El cine de arte afortunadamente ya no es exclusivo

Cineadictos

José Alfredo Flores Rocha

Colaborador de la publicación Cineadictos que edita la FES- Acatlán

Para la mayoría de las personas el denominado Séptimo Arte es uno de sus pasatiempos favoritos, para otras, es una forma de vida, un espacio para la reflexión y el análisis de la diversas corrientes cinematográficas.

Hoy en día, el cine, además de ser arte, es una industria que emplea a miles de personas en todo el mundo y que deja una derrama económica de millones de dólares.

Sin embargo, más allá de esta clase de consideraciones, es para los directores, realizadores, guionistas, actores, productores, fotógrafos y escenográfos, una forma de expresión con la que se cuenta, una forma que se tiene para retratar una realidad próxima o lejana. De allí que el Séptimo Arte nos haga copartícipes de esa realidad que nos desea compartir; finalmente, el objetivo de todo artista es que su trabajo se difunda y conozca entre el público, que su obra sea apreciada, tanto por la crítica especializada, como por las mayorías.

Hasta hace algunos años, el denominado “cine de arte” era considerado como un producto cultural exclusivo para las reseñas, festivales nacionales e internacionales, foros, muestras, y sólo era exhibido en cierto tipo de salas y recintos universitarios. Afortunadamente, para los espectadores, dicha circunstancia ha cambiado por lo que hoy la gran mayoría de las cintas que son presentadas en festivales y muestras, son también estrenadas posteriormente en las salas del circuito comercial, lo que brinda la oportunidad, al público en general, de poder apreciar otro tipo de propuestas artísticas, más allá de las que presenta el cine estadounidense, que sigue inundando las salas con películas trilladas y carentes de contenido.O
O
De allí, que haya sido de suma importancia que los productores, distribuidores y exhibidores se hayan dado cuenta de que el público también merecía contar con otras opciones y que podían convertirse en una alternativa viable para fomentar entre las mayorías este tipo de cine, y que, además de todo, podía ser un negocio redituable para seguir financiando estas cintas.

Hoy en día, no es raro ver que una buena parte de los festivales, foros y muestras de cine, sean patrocinados por las propias cadenas de exhibición, lo que brinda a este tipo de propuestas cinematográficas un espacio, no sólo dentro de las llamadas salas de arte, sino también de las carteleras comerciales.

El artículo anterior se publicó originalmente en Cineadictos
y debe de citarse de la siguiente forma:

Flores Rocha, José Alfredo, «El cine de arte afortunadamente ya no es exclusivo»,
en Cineadictos, Num. 73, mayo, 2008.

Deja una respuesta