Oscuridad de su casa

La política en tacones
Pilar Ramírez

La aprobación de la Ley SB1070 en el estado de Arizona desató reacciones de enojo, de incredulidad y de gran preocupación entre la comunidad hispana residente en Estados Unidos. Esta ley, que otorga a la policía local facultades extraordinarias para detener a alguien si tiene la sospecha de que sea indocumentado y según la cual una persona con residencia legal cometerá un delito si se hace acompañar por un indocumentado, es la más dura de los Estados Unidos y, según dijo la gobernadora republicana Janice Brewer, surgió en respuesta a la inacción del gobierno federal estadounidense ante la inmigración ilegal.

No está de más mencionar que Arizona es el estado representado por el senador John McCain, contrincante al que venció el demócrata Barack Obama en la pasada elección presidencial. En todos lados se cuecen habas políticas y en Estados Unidos la tensión entre demócratas y republicanos está a la orden del día.

La ley SB1070, que afecta a más 400 mil migrantes residentes en Arizona, donde 29% de la población es hispana, inmediatamente provocó respuestas tanto del mismo presidente Barack Obama, quien se mostró sumamente crítico ante esta medida, como de otros representantes de gobierno y organizaciones de diverso tipo. A los pocos días de aprobada la legislación comenzaron los llamados a un boicot contra el estado de Arizona.

Entre las ciudades que se sumaron al boicot está la californiana ciudad de Los Ángeles, lo cual fue anunciado por su alcalde Antonio Villaraigosa; hizo lo propio la ciudad de San Francisco, al igual que West Hollywood, El Paso y Boston.

Organizaciones civiles también manifestaron su repudio a la ley y se sumaron al boicot. La Conferencia de Liderazgo de los Derechos Civiles y Humanos llamó a no celebrar actos en Arizona, el Consejo Nacional de la Raza ―que tiene un amplio poder de convocatoria en Estados Unidos― logró la firma de una extensa lista de organizaciones que se adhirieron al boicot, se sumaron también la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos, la Sociedad para el Avance de los Chicanos y Nativos Americanos en la Ciencia ―importante porque se reconoce que Arizona es el sexto estado con mayor porcentaje de nativos americanos en Estados Unidos― y una lista que día a día se agranda.

Asimismo, diferentes organizaciones deportivas han anunciado su decisión de no celebrar ningún juego en el estado sureño y han llamado además a no asistir a los juegos de los Soles de Phoenix y de los Arizona Diamond Blacks. Las organizaciones convocantes además de anunciar las medidas que tomarán para boicotear a Arizona, invitan a evitar el consumo de productos o bienes de empresas con sede en ese estado, como el caso de la aerolínea Airways.

El diario La Opinión, uno de los más importantes periódicos hispanos en Estados Unidos, publicó un editorial en el que se declaró a favor del boicot y en contra de todos los bienes y servicios de Arizona. La empresa Aeroméxico informó la suspensión de sus vuelos desde México hacia Tucson y Phoenix. La Universidad Nacional Autónoma de México emitió un comunicado en el que señala su decisión de suspender los intercambios de verano con la Universidad de Arizona, cuyo rector, Robert Shelton, lamentó la promulgación de la ley antimigrante; se contó además con la solidaridad de la Universidad de Stanford en California, lugar al que serán redirigidos los estudiantes mexicanos programados para participar en intercambios.

Grupos musicales, cantantes y artistas de distintas disciplinas han manifestado su opinión en contra de la ley Arizona sumándose al boicot con el anuncio de una “huelga sonora”, es el caso de Los Tigres del Norte, Café Tacuba, Juanes, Kanye West, Calle 13, Cypress Hill, Rage Against the Machine, Michael Moore, Joe Satriani, Massive Attack, Sonic Youth y la banda Angelina Ozomatli, ganadora de tres premios Grammy. El cantante de Rage Against the Machine, Zach de la Rocha, organizador del movimiento Sound strike (huelga sonora), afirma que “los seguidores de nuestra música, nuestras historias, nuestras películas y nuestras palabras pueden ser detenidos y acosados por ser morenos o negros, o por cómo hablan o por la música que escuchan”.

El rechazo a la ley SB1070 se incrementa dentro y fuera de los Estados Unidos. Organizaciones de migrantes y defensoras de los derechos civiles han realizado marchas y protestas en varias ciudades del país del norte para mostrar su repudio a esta ley racista, en espera de que estas muestras de rechazo obliguen a eliminarla.

Es posible que ustedes hayan presenciado una escena en la que no falta un solidario que interviene en apoyo de mujeres golpeadas por hombres abusivos y luego es insultado por las ofendidas que terminan defendiendo a sus golpeadores. Las ciudades estadounidenses que tomaron la decisión de boicotear a Arizona por maltratar a los migrantes quizá hayan experimentado esa sensación.

La dignidad mostrada por gobiernos y organizaciones contrastó con la postura del gobierno federal que anunció, a través de la canciller Patricia Espinosa, la decisión mexicana de no sumarse al boicot económico contra Arizona. La población indocumentada que reside en Arizona ha abandonado México porque no encuentra aquí una forma de vida decorosa para su familia, su país los abandonó aquí y ahora los abandona allá.


Periodista y colaboradora de la RMC

El artículo anterior se debe de citar de la siguiente forma:

Ramírez, Pilar, «oscuridad de su casa« en Revista Mexicana de Comunicación en línea,
México, mayo, 2010.
Disponible en:
http://www.mexicanadecomunicacion.com.mx/politica.htm
Fecha de consulta 3 de junio de 2010.

Dos hilos y dos dedos de frente

Carlos M. Hornelas Pineda

 

«Es 2010: el reloj de la historia está sonando de nuevo” dice Javier Aguirre ante las cámaras de televisión en el spot de presentación de la llamada “Iniciativa México”, la nueva estrategia mediática de Televisa que se suma a su campaña de festejos por el bicentenario de la Independencia y el centenario de la Revolución Mexicana.

Precisamente en este marco, Televisa ha reducido los problemas de México a una metáfora futbolera: “si se quiere se puede”. Sólo es cosa de voluntad. Se ha creído su propio discurso promocional: por encima de la violencia, el narcotráfico, el encono político, la discriminación y la pedestre administración de justicia “el fútbol nos une”. Así el fútbol, se convierte en el epicentro del discurso patriotero que pone la solución a nivel de la cancha, en donde todos estamos involucrados y somos iguales. Finalmente ¿quién no quiere ponerse “la verde”?

