Sin género de duda

La política en tacones
Pilar Ramírez

Está por decidirse quién será la próxima directora del Instituto Veracruzano de las Mujeres; después de que parecía no haber aspirantes, diez mujeres se inscribieron para competir por el puesto y finalmente se obtuvo una terna que ahora espera la decisión del gobernador del estado.

Habrá un dilema en la evaluación de las credenciales académicas de las aspirantes; Estela Casados González es antropóloga de la Universidad Veracruzana y sus estudios de posgrado los hizo en la Universidad Autónoma Metropolitana, con una maestría en Desarrollo Rural y un doctorado en Ciencias Sociales cuya área de especialidad se denomina Mujeres y relaciones de género; Edda Arrez Rebolledo ha acumulado títulos universitarios; cursó tres licenciaturas, dos en educación normalista y una en informática, una maestría en Educación que imparte la Universidad Pedagógica Veracruzana y dos doctorados que no se relacionan directamente con el estudio de género aunque nadie diría que puede haber un área de conocimiento ajena a esta perspectiva. Mónica Mendoza Madrigal, por su parte tiene una licenciatura y una maestría en el área de la Comunicación.

Las tres aspirantes cuentan con sólida formación académica. En cuanto a la trayectoria profesional, la de Mónica Mendoza se ha centrado en el ámbito de la comunicación, Edda Arrez se ha dedicado mayoritariamente a la educación aunque actualmente se desempeña como titular del Servicio Nacional del Empleo en Veracruz, ambas han incursionado en algún momento en el tema de género, sea por su trabajo político o profesional.
Estela Casados ha llevado de la mano su interés por los temas de género con su formación académica, combinación que ha resultado en un desempeño profesional vinculado a la perspectiva de género, robustecido con su preparación académica. Estela Casados es académica de la Universidad Veracruzana donde coordina investigaciones antropológicas sobre género, este trabajo se ha enriquecido con su colaboración en organismos de la sociedad civil, en los que durante 16 años asesoró a campesinas veracruzanas para conformar organizaciones y poner en marcha proyectos de desarrollo. Conoce de primera mano la problemática de mujeres que viven en condiciones de pobreza, lo que fortalece su desempeño en la academia. Estela Casados ha vertido su experiencia en el periodismo informativo y de análisis con perspectiva de género, como lo muestra su trabajo en el programa de radio Mujeres que saben latín y forma parte del consejo asesor del Observatorio de Género y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres.

Las fichas curriculares de las aspirantes, sin embargo, no serán el único factor a tomar en cuenta para elegir a quien sustituirá a Martha Mendoza Parissi. No se descarta una consideración política, sin embargo, es preciso que se tome en cuenta precisamente el trabajo que desarrolló la primera directora del instituto. Abrir brecha en un tema, en un área o poner en funcionamiento una institución es un arma de muchos filos. Martha Mendoza supo combinar la gestión institucional, la eficacia administrativa y la firmeza que se requiere para colocar el tema de género en la agenda social veracruzana.

Seguramente no fue una labor sencilla, las resistencias son inevitables porque el tema de género abandonó el status de ornato para convertirse en un tema político que no pocas veces generó puntos de vista divergentes entre el funcionariado veracruzano; sin embargo, el Instituto Veracruzano de las Mujeres dejó escuchar su opinión y su directora supo sortear las dificultades que implica una mirada nueva y diferente a problemas añejos como es la violencia laboral, la violencia física, como los asesinatos de mujeres que a la luz de la perspectiva de género no pueden verse como un producto más de la violencia social sino como la agresión a un grupo social en razón de su sexo y por lo tanto es preciso llamarlos por su nombre: feminicidios, no asesinatos contra mujeres.

Al elegir a la segunda directora del Instituto Veracruzano de las Mujeres deberá considerarse también que Veracruz ha tenido un lugar decoroso en el tema a nivel nacional, gracias a un trabajo que combinó el conocimiento del tema, una gestión pertinente y la cercanía con las organizaciones de la sociedad civil, es por esto que varias de ellas están apoyando la postulación de Estela Casados. No sólo tiene la formación académica y el conocimiento para desempeñar el cargo, sino que con su elección también se daría voz a la ciudadanía que se ocupa de los temas de género.

Conozco de cerca la trayectoria y el trabajo de Estela Casados y digo, sin ningún género de duda, que su elección sería un acierto para las mujeres y para Veracruz.

Periodista y colaboradora de la RMC

El artículo anterior se debe de citar de la siguiente forma:

Ramírez, Pilar, «Sin género de duda« en Revista Mexicana de Comunicación en línea,
México,agosto, 2010.
Disponible en:
http://www.mexicanadecomunicacion.com.mx/politica.htm
Fecha de consulta: 18 de agosto de 2010.