éste, Rocío García Olmedo, Alberto Arriaga y otros tricolores se unieron a mujeres, activistas sociales y jóvenes que no salen del asombro al darse cuenta que el oscurantismo no es algo del pasado, más bien está presente. Habrá controversia constitucional al respecto. Lo grave del asunto es que, según algunos, fue un ensayo para que el ejemplo cunda a lo largo del país. Alto a los yunquistas.

Pasado y presente

Los sexenios de Lázaro Cárdenas y Manuel Ávila Camacho dan idea como la política varía para mal. Mientras en el primero hubo avances en diversos sentidos, el segundo trajo el retroceso y la corrupción. Incluso a su hermano, Maximino, se le llamó desde entonces: “El quince por ciento”, ya que eso pedía a quienes le solicitaban contratos gubernamentales. México modernidad y corrupción en los cuarenta de Stephen R. Niblo es un trabajo excepcional acerca de la historia inolvidable.

Periodista de la RMC
Correo electrónico: jamelendez@prodigy.net.mx

El siguiente es un ejemplo de cómo debe citar el anterior artículo:

Meléndez Preciado, Jorge, «¿Equidad?», en El Financiero,
México, 17 –III– 2009, Botica, Cultura

Deja una respuesta