Por esta razón se eligió a Javier Aguirre, como vocero de la ya simbiótica relación entre el gobierno y Televisa. Se juntaron el hambre con las ganas de comer pues el gobierno federal ha roto las marcas establecidas por Fox en gasto en materia de comunicación social y está ávido de buenas noticias. El presidente sermonea en el extranjero que la apreciación de los problemas nacionales son exageraciones de los medios y llama a la “unidad nacional”. Aunque hasta ahora sólo Televisa interpreta que dicha unidad es la del discurso oficial. Por ello el director técnico de la selección aparece en el spot como el líder moral del “cambio deseado” para 2010, lleno de buenas intenciones, con un alto grado de emotividad y, además, en Paseo de la Reforma, en el Ángel de la Independencia, locación en la cual se conmemora eso precisamente -la independencia- pero más recientemente lugar emblemático para la celebración de cada triunfo del tri.

Desde la última modificación a ley electoral ocurrida en 2007, en la cual se canceló la posibilidad de que cada partido político gestionara sus necesidades de comunicación social directamente con las televisoras; que dicha difusión se hiciera en tiempos oficiales sin cargo al erario; que el IFE fuera el encargado de gestionar dichos tiempos y mandara las pautas respectivas de transmisión; tanto Televisa como Tv Azteca han instrumentado diversas estrategias mediáticas para cuestionar la legitimidad de las decisiones y formas de operar de los tres poderes, particularmente de los legisladores.

Desprovistos de los otrora cuantiosos recursos en ese renglón, que representaban buena parte de sus ganancias, ahora se practica la llamada “publicidad integrada”, como la ha bautizado Jenaro Villamil, en la cual se incluye en el paquete mediático infomerciales, entrevistas, capítulos de telenovelas, promoción turística, realización de enlaces en vivo, programas de espectáculos, encuestas sobre resultados electorales y otros más. Con ello deja claro cómo ha vendido el proyecto a diversas organizaciones sociales, a la sociedad en general y en particular a los gobiernos estatales y federales: lo que no pasa en pantalla, simplemente no sucede.

El campo de acción de este tipo de comunicación social va desde la política hasta los comerciales contratados por grandes almacenes, incluso con su elenco exclusivo, como el caso de Angélica Rivera “La Gaviota” en el Estado de México que a la postre dejaría su lugar a Lucero, debido a que su propia telenovela se había hecho realidad, pues se comprometió con el gobernador del Estado de México y presidenciable, Enrique Peña Nieto. A través de sus anuncios comerciales, podemos ver un día a Andrea Legarreta en Soriana y otro a Jacqueline Bracamontes en “la Cómer”, ambas asegurando que cada uno de los almacenes ofrece los mejores precios.

Para este año, Televisa ha refinado la técnica del Policía Bueno y Policía Malo. Mientras se reserva ciertos temas por “respeto a la dignidad de las personas” como el caso de Diego Fernández de Cevallos, lucran con el seguimiento de Paulette. Mientras difunde imágenes de ejecuciones y entrevista a una funcionaria sobreviviente de un atentado contra su persona, dedica un programa de Tercer Grado para que Aguilar Camín esclarezca que no nos está yendo tan mal. Es más bien una apreciación surgida por la reiteración de estas notas en los medios.

Mientras ataca a la Corte de Justicia, a los legisladores y exhibe algunos funcionarios, presenta “las Estrellas del bicentenario” para deleite de cada gobernador que promueve su Estado.  Mientras queda bien con la maestra y realiza “Todo el mundo cree que sabe”, invita a Vítor, el conductor de una pesera a que conduzca “100 mexicanos dijieron”. Mientras realiza series sobre mujeres asesinas y sus contenidos son cada vez más violentos y gráficos en horarios no propios para menores de edad, nos recuerda que “la música es mejor en familia”.

¿Qué es entonces lo que desea obtener Televisa con “Iniciativa México”, su último producto mediático? De acuerdo con lo que han dado a conocer, se integrará a través de los siguientes ejes: calidad de vida; desarrollo comunitario; justicia y derechos humanos; buen gobierno y rendición de cuentas; y medio ambiente. Quedan ausentes – de acuerdo con Rafael Cardona- los temas de la inseguridad y la violencia. La meta es presentar una serie de propuestas surgidas de la “sociedad civil” para comprometer a políticos y funcionarios en acciones concretas a instrumentar desde el 2010. Al menos eso es lo que dice. Si uno fuera mal pensado –que no lo somos- creeríamos que lo que realmente está detrás de esto es la coordinación, cooptación y neutralización de las Asociaciones Civiles y las Organizaciones no Gubernamentales que no sean afines al gobierno en turno. Vaya, que se trata de domesticar a esa oposición a través de un discurso magno y espectacular en los medios.

Tal vez, para que dicho discurso se oiga más fuerte y más claro Televisa pueda requerir de dos hilos de fibra óptica de la Comisión Federal de Electricidad, ahora que es la única empresa postora para dicha licitación y se acerca el mundial. Claro que si no es cierto, puede ser el argumento de una buena telenovela, después de todo parece que Javier Aguirre se equivocó en primera instancia y ya no somos un país jodido. Pero ¿ tú qué haces por México? ¿Tienes el valor o te vale?

El anterior artículo debe citarse de la siguiente forma:

Hornelas Pineda, Carlos M., «Dos hilos y dos dedos de frente», en
Revista Mexicana de Comunicación en línea, México, junio 2010

Huesos

Botica

Jorge Mélendez Preciado

Cuando no se sabe por dónde ir, se llevan a cabo acciones sin sentido ni orden. En los festejos actuales tan cacareados, lo mismo  se quiere impresionar con iluminaciones espectaculares que desenterrando huesos de los cuales no se tiene la certeza que sean de héroes nacionales y se utiliza al entrenador de la selección balompédica para enviar mensajes optimistas: vamos adelante y somos triunfadores.

La realidad es que el país retrocede en todo y nada detiene la caída. En justicia no hay un castigo ejemplar a quienes fueron responsables de la muerte de 49 infantes, la única acción espectacular es la reunión de Felipe Calderón con algunos padres de los niños fallecidos. En economía, bajamos en competitividad, recaudación impositiva y no se quiere dar a conocer quiénes fueron los que no pagaron decenas de miles de pesos en impuestos. En cultura, se continúa beneficiando a pequeños grupos sin que muchos jóvenes tengan el menor aliento para sus creaciones; pero hasta los consentidos reprueban acciones del régimen (Carlos Fuentes en París diciendo que no tenemos un país seguro).

