Don Ignacio López Tarso: digno representante de la Época de Oro del cine
Cineadictos
Carmen Canon Gordon
Colaborador de la publicación Cineadictos que edita la FES- Acatlán
Nuestro personaje nació como Ignacio López López, pero cuando pretendió incursionar formalmente como actor, Xavier Villaurrutia, su maestro, su mentor, su amigo, le advirtió que con su nombre verdadero no lograría, ni ser actor ni, por supuesto, tener éxito; era necesario adoptar un nombre más atractivo, para lo cual, de nuevo, Ignacio recurrió a lo aprendido en el Seminario, en relación con San Pablo Apóstol, originario de la ciudad de Tarso; le gustó ese nombre y así decidió sustituir el segundo López por el nuevo Tarso, previa consulta con Villaurrutia, quien lo aprobó y, desde entonces, lleva ese apellido y lo usa, incluso, en documentos oficiales.
Lo anterior no es más que parte del anecdotario que siempre gusta y divierte. Entremos ahora a lo verdaderamente importante: su destacada labor en cine, televisión, discos, premios e incursión en la vida política de nuestro país.
Es el año de 1954 el que marca el inicio de su quehacer artístico en el cine con la película La desconocida, que no le agradó para nada y hasta le hizo pensar que “eso” no era lo suyo y que debía retirarse, pero cuando empezó a participar en papeles importantes, junto a figuras consagradas, su percepción cambió.
Su consolidación en cine se dio con Macario (1959), película bien realizada, basada en un argumento de Bruno Traven, relacionado a la cultura e idiosincrasia del mexicano, en relación con la muerte.
Posteriormente, intervino en películas tan importantes como: Nazarín (1958); Rosa Blanca (1959); El hombre de papel (1963); El gallo de oro (1964), con argumento de Juan Rulfo; Tarahumara (1964); Pedro Páramo (1967) Las visitaciones del diablo (1968) ; La vida inútil de Pito Pérez (1969); La Generala (1970); El profeta Mimí (1972); En busca de un muro (1973) ; Los albañiles (1976), Toña Machetes (1985), entre otras.
Como se menciona en el título de esta colaboración, López Tarso pertenece, sin discusión, a la Época de Oro del cine mexicano. A lo largo de su carrera cinematográfica, ha compartido créditos con actores de la talla de Dolores del Río. Marga López, María Félix, Katy Jurado, Elsa Aguirre, Carlos López Moctezuma, Pedro Armendáriz, Emilio “Indio” Fernández…
Otra faceta de este gran actor ha sido la televisión. Ha estado en más de 20 telenovelas, algunas de ellas muy importantes y que señalan momentos clave dentro de este género artístico, como, por ejemplo, El derecho de nacer .(1981). También participó en casi todas las telenovelas históricas que marcaron un hito dentro de este manoseado género: La tormenta (1967) ; La constitución (1970); El carruaje (1972); El combate (1980); Senda de gloria (1987) y también en otras tan renombradas como: Amor prohibido (1979); Imperio de cristal (1995); La casa en la playa (2000) y las más recientes: La esposa virgen (2005); Peregrina ( 2005) y El Pantera (2007).
También, durante su ya larga vida, ha realizado presentaciones teatrales y grabado discos leyendo, recitando, interpretando corridos revolucionarios, acompañado de música folklórica mexicana y de algunas actrices conocidas como, por ejemplo, Raquel Olmedo. En esta faceta ha tenido un gran éxito y sus discos se reconocen ya como un referente clásico dentro de este género.
Su calidad histriónica y la constancia de su quehacer en tantas facetas dentro del medio artístico, lo han hecho merecedor de numerosos premios, entre los que destacan: El trofeo con la figura del dios azteca Xochipilli, por su actuación en la obra “La zona intermedia” de Emilio Carballido; dentro de la Agrupación de Críticos y Periodistas de Teatro se ha instituido un premio que lleva su nombre. También se ha hecho acreedor a diversos premios que se mencionan a continuación: Golden Gate Award (Festival de Cine de San Francisco, Estados Unidos) en 1960 por Macario y en 1963 por El hombre de papel. Ariel (Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas, México) en 1973 por su actuación en Rosa Blanca. Association of Latin Entertainment Critics Award of New York, Estados Unidos, 2001. Gran Orden de Honor Nacional al Mérito Autoral, México, 2005. Medalla de Oro Conmemorativa Bellas Artes, México, 2006. Hispanic Heritage Society Award, Estados Unidos, 2006. Ariel de Oro de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas, 2007, México, por su trayectoria fílmica.
De manera colateral, López Tarso ha incursionado en política: en 1974 ocupó puestos y cargos importantes como Presidente del Consejo Directivo de la Asociación Nacional de Intérpretes; Secretario General de la Asociación Nacional de Actores y del STPC. También fue electo diputado federal en la LIV Legislatura.
Ignacio López Tarso, con 83 años de vida es, hoy por hoy, uno de los actores mexicanos de mayor prestigio y cuya presencia nos llena de orgullo a todos los que amamos el arte de la actuación en el que él ha sido y es un MAESTRO.
El artículo anterior se publicó originalmente en Cineadictos
y debe de citarse de la siguiente forma:
Cano Gordon, Carmen, «Don Ignacio López Tarso: digno representante
de la Época de Oro del cine», en Cineadictos, Num. 79, noviembre, 2009.