Botica 202 – Primera centena / Adiós / Adelante
- Gran entusiasmo y enorme desconfianza trajo la celebración de los 100 días en el poder de Enrique Peña Nieto.
- Esther Orozco busca una “salida digna” a su errático, personalizado y beligerante rectorado.
- Miguel Ángel Mancera recibió a un grupo de ciudadanos que lanzaron un proyecto de nuevo espacio televisivo.
Por Jorge Meléndez Preciado
Primera centena
Gran entusiasmo y enorme desconfianza trajo la celebración de los 100 días en el poder de Enrique Peña Nieto. En su discurso, el mandatario dijo que llegó para transforma y no para administrar. Algo que ha hecho, en cierta medida, con algunas reformas como la educativa- la cual es necesario concluir- y la de telecomunicaciones presentada el lunes 11- y que analizaremos próximamente. Y, sobre todo, por la detención de Elba Esther, asunto que no mencionó en su alocución celebratoria. En otras áreas las cosas no funcionan. El combate a la violencia sigue igual; es más el fenómeno ha crecido en varias zonas del país; los grupos civiles armados proliferan aunque se detenga a uno. Por cierto, los ataques contra medios y periodistas aumentan, incluyendo el primer asesinato del sexenio y la imposibilidad de informar lo que ocurre en varias regiones por ataques constantes de narcotraficantes; o sea, la libertad de información está secuestrada en algunas entidades. La encargada de una oficina de ayuda a periodistas, dependiente de Gobernación, Laura Borbolla, dijo que no se puede hacer mucho ya que la dependencia, erigida el sexenio pasado, fue prácticamente una simulación; en ese terreno, la respuesta a quienes han sufrido agravios es prácticamente nula. Hay una campaña para enfrentar el hambre que simplemente no avanza y es vista como un instrumento para ganar elecciones. Y el combate a la corrupción es un discurso. Hay golpes efectivos que han subido la imagen de Peña Nieto, pero eso puede traer, según especialistas, un presidencialismo más autoritario en lugar de las transformaciones democráticas que necesitamos. Estamos al inicio de algo que puede cambiar la vida, aunque en tanto la política esté secuestrada por los partidos que están en el Pacto, las transformaciones no serán de hondura y perdurables.
Adiós
Esther Orozco busca una “salida digna” a su errático, personalizado y beligerante rectorado. Luego del nombramiento de Enrique Dussel, por el consejo que no debieron revocar los estheristas, ella se ha dado cuenta que no podrá manejar los asuntos a su conveniencia. Trató de que la recibieran algunos funcionarios, y nuevamente le cerraron las puertas. Ya hizo contacto con el filósofo que será interino y seguramente con tal de que no cause más daño se le propondrá un adiós decoroso. Pero que se deben realizar grandes obras y reconstituir una Universidad que la megalomanía y la torpeza la han tenido en jaque más de seis meses, ni duda cabe. Próximamente la ALDF, Derechos Humanos del DF y el GDF pondrán las cosas en orden, incluso reivindicando a quienes fueron las primeras víctimas de la prepotencia y la negación de la pluralidad.
Adelante
Hace poco el jefe de gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, recibió a un grupo de ciudadanos que lanzaron un proyecto de nuevo espacio televisivo. El plan, que dimos a conocer, encabezado por Virgilio Caballero y Omar Raúl Martínez, es utilizar parte de la frecuencia del Canal 21, que tiene varias posibilidades digitales, para tener una señal con nuevas voces y programas, indispensables hoy. Mancera quedó de analizar a detalle el asunto y dar una solución lo más rápido posible. Por cierto, la manutención del nuevo canal no le costará un centavo al DF.
Olvidadizos
En una conferencia en Harvard, a Felipe Calderón le preguntaron qué opinaba de Elba Esther y su detención, el señor no quiso decir nada a pesar que le insistieron; muestra de su valentía. Y al cardenal Norberto Rivera le inquirieron acerca de los pederastas en la Iglesia, y el amigo de Marcial Maciel, dijo que no escucharía a esos católicos exigentes.
Dos
Muy actual es la muy recomendada y recomendable obra: El hombre que amaba a los perros de Leonardo Pardura (Tusquets); la novela de más de 700 páginas lejos de cansar es una invitación a tratar de concluirla lo más rápido posible, ya que es muy eficaz e interesante; más para los mexicanos ya que trata del asesinato de Trotsky por Ramón Mercader. Mientras el muy intenso en todas sus actividades, Alberto Ruy Sánchez, no presenta una nueva provocación: Elogio del insomnio (Alfaguara); para los que no soportan lo extraordinario, he aquí un reto.
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