Todo este desgarriate se debe a una administración que apuesta a lo efímero  en lugar de tratar de solucionar problemas y realizar acciones de fondo. Ello ha traído como resultado que  los priistas más cuestionados (caso  Emilio Gamboa), sean vistos incluso como los posibles “salvadores” de la nación. Más  a una “izquierda” que sólo lucha por puestos políticas y enriquecerse rápidamente. Bueno, hasta las organizaciones sociales han desvirtuado sus ideales debido a prebendes de los gobiernos en turno. Complicada etapa, donde la crisis en todos los órdenes trajo el desaliento. Es urgente   encontrar nuevos caminos para una sociedad desesperada y furiosa

Tranquilo y genial

Gabriel Vargas era un hombre todo lo contrario a sus personajes: atildado, tranquilo, correctísimo y poco mundano. Parecía enclaustrado en su departamento cerca del Paseo de la Reforma , atendido en todo por su bella esposa y periodista, Guadalupe Appendini. Si bien Borola y don Regino, esposos realmente antípodas, eran los centrales, mis favoritos fueron: el hampón que se portaba bien, Ruperto Tacuche; el bardo, Avelino Pilongano, y el chico malo que cargaba su vehículo en el sobaco, el Tractor. Realmente era un gozo leer semana a semana estos cuentos. Por cierto, las historias también aparecían en El Sol de México, de lunes a viernes, aunque muchos de los originales fueron destruidos por ignorantes que los veían como un trabajo menor.

Risueño y chambeador

Conocí a Pedro López en 1969,  Universidad Patricio Lumumba de Moscú. Llegué en una especie de exilio  ya que el PCM, donde militaba, nos envió a Joel Ortega y a mí porque nos iban a dar bote ya que íbamos a ver a nuestros camaradas presos en Lecumberri. Siempre tuvimos una intermitente amistad. Pedro me codedicó dos de sus obras: una referente a economía y su, Diccionario de la clase política. Falleció extrañamente en Acapulco sin darse posibilidades de ser tan libre como deseaba que fuéramos todos. Le regale un cartón de Oswaldo Sagástegui que lo retrataba como los nuevos diputados de 1988: con tenis y playera neoyorquina, en lugar de tejana y pistola.

Acoso

La periodista Laura Castellanos, autora entre otros libros de uno imprescindible: México armado (1943-1981)Era,está siendo víctima de la presión gubernamental. Pareciera que ese tipo de actos ya no se hacían, sobre todo luego de los cantos a la libertad frecuentes de Felipe Calderón, pero la realidad es que los reivindicadores de la transformación son catalogados, siempre,  como enemigos acérrimos.

Dos

Ahora que varios funcionarios andan por todos lados hablando del cambio climático y las acciones calderonistas en este asunto han sido un enorme fracaso, sería bueno que cuando menos leyeran. “Nuestra elección. Un plan para resolver la crisis climática” de Al Gore (Océano). En Las leyes del querer (Aguilar), Carlos Monsiváis apunta varios cines de barrio (éstos y las vecindades, tan queridas por  Gabriel Vargas): “el Coloso o el Venus o el Maya o el Rialto o el Ajusco o el Bretaña o el Centenario o el Goya”, donde las cintas de Pedro Infante eran la biblia.

Periodista de la RMC
Correo electrónico: jamelendez@prodigy.net.mx

El siguiente es un ejemplo de cómo debe citar el anterior artículo:

Meléndez Preciado, Jorge, «A Trinidad Zamora ‘ Huesos», en El Financiero,
México,
31–V– 2010, Botica, Cultura.

Vivir el periodismo en Chihuahua

 

Entre la violencia del narco: Testimonios de una reportera

Marisol Marín Córdova

Directora de la Revista Electrónica Tinta

 

Aún recuerdo hace algunos años: la gente oía espantada las historias sobre tiroteos, muertos que aparecían en los cerros, en las carreteras o muy lejos de cualquier comunidad. Mi mamá decía: “Son ajustes de cuentas entre narcos, en algo anda metida toda esa gente que matan”.

Existían códigos hasta en los traficantes; todas sus peleas eran en la noche, a lo lejos, donde no había familias, sin fotos grotescas que vendieran los periódicos que compramos, o que encabezaran los principales portales de internet, cuando uno escuchaba los “narco corridos”  y pensabas que eran historias fantasiosas que se daban en otras tierras, con otros hombres, no en tu ciudad, no en mi Chihuahua.

Todavía no sé en qué momento exacto cambio la sociedad, ni cuando nos involucramos en esa ola de violencia que arrasó con nosotros, no sé a qué hora nos dejamos vencer por una batalla que no sentimos si quiera haber luchado.

Siempre tuvimos fe ciega en las autoridades, pero de repente abrimos los ojos, y comenzamos a ver toda la podrida estructura, la cual ya está tan infectada, tan carcomida, ese día mataron a la confianza de la sociedad. Ese mismo día, nos convertimos en victimas del miedo. Descubrimos que cualquier lugar puede ser una tumba, sin importar la hora ni los presentes. Solo se necesita un “elegido”, y un mal día.

Desde entonces, somos una ciudad sin ley. Las muertes aumentan como el marcador de un partido en el que vamos perdiendo, se pierde hasta la noción de los cuerpos sin vida que todo esto deja, nos acostumbramos a vivir sin oír, sin ver, con apenas respirar un poco, perdemos nuestros sentidos, perdemos nuestra libertad, pagamos un precio caro, y nos hieren nuestro espíritu norteño, lastiman a nuestros hijos, hacen llorar a tantas madres, pero todos en silencio; hay que recordar que aquí, no pasa nada, ya no sabemos quién en es malo, nos preguntamos quien es el bueno.

Antes, la lógica era tan fácil: Narcotraficante=malo, ahora ya ni se sabe, los narcos abusan, la policía es corrupta, los medios sacan provecho de esto, es un circulo vicioso que tolera la sociedad, es más bien un vortex que nos absorbe.

Las palabras clave por las mañana, en los medios locales: sirenas, policía, ejecutados, drogas, impunidad, violencia, y todo lo que tenga que ver con el narcotráfico, parece ser salido de algún estado en conflicto con los mismos, leerlo en los encabezados, en las primeras páginas de todas las revistas, escucharlo una y otra vez, no se comprara con vivirlo. Ser un periodista en Chihuahua se ha vuelto un trabajo con mucho riesgo, donde vez la muerte tan a menudo que forma parte de tu labor. Nos hemos convertido en una esquela humana.

