Sean Penn: Dos facetas de un actor emblemático

• El actor de Milk y Mystic River cuenta entre sus experiencias haber estado casado con Madonna y haber ganados dos veces un Oscar a Mejor actor.
• Su labor de compromiso social y humanitario es una de sus facetas menos conocidas.

Fotografía de Erprofe @ Flickr

Por Carmen Cano Gordón

Colaboradora de la publicación CineAdictos que edita la FES- Acatlán

Referirse a Sean Penn es concentrar la atención en un gran actor que nunca pasa desapercibido, sea por su destacado desempeño en el cine o por su labor en pro de causas que, a nivel mundial, requieren de apoyo, no sólo mediático, sino también de entrega y compromiso desinteresado.

Inicios de su carrera

Sean Justin Penn nació en Santa Mónica, California el 17 de agosto de 1960 de padre cineasta y madre actriz. Su hermano menor era actor (fallecido), y el otro, músico. Por tradición familiar, parecía que su camino estaba trazado. Así, desde su adolescencia mostró interés por la actuación, participando en actividades teatrales de su comunidad,  interés que creció hasta el punto de dejar sus estudios de leyes para ingresar a una escuela de actuación en Los Ángeles.

En 1980 debutó profesionalmente en una serie de televisión y al finalizar ésta se mudó a Nueva York, iniciándose en Broadway con un papel en la puesta “Heartland” que saca adelante con éxito, lo que le abre la puerta para la obtención de un protagónico en la película “Taps” y, dos años después, se gana el reconocimiento de la crítica por su trabajo en la cinta “Reformatorio”.

En 1985 se casa con Madonna, relación que termina en 1989. Durante ese lapso ambos protagonizan “Shanghai Surprise”, cuyo fracaso no constituye ninguna sorpresa; no obstante, Penn, a base de buen desempeño, supera este bache con su actuación en la nueva versión de “No somos ángeles” y en “Pecados de guerra”, ambas en 1989.

En 1991 se une sentimentalmente a Robin Wright Penn, con quien tiene dos hijos, casándose con ella cinco años después. En ese mismo año, dirige su primera película “The Indian Runner” y en 1993 la crítica lo reconoce por su desempeño en “Carlitos Way”, al lado de Al Pacino. En 1995 dirige su segunda película “Vidas Cruzadas”, protagonizada por su amigo Jack Nicholson y también recibe su primera nominación al Oscar por su actuación en “Pena de Muerte” con Susan Sarandon.

Sean Penn y los Premios Oscar

En 1999 y 2001 recibe su 2ª y 3ª nominaciones al Oscar por “El Gran Amante” y “Yo soy Sam”, respectivamente. En 2003 destaca por su actuación en “21 Gramos”, con Naomi Watts y Benicio del Toro y en “Río Místico”, dirigido por Clint Eastwood. Por su trabajo en esta última se hace merecedor a su 4ª nominación, obteniendo por primera vez el Oscar a Mejor Actor.

En los años siguientes protagoniza varias películas menos importantes hasta que en 2009 por su actuación en “Milk” (2008) obtiene por 2ª vez el Oscar a Mejor Actor. “Milk” puede considerarse una película emblemática porque en ella se da cuenta de la importancia del personaje Harvey Milk, al ser el primer homosexual elegido para ocupar un puesto público en los Estados Unidos.

Por lo que se refiere a su filmografía, en este 2010 prevé estrenar cuatro películas: “The tree of life”, junto a Brad Pitt; “Fire games” con Naomi Watts; “The three stooges”, nueva versión de “Los Tres Chiflados”, al lado de Jim Carrey y “Cartel”, la más reciente.

Labor social y humanitaria

La otra faceta de Sean Penn que nos interesa destacar es la relativa a su compromiso real con aquellos que requieren de ayuda humanitaria en diversos lugares del mundo, como es en el momento actual el caso de Haití, país al que llegó una semana después del terremoto que lo sacudió implacablemente y en el que ha permanecido desde entonces, trabajando intensamente. Para poder ayudar de la mejor manera posible, fundó,  junto con la mecenas Denis Jenkins, la Organización de Ayuda para Haití Jenkins-Penn que provee, entre muchas otras cosas, intangibles, pero no por ello faltas de sentido, cuidado médico, filtros de agua, alimentos, una clínica para madres y víctimas de una creciente “epidemia” de violaciones sexuales.

La actuación de Sean Penn, ahora en el terreno humanitario, ha llamado la atención de los medios a nivel mundial y, por lo que respecta a México, entre otros periodistas, Blanche Petrich, enviada del diario “La Jornada” para cubrir lo que sucede en Haití, entrevistó a Penn en Puerto Príncipe y el resultado de éste muy buen trabajo se publicó el Martes 13 de Abril en el propio periódico.

De lo dicho por Penn a la periodista sólo queremos destacar algunos párrafos y solamente uno de Pietrich como introducción:

“El laureado intérprete de “Milk” y “Mystic river”, figura que siempre va a contracorriente en el universo del cine y la fama, aterrizó a mediados de enero en esta ciudad, que se había convertido en un escenario del infierno en la tierra y desde entonces aquí está”. Expresa el actor: “…desde entonces estoy aquí. ¿Sabe? Los haitianos tienen esa cosa tan especial que te atrapa” Y atrapado está.

A la pregunta sobre qué es lo que lo motiva a dejar su vida para volcarse en esta labor, responde:

“…de algún modo siento que,…si Haití no logra cambiar su futuro después de este hecho terrible, entonces nada puede cambiar en ningún otro lugar del mundo. Si aquí logramos un punto de inflexión, todos los países podrán beneficiarse del modelo que aquí surja…”

En referencia al sentido común de los haitianos expresa:

“Ante el peligro ha habido una muy buena respuesta; hay un esfuerzo muy vigoroso por reubicar a toda esta gente. Y también ha habido una respuesta muy positiva de la propia gente. Es común oír hablar de la resistencia de los haitianos. Bueno, yo diría que hay que hablar más bien del sentido común de los haitianos, de su sensatez.”

Hasta aquí este doble perfil de un personaje comprometido con su vida y su circunstancia y que, de muchas maneras, constituye un ejemplo a seguir.

El artículo anterior se publicó originalmente en CineAdictos
y debe de citarse de la siguiente forma:

Cano Gordón Carmen, «Sean Penn; dos facetas de un actor emblemático «,
en CineAdictos, Num.93 , mayo, 2010