3D: Dimensión desconocida

Fotografía: "3D" por Alberto Bolchini @ Flickr

Por Rosalba Santana López

Colaboradora de la publicación  CineAdictos que edita la FES- Acatlán

De manera natural, los seres humanos percibimos nuestro entorno de forma tridimensional, debido a que la posición de nuestros ojos nos permite visualizar un objeto desde dos posiciones ligeramente diferentes, que corresponden a la separación de los mismos. Es como si cada ojo tomara una foto de dicho objeto, estas dos imágenes, que son un poco distintas (una por cada ojo), son integradas en nuestro cerebro como una sola, permitiendo percibir el espacio tridimensional del objeto.

Las imágenes en 3D, simulan el efecto que se produce en el ojo humano mientras percibe un objeto tridimensional real. El proceso se genera cuando el proyector digital del cine reproduce las imágenes del ojo izquierdo y derecho a 144 cuadros por segundo, intercaladamente. Para ver las imágenes y decodificarlas, se necesitan lentes especiales (sí, los famosos de cartón con un anteojo rojo y otro azul). Debido a la velocidad de cuadros y a los lentes utilizados, cada uno de los ojos del espectador recibe una imagen, con puntos de vista distintos, haciendo que el cerebro interprete profundidad, mediante la fusión de las imágenes.

En la actualidad, este sistema se está utilizando mucho más y, como sucedió con la llegada del color al cine, las películas infantiles tienen la delantera en la carrera por los avances tecnológicos, tanto es así, que los expertos dicen que el 3D es el futuro del cine. El número de pantallas ha aumentado significativamente, a nivel mundial, y con cada estreno 3D, se abren más.

En temporada vacacional tres películas super publicitadas han sido la delicia, no sólo del público infantil, sino de la audiencia en general y todas son en 3D.

“Shrek para siempre”. En lo personal, considero que no es una digna historia para concluir las aventuras del ogro verde y su noble corcel (o sea, Burro). Un simple  detalle: el villano Rum-plestiltskin no es el mismo que sale en la tercera parte y creo que luce más él que el personaje principal. Shrek se nota cansado. Los personajes secundarios (Los tres cochinitosLoboPinocho) salvan la trama, incluso El Gato con Botas pierde su encanto, y no por ser obeso, sino porque su participación parece metida con calzador. Demás está decir que, de nuevo, el doblaje en español es una maravilla comparado con la supuesta gracia estadounidense de los diálogos en el idioma original.

Comparto la nostalgia de Shrek por sus días de verdadero ogro, sinceramente creo que ninguna de las secuelas pudo superar la opera prima de Dream Works; la parodia hacia “Disney World” en aquellos tiempos, fue una verdadera revelación.

“Mi villano favorito”. A pesar de que el gancho de la promoción partió de que eran los mismos productores ejecutivos de «La Era del Hielo”, no se encuentra la relación por ningún lado. Creo que como idea original, fue muy acertada, pero ya en la ejecución, le faltó un poco más de dinámica. Las tres huerfanitas, sin duda, tienen su mérito melodramático (tal vez ése sea el hilo conductor con “La Era del Hielo”).

Del doblaje en español tengo que decir, primero, que soy super fan de El Güiri Güiri, perdón, Andrés Bustamante, y aunque al principio se me hizo un poco aburrida la película, después, y conforme se va desarrollando la trama, sí me convenció. Pero, desde mi muy personal punto de vista, y no sé si alguien concuerde conmigo, creo que El Güiri Güiri no era la persona más idónea para hacer la voz de Gru, no sé por qué, pero al ver su aspecto físico siento que requería una voz más ronca, aunque tuviera el acento de Europa oriental, una voz que denotara maldad, pero a la vez ternura ¿existirá eso? A decir verdad creo que esta vez, nos quedó a deber.

Y finalmente, mi favorita, “Toy story 3”. Realmente creo que es una película de cinco estrellas. Una manera verdaderamente inteligente de terminar el ciclo de estos entrañables personajes. Estoy segura que más de uno no pudo contener las lágrimas cuando los amigos se toman de las manos al estar a punto de ser consumidos por el fuego en el basurero o cuando Andy, al final, no quiere desprenderse de Woody.

Una vez más, Disney encabeza la lista de mejor película infantil para ganar el premio Oscar. No se puede soslayar el camino recorrido por todo el equipo que diseñó esta sorprendente historia, sin duda el mantener al equipo creativo de Pixar, es un gran acierto para este coloso de la animación infantil.

El artículo anterior se publicó originalmente en CineAdictos
y debe de citarse de la siguiente forma:

Santana López Rosalba, «3D: Dimensión desconocida «,
en CineAdictos, Num. 95, agosto-septiembre, 2010

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