Fotografías con otro cuerpo en el asfalto, circulan en todos los periódicos impresos y digitales, se han hecho un catalogo de muertos, las personas ya solo las observan por morbo. Hasta parece que se está haciendo ya casi una «costumbre norteña» el mirar esta clase de gráficos, ya las personas no preguntan con asombro ¿Quién se murió? ahora se dice de manera incrédula: ¿Ahora cuantos se murieron?

Nos hacemos una sociedad más fría, a la defensiva, que ya no se detiene a ayudar a nadie, al cabo que no puedes ayudar a nadie o acercarte a algún carro, por el miedo de ser asesinado, uno ya no sabe distinguir quienes son los buenos o quienes los malos, esos bandos parecen haber desaparecido hace ya mucho tiempo.

Tristemente, el periodista va perdiendo su sensibilidad, vamos perdiendo esa esencia que nos hace humanos, el amor a la sociedad, tenemos que aprender a ver los cuerpos como otra nota, el no preguntar de mas, porque podemos ser los próximos en esos macabros encabezados, aprendemos a escribir con una mano mientras nuestra cabeza gira a otro lado, ya un muerto no es una persona que alguna vez tuvo familia, vivió, y estuvo en un mal momento o con gente equivocada, ahora ese es nuestro trabajo nos guste o no, ya que el hecho de que nos parezca no es una opción, sino una responsabilidad.

Algunas veces me sorprende ver con que facilidad los seres humanos nos podemos acostumbrar a lo malo, a lo que nos duele, a lo que lastima a la soledad, a lo que la lacera cada vez un poco más, haciendo heridas profundas en el tejido social que formamos entre todos, en el que no hay responsables, solo victimas, señalamos a todos con el dedo y todos nos señalan, es como un circulo vicioso donde todos le echamos la culpa al vecino, pero no somos más que mártires, más que victimas y a la vez cómplices, por tolerar todo, por nuestro silencio que pide a gritos una respuesta, por aprender a bajar la cabeza y no exigir a las autoridades nuestro derecho por la paz, por esa seguridad que tanto nos prometen en los spots de propagandas políticas, pero que siempre olvidan a la hora de pedir cuentas, no tenemos la cultura de exigir lo que por derecho es nuestro, perdemos nuestras calles, y con ellas se va nuestra dignidad y la calidad de vida a la que estábamos acostumbrados en mejores épocas, cuando Chihuahua era llamado orgullosamente 

Las agresiones al gremio cada vez son más y desgraciadamente no es solamente por el narco, los abusos se dan por el otro lado de la moneda, como el ejército mexicano, policía municipal y federal, instituciones que deberían de ser para nuestro resguardo, e incluso civiles han sido los que han cometido agresiones físicas, verbales y de omisión en contra de los periodistas que solamente tratamos de ejercer nuestro labor de una manera digna y cumplir con nuestra orden del día.

Son muchos los ejemplos, como el de nuestro compañero Sergio Hernández, reportero gráfico de un periódico que circula en la ciudad, fue agredido cuando cubría un asesinato violento la madrugada de hoy viernes por diez personas de la sociedad civil, ante la mirada pasiva de agentes de  Seguridad Pública Municipal, lo único que hizo fue cumplir con su deber de cubrir la nota. Le pegaron para impedir que tomara fotografías.

El fotógrafo fue llevado a un hospital de la ciudad, y el diagnóstico descartó alguna fractura, pero le desviaron el tabique de la nariz. La cámara resultó quebrada y a pesar de esto, continuaron golpeando al reportero gráfico. Sergio interpuso la denuncia correspondiente en la Procuraduría de Justicia del Estado de Chihuahua. Solo dios sabrá que irá a pasar, porque eso ya ni las autoridades lo saben.

A este hecho, se suma la agresión a otro fotógrafo de un medio digital, quien fue encañonado por un militar cuando acudió a dar cobertura a una balacera en la Comandancia Norte de Seguridad Pública del Municipio de Chihuahua.

En Ciudad Juárez, a 3 horas de la capital pero tan cercano a todos los hechos que agravian al gremio, un camarógrafo un canal de televisión local, fue amenazado por elementos del Ejército Mexicano con sembrar evidencias si registraba imágenes de otro hecho violento que llegó a cubrir en aquella frontera.

Hace tan sólo unos cuantos días se dio el último asesinato en gente de los medios: Isabela Cordero, quien fuera conductora de televisión por 3 años y después manejaba relaciones publicas para una cámara de comercio, fue asesinada en su carro a balazos. El cómo y el porqué lo ignoramos, las historias nacen, la gente hablan, pero la verdadera historia aún es desconocida. Nadie a querido indagar en el homicidio, nadie vio nada, aquí no paso nada.

Los periodistas exigimos a todo momento la sanción de militares por ser los agresores en estos casos y de los agentes municipales que omitieron realizar su trabajo, así como de particulares. Que la unidad de la Fiscalía Especial para la Atención a Delitos contra Periodistas y la Procuraduría de Justicia del Estado, muestren voluntad para esclarecer cada caso denunciado ante ellos y no se culpen unos a otros. Que muestren su capacidad de investigación. Los periodistas condenamos los actos de violencia y hacemos un llamado a las autoridades y a la sociedad, para no acostumbrarnos a la violencia, pero menos aún a la impunidad, a la falta de eficacia de las autoridades pero parece que nadie nos escucha, solamente existimos cuando nos necesitan para cubrir sus eventos oficiales y sus buenas notas, ahí si somos útiles para las autoridades.

La gente de otros lados del mundo critica nuestros actos violentos, los condena, los subraya en los medios internacionales, pero solo nos miran, somos la atracción

Estamos en una guerra, sin cuartel ni armas, y lo peor es que sin general, solamente nos cuidamos la espalda y le rezamos a quien sea, con tal de no ser la siguiente noticia que saldrá mañana en nuestros cientos de digitales, que buscan la nota roja como buitres compitiendo por llegar primero, por sacar la foto más grotesca, las mejores imágenes, el concurso de la sangre comenzó, mientras más grafico sea, mejor será la imagen.

Saber que tu vida puede correr peligro es algo que no deja que la conciencia más limpia tenga descanso, somos los que llegamos primero a las escenas del crimen generalmente, antes que las ambulancias, antes que los periciales, antes que las ambulancias, antes que los ministeriales, que los policías que algunas veces les toma hasta 40 minutos en llegar, nosotros no llevamos armas, no usamos ninguna placa, nadie nos cuida, vamos a la buena de dios con una cámara, con un radio que transmite la señal policiaca, y con una cámara fotográfica, eso es lo único que se necesita como mínimo para cubrir esta clase de eventos.

El trabajo a simple vista parece algo fácil, escuchas todo el día el transmisor de radio, o incluso algunos colegas te marcan y comparten el “botín”, después de eso llegas tomas fotos, subes una nota o la preparas para su próxima impresión, la hora al igual que la víctima, puede ser cualquiera, hasta tú, eso todo mundo lo sabe, pero son como esos secretos a voces, cuando decir: “Soy periodista” espanta más que cualquier oficio, el respeto por el gremio se ha rebajado a ser simplemente otro mensajero de la muerte; del cuarto poder al mensajero de la muerte, ya nadie esta salvo, ya no somos tan importantes, cuando se involucran personas que no tienen reglas ni sienten compasión si te topas con ellos.

Otro aspecto de vivir entre narcos, es el hecho de la publicación de notas, ya después de que se termina la cobertura, la etapa de publicación se ha convertido en un anonimato en la sección policiaca, nunca faltará a quien no le guste la nota que publiques o a quien no le convenga. Cuando uno decide tomar la decisión de hacer cobertura de estas notas sabes que alguien va a resultar molesto por las mismas, si no les gusta a un bando, les va a desagradar a los otros, o las autoridades no van a estar contentas, siempre existirá alguien que te pondrá un “pero”, que te amenacen. Más de una amistad se ha perdido en el gremio periodístico al ejercer la labor.

Algunas veces el narcotráfico quiere comprar tus notas, raramente se meten con los medios, pero es muy común que se metan con el periodista, total “Todos tenemos un precio”. Esto es un arma de doble filo, ya que cuando alguien no es útil o no sirve, simplemente se pueden deshacer de su vocero. Al fin y al cabo uno mas ya da igual, el mar de muertes nos alcanza, nos está ahogando.

La muerte de periodistas y atentados contra la libertad de expresión continúan, tristemente no se ve un fin a los acontecimientos en el estado, todo mundo se queja, se manifiesta, el gobernador del estado se va a Juárez a lidiar las quejas y se regresa de nuevo a la ciudad de Chihuahua a atender las otras quejas que se hicieron mientras se fue, viene de vez en cuando a visitar Felipe Calderón, presionado por los medios y por las autoridades que no sabes que hacer, todos se pasan la papa caliente, pero nadie soluciona nada, es desilusionante ver los dimes y diretes políticos, donde todos hablan, donde alistan a mas policías, donde traen más soldados, pero la delincuencia que al parecer está más organizada, no se le ven ganas de ceder el trono en el que se encuentra, solamente escoge deliberadamente sus territorios, a su gente, a sus víctimas.

Como resultado de todo en conjunto, la gente se vuelve más incrédula, los políticos prometen más cosas y los periodistas corremos más peligro.

En unos pocos meses habrán elecciones en mi estado: 33 diputados, 67 nuevos presidentes municipales y un gobernador, las autoridades cambian, pero todos prometen lo mismo: encontrar el hilo negro de la violencia, chascar sus dedos y desaparecer a los delincuentes, hacer que uno vuelva a salir de noche y dejemos de ser prisioneros de nuestras casas, de nuestros temores, de todo aquello de lo que dejamos de creer, para ahora solamente tratar de cuidarnos los unos a los otros, las funerarias hacen su agosto, la taza de población se reduce de modo significativo y la fe parece haberse ido de mojada y cruzado la frontera con nuestro hermano mayor, porque por aquí ya nadie la ha visto.

Por el momento, los periodistas del estado, vivimos en la época con mayor libertad de expresión y a la vez con la peor autocensura, donde uno no debe de hablar de más, donde debes de ignorar lo que sabes, para limitarte a escribir lo que ven unos ojos entrecerrados que no quieren ver la realidad. De una u otra manera estamos participando en los actos, somos complices involuntarios, han secuestrado nuestra voluntad propia para ordenarnos que escribir, nosotros nos limitamos a teclear lo que nos dicta el instinto de supervivencia, nos hemos rendido ante la impunidad, nos hemos dado por vencido ante nuestros miedos, al ver que si nos pasa algo no se va a hacer nada, y eso lo sabemos mejor que nadie, porque ya hemos cubierto notas como esas 100 veces: donde una persona que vivió en el anonimato toda su vida, irónicamente tiene sus 5 minutos de fama si muere de manera violenta, mientras más misterio e incertidumbre cause y más crudas sean las imágenes, mas inmortal será ante la sociedad  y tendremos más leña de donde cortar.

Por mientras que se resuelve esto o no, a nosotros no nos queda más que seguir con nuestra labor, a ver la cara de terror de nuestras familias al salir de nuestros hogares, al besar a nuestros hijos pensando que esa puede ser la última vez que los podemos ver, a aprender a ser un soldado frio que nunca fue entrenado para  la guerra, y seguir haciendo encabezados, seguir tomando fotos, seguir viendo mas cuerpos tirados en la calle y pensando que la mejor foto es la que nos dará las primeras planas en nuestros medios.

Creo que todo esto está formando parte de nuestra cultura, si se le puede llamar de ese modo, es más fácil quejarnos desde nuestras casas por el gobierno, por el país, por la decadencia en los jóvenes, por las drogas, por lo que no tenemos, por el narcotráfico, por la violencia y la delincuencia que está de más, parece que si dios está ciego y no ve lo que pasa, nosotros estamos mudos y no decimos nada.

El anterior artículo debe citarse de la siguiente forma:

Marín Córdoba, Marisol, «Vivir el periodismo en Chihuahua», en
Revista Mexicana de Comunicación en línea, México, mayo 2010

La Red en su circunstancia

 

El entorno digital y la cooperación para la comunicación y la cultura

Raúl Trejo Delarbre

Investigador en el Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM.


No podemos seguir pensando en la cultura como si estuviera desprovista del contexto, pero también de las formas y los contenidos que les imponen las redes digitales. No debiéramos seguir pensando en la cooperación sin entenderla dentro de las nuevas realidades que se desarrollan en el marco de una cultura y una comunicación crecientemente atadas a las plataformas digitales, a la vez que potenciadas por ellas. Pero al mismo tiempo no debiéramos suponer que la digitalización lo circunscribe todo, ni que los formatos del entorno digital tienen todos la misma utilidad e imponen la misma necesidad a la cooperación, la comunicación y la cultura. Cualquier tarea de propagación y promoción tiene que tomar en cuenta el contexto digital pero sin hipotecar creatividad, comprensión, conocimiento o contenidos al encanto de la digitalización.

El dejo admonitorio de las frases anteriores se encuentra a tono con la retórica de sentencias tajantes y requerimientos imperativos que suele propiciar el contexto digital, especialmente cuando es utilizado por los medios de amplia cobertura comunicativa. La sociedad de la urgencia que hemos creado a partir de la sacralización de la velocidad, crea consumidores intensivos de bienes de toda índole pero con nuevos parámetros para justipreciarlos. Fast food, fast access, fast track, son divisas de una época en la que la comida, el acceso, las soluciones rápidas, son estimadas por la diligencia con que llegan más que por cualidades de otra índole.

En la sociedad de la información, convertida en sociedad de la celeridad, se premia al apremio. La transmisión de noticias y las transacciones financieras son paradigmas de esa necesidad por la velocidad. La noticia periodística siempre ha requerido de originalidad, frescura y, precisamente, novedad. Pero cuando está sometida a los parámetros de transmisión al instante que impone la industria de la información, la noticia se condensa en el hecho escueto y el periodismo que depende de ella comienza a dejar de ser el oficio que no solamente identifica lo novedoso sino que además le da contexto y explicaciones a ese acontecimiento.

La circulación de capitales, en el otro ejemplo, nunca ha reparado en fronteras geográficas ni, salvo a regañadientes, en soberanías estatales. Pero cuando es espoleada por el acceso de millares de inversionistas a las redes telemáticas en donde pueden mover, arriesgar, explotar o retirar sus capitales en un santiamén, la inversión se limita a la especulación con secuelas como las que actualmente padece la economía global.

Mencionamos al periodismo y a las finanzas como dos áreas en donde la velocidad ha desplazado a otros valores: la precisión, la originalidad y la elucidación, entre los parámetros cada vez menos frecuentados para aquilatar a las noticias. O el desarrollo social, la planeación y la creación de infraestructuras, en el caso de las economías nacionales. Pero podríamos aludir a otros campos.

En los terrenos de la comunicación y la cultura, que son ambas actividades ligadas a los contenidos y en donde la calidad siempre entra en tensión con la cantidad, la velocidad impone parámetros que apenas hace pocos años comienzan a ser relevantes. La posibilidad de conocer un libro, una película o el álbum de un grupo musical en cuanto son puestos en circulación y prácticamente al mismo tiempo en todo el mundo, hace de la simultaneidad un valor frecuente. Los productos culturales, independientemente de sus rasgos autóctonos, tienden a ser ubicuos en esta aldea globalizada por las redes digitales. Las posibilidades que, así, se abren para irradiar, reproducir y multiplicar –pero también para remedar, rehacer e incluso plagiar y de nuevo propagar sin control alguno casi cualquier producto cultural–, abren opciones y problemas antes insospechados en la creación y la divulgación de tales contenidos.

La parquedad y la instantaneidad con frecuencia son motivo de superficialidad e insustancialidad en contenidos de toda índole, pero las tecnologías digitales pueden ser utilizadas con otras prioridades y características. Allí radica uno de los desafíos cardinales, quizá el principal, en cualquier proyecto de cooperación para la comunicación y la cultura.
    
Usos, retos y temas para la cooperación

Resulta evidente que la cooperación en materia de cultura y comunicación se encuentra situada, hoy en día, en una era determinada por los recursos digitales. Ese reconocimiento nos permite sortear discusiones un tanto innecesarias. Pero si bien es claro que el contexto insoslayable en el que ha de realizarse cualquier esfuerzo cultural y comunicacional es de índole digital, no lo son tanto las características ni las implicaciones de tal entorno.

Aun se mantiene, entre los interesados en estos temas, una discusión ahora algo reiterativa pero con frecuencia intensa acerca de los rasgos y los alcances de la sociedad de la información. Las connotaciones empresariales y/o arbitrarias que ha llegado a tener ese concepto, han conducido a no pocos especialistas a preferir otras denominaciones para el entorno singularizado por las conexiones y los formatos digitales que hoy se aprecia en nuestros países.

Para la cultura y la comunicación, así como para la cooperación que busque alentarlas, el entorno digital que define a esta sociedad de la información supone, entre otros retos, la necesidad de articular nuevas decisiones, definiciones y actitudes en temas como los siguientes.

Nuevas formas de creación cultural

El arte digital, la literatura hipertextual, la música respaldada en simulaciones acústicas, el video habilitado por computadora, son expresiones de los nuevos campos desarrollados en este contexto. Se trata de expresiones que no sustituyen a las que se realizan con otros soportes tecnológicos, pero las complementan y posiblemente las acotan de manera irreversible.

La estructura narrativa de la novela, por ejemplo, puede tener rasgos distintos si ha sido escrita a mano, en máquina mecánica o en ordenador. Y su lectura puede ser distinta si se hace en papel o en una pantalla. El cine, cuando es digital, adquiere ritmos narrativos e incluso texturas gráficas diferentes a los que suscitaban los filmes analógicos. En ocasiones, la flexibilidad y el acceso relativamente sencillo y barato de los formatos digitales favorecen el trabajo de creadores excluidos de los circuitos mercantiles para el patrocinio y la promoción de bienes culturales. Así, tales productos y contenidos pueden alcanzar una difusión más amplia.

Es pertinente no ignorar, pero tampoco magnificar el alcance de las nuevas redes digitales en este campo. Es difícil que una obra cinematográfica relevante se propague a través de segmentos difundidos en YouTube, pero sin duda la posibilidad de publicar videos que pueden ser contemplados por cualquiera que los busque o encuentre en la Red está propiciando situaciones novedosas en campos tan diversos como las relaciones personales, la información periodística, la confrontación política y desde luego la creación cultural.

El formato digital favorece la reproducción y la divulgación, pero también la modificación de los contenidos de toda índole. Estos cambios suelen propiciar reflexiones acerca del sentido de la realidad enriquecido o deformado, según se vea, por los recursos digitales. La literatura académica sobre la realidad virtual ya es cuantiosa –y con frecuencia un tanto redundante–.

Originalidad, criterio de calidad a discusión

La originalidad es consustancial a la relevancia y al valor, en todos los sentidos, de una obra cultural. Nadie viaja hasta el Museo del Prado para mirar una reproducción de Las Meninas sino para estar delante de Velázquez y su obra original. Los incunables de la Biblia de Gutenberg son inapreciables, aunque haya muchas ediciones que repiten el mismo texto. La originalidad de una obra está relacionada con su autenticidad. Pero ¿qué sucede cuando las técnicas de reproducción actuales permiten fabricar duplicados exactos de un cuadro, igual que de cualquier libro o video? ¿Qué pasará cuando dispongamos de una réplica idéntica del Guernica que se exhibe en el Museo Reina Sofía que permita apreciarla sin que sea necesario ir hasta Madrid y que incluso se pueda transportar con facilidad y sin poner en riesgo la obra original? ¿Y qué valor estético, pero también informativo además de formativo, pueden tener las versiones de Las Meninas o del Guernica en los museos virtuales que hay en Internet? Las opciones creadas por la digitalización abren posibilidades de apreciación e instrucción culturales que obligan a replantear, o por lo menos a complementar, las políticas en ese terreno.

Nuevas fronteras del derecho de autor

La concepción básica que considera que el autor de una obra es dueño de los derechos patrimoniales sobre ella, sigue siendo reivindicable. Pero cuando tales derechos son usufructuados por empresas y no necesariamente por los autores, o  la autoría se difumina en enmarañados contratos corporativos, esa definición inicial tiende a modificarse y no precisamente en beneficio de los creadores.

Las posibilidades que abren los recursos digitales para la reproducción e incluso la apropiación y modificación de una obra cultural han incorporado nuevos dilemas que pocas veces están siendo resueltos de acuerdo con el interés de los autores y mucho menos de los consumidores de productos culturales. Si compro un disco de Joaquín Sabina y guardo una copia en mi ordenador, seguramente nadie me lo reclamará. Pero si esa copia la hago en un CD quizá esté incurriendo en una infracción, no tanto o no solamente a los derechos de ese autor sino a los intereses de la empresa que comercializa sus interpretaciones. Si ese CD se lo regalo a un amigo, la perspectiva empresarial considerará que estoy perpetrando una transgresión legal. El impuesto europeo a todos los soportes de carácter digital que pueden ser utilizados para copiar archivos parte de la suposición de que todos somos infractores. A pesar de gravámenes como ese, las copias digitales se han multiplicado en dimensiones incalculables.

En otro ejemplo, si estoy buscando un libro ya agotado de Néstor García Canclini y saco una fotocopia del ejemplar que encontré en la biblioteca de mi Universidad, estaré incurriendo en un delito. Pero cuando Google Books digitaliza ese y varios millones de libros para colocarlos en línea y sin haber recabado necesariamente el consentimiento de sus autores, muchos consideran que se trata de una manera de propagar la cultura y de un servicio a los lectores. Y lo es, sin duda alguna.

La posibilidad de tener en la Red miles de miles de títulos, parece cumplir la fantasía borgeana sobre la Biblioteca de Babel que soñaba maravillosa e infinita. Pero así como el diablo está en los detalles, tratándose de asuntos culturales el obstáculo se encuentra en los dólares. Cuando Google Books cobre por descargar de la Red tales libros, el negocio será de esa empresa y no de los autores cuyas obras serán leídas –y copiadas, y multiplicadas– a partir de la disponibilidad en línea.

Cualquier autor estará complacido con la posibilidad de llegar a lectores que de otra manera quizá jamás habría tenido. Pero esa tendría que ser una decisión suya y no de quienes mercantilizan sus derechos, o de quienes someten sus textos al océano ciberespacial. Una política cultural para difundir contenidos de la manera más amplia y fiel posible pero sin infringir los derechos del autor de cada obra tendría que atender a la decisión específica de los creadores, en cada caso.

El sistema Creative Commons, creado por Lawrence Lessig, permite que el autor de una obra establezca el tipo de derechos que desea conservar, o compartir, respecto de un texto, una imagen o cualquier otra creación intelectual o artística. Estas, insistimos, son realidades que amplían la complejidad de la cooperación cultural y comunicacional, de la misma manera que abren nuevas opciones de intercambio y circulación de contenidos.

El periodismo en un mundo hiperinformado  

En una concepción amplia, el periodismo es una de las expresiones culturales más dinámicas y significativas. Pero incluso prescindiendo de esa apreciación, se puede reconocer que en la propagación de la cultura, y desde luego en el ejercicio de la comunicación, el periodismo resulta esencial. Por eso no se encuentra fuera de lugar en este recuento de circunstancias alteradas por el entorno digital.

El periodismo contemporáneo, especialmente el que se expresa por escrito, padece varias crisis. Lo aquejan las vicisitudes financieras de empresas periodísticas lo mismo de dimensiones titánicas que circunscritas a poblaciones aisladas y pequeñas. Lo afectan, además, la competencia de los medios electrónicos y ahora de la Red, la disminución de lectores y el menoscabo en los hábitos de lectura, la tendencia a la homogeneización de las noticias y al empobrecimiento editorial de sus contenidos. Esa crisis múltiple es de identidad, pero también de sustentabilidad. Y, significativamente, todos los pronósticos parecen coincidir en que el futuro del periodismo pasa necesariamente por lo que haga en Internet.

Cuando algunos tremendistas dicen que el periodismo va a desaparecer e incluso le ponen fecha a ese acontecimiento infausto, lo confunden con el periódico impreso y se despistan, también, acerca de la función que el periodismo cumple en las sociedades. El periódico tal y como lo conocemos, impreso en tinta y papel, en algún momento será prescindible salvo quizá para unos cuantos diletantes. Pero el periodismo se expresará en medios de toda índole, lo mismo audiovisuales que hipertextuales y desde luego cada vez más en formatos multimedia. El cambio principal no se encontrará en el soporte tecnológico merced al cual se difunde, sino en el tipo de periodismo que prevalecerá en el entorno digital. Y allí es donde, otra vez, nos encontramos frente a modificaciones que afectarán el quehacer cultural y comunicacional.

El periodismo del futuro inmediato, que es el único que se puede avizorar hoy en día, se debatirá entre dos coordenadas. Una de ellas es la brevedad y la fugacidad de la noticia tremendista y/o sensacionalista que gana grandes titulares –o que acapara el segmento superior de las pantallas en los diarios digitales– y que propone antes que nada emociones transitorias y reciclables en cualquiera de los órdenes temáticos en los que se organiza la información. Lo mismo en las secciones financieras y políticas, que en espectáculos o deportes, la estridencia es el criterio básico para jerarquizar las noticias en ese tipo de periodismo.

El otro modelo supone un periodismo que va más allá de la noticia, que da seguimiento a los hechos y ofrece materiales capaces de ponerlos en contexto. Ese periodismo de explicaciones, se interesa en los asuntos culturales más que el periodismo de sensaciones. Se trata de un periodismo que, en medio del galimatías de hechos y suposiciones, datos y referencias, incitaciones y mensajes de toda índole que enfrentan los ciudadanos de la sociedad de la información, organiza los contenidos y propone prioridades para sus destinatarios. Se trata de un periodismo que, al reconocer intereses y requerimientos de sus lectores, reivindica la noción del interés público en la búsqueda, la circunstancia y la propagación de noticias.

Ese periodismo de contexto y que aspira a la explicación tiene que ser profesional. Las figuraciones acerca de la desaparición del periodismo profesional, que sería reemplazado por espontáneos autores de blogs y fotógrafos de teléfono móvil que suben sus instantáneas a la Red, soslayan las necesidades de jerarquización que como hemos indicado se encuentran en la médula del trabajo periodístico, así como la continuidad y la acreditación que suelen tener los medios de comunicación establecidos. Lo que tendremos será una creciente imbricación entre espacios de aficionados, algunos de los cuales ya funcionan con estándares profesionales, y medios de información que requieren la confianza de sus audiencias para recibir la publicidad o, en el caso de los medios públicos, el financiamiento estatal que les permitan seguir trabajando. De hecho, la presencia en sitios web y la apertura de espacios de interacción y deliberación como los blogs, se han vuelto indispensables para medios de comunicación de toda índole.

Transformaciones en el libro y otros soportes culturales

También están cambiando, no sabemos con qué plazos, los formatos convencionales para la propagación de la cultura y el conocimiento. Las discusiones más encendidas se concentran en torno a la vigencia del libro tal y como lo hemos conocido hasta ahora. A muchos de quienes nos hemos formado en los libros –y más aún a quienes hemos tenido ocasión de escribir algunos– nos resulta enfadoso suponer que hay quienes auguran su desaparición. Quizá es preciso matizar tales pronósticos. Los libros que conocemos como volúmenes de hojas encuadernadas subsistirán siempre que haya quienes los aprecien e incluso atesoren. Pero ya se encuentra entre nosotros la primera generación de mujeres y hombres que está creciendo en un mundo en donde las pantallas digitales tienen una relevancia mucho mayor que las páginas de papel y tinta. Cada vez más, los niños y jóvenes leen más textos en pantalla que de la manera convencional. Aún no sabemos con certeza si ese cambio de formato implica que entienden mejor o peor las asignaturas escolares, o que son capaces de alcanzar mayor o menor creatividad, agudeza y conocimiento que quienes aprendieron de la manera hasta ahora convencional. Sobre todo, no contamos con distancia ni con datos duros suficientes para saber si el texto en pantalla se lee con el mismo ritmo y provecho que en el libro habitual.

El libro no se encuentra atado al papel, de la misma manera que el cine no lo está al celuloide. Por eso su estructura, secuencia y contenidos pueden trasladarse a formatos digitales sin que por eso deje de ser, precisamente, un libro. Los dispositivos para leer libros digitales (Kindle, e-book reader e incluso agendas electrónicas o reproductores con pantalla como los Ipod más recientes) tienen una capacidad de almacenamiento que puede superar varias estanterías de nuestras bibliotecas y padecen, desde luego, limitaciones importantes. La mayoría de ellas se relaciona con las costumbres que hemos adquirido al leer libros convencionales.

Los libros en tinta, papel y encuadernados seguirán siendo atractivos y, en muchas circunstancias, seguramente constituirán una opción pertinente para difundir conocimiento y esparcimiento entre personas y/o en áreas que carecen de equipamiento informático. Sin embargo el abatimiento de la brecha digital, parsimonioso pero constante, permite suponer que en donde hay bibliotecas cada vez existirán menos motivos para que no haya, también, ordenadores con Internet.

De esa manera y aunque decirlo resulte tan impopular, en algún momento los libros en tinta y papel llegarán a ser objetos extravagantes como la ballesta, la gaita y el miriñaque, que hoy siguen existiendo aunque sus funciones ya no son necesarias o las cumplen mejor otros dispositivos. O como la pluma estilográfica o la máquina de escribir mecánica: nada nos impide utilizarlas, e inclusive pueden ser símbolos de elegancia o excentricidad, aunque sean tan poco prácticas.

Trabajo intelectual y creación en red

Los recursos digitales permiten la colaboración para crear documentos de toda índole, incluso en procesos de elaboración que pueden ser permanentes, o casi. La idea de una obra (escrita, plástica, icónica, como sea) concluida y definitiva, lo mismo que la creación a cargo de un autor que tiene todo el mérito por ese trabajo, se dislocan ante nuevas formas de elaboración y creación.

En Internet, o en otros espacios digitales enlazados en red, es frecuente encontrarnos con expresiones de trabajo intelectual y cultural expandible, modificable y de autoría colectiva. El caso más conocido es la Wikipedia. Las entradas de esa enciclopedia en línea están en constante evolución y no tienen autor único. Como ese, hay sitios que exhiben e incluso abren a la intervención de quienes quieran hacerlo, textos, imágenes, videos o audios que pueden ser modificados en línea.

El documento en permanente proceso de reelaboración puede tener resultados o calidad muy diversos e inaugura desafíos, a la vez que oportunidades, a una nueva concepción de cooperación cultural. Existen ejemplos venturosos de ese afán colaborativo, por ejemplo el software de código abierto cuyos creadores iniciales permiten la intervención de otros especialistas en informática que depuran, mejoran o trastocan esos programas de cómputo. Pero también hay, desde luego, experiencias de elaboración colectiva en diversos órdenes disciplinarios y artísticos que no siempre son de calidad reconocible y cuyos resultados conducen a añorar la creación a cargo de un solo autor.

Las redes sociales

Además de vincular contenidos las redes digitales también –y ahora, posiblemente antes que cualquier otra cosa– enlazan personas. El tránsito que se ha experimentado desde los ya viejos tableros de discusión de los años 80 a las ya no del todo funcionales listas de correos de los 90 y ahora a sitios que acopian millones de páginas personales que pueden ser organizadas y consultadas de acuerdo con las preferencias de cada quien y según los permisos que cada usuario otorgue para la divulgación de sus datos, señala el recorrido de la comunicación en línea hacia una mayor diversidad de opciones de sus usuarios. Esa flexibilidad creciente para colocar contenidos de cualquier temática y en formatos diversos está ceñida, sin embargo, a las reglas de cada red social.

Los usuarios de Facebook, MySpace, Hi5 o Netlog, entre otras más, construyen comunidades, transitan por ellas, se exhiben y miran, intercambian y discuten o solamente contemplan lo que otros dicen, según el apetito participativo de cada quien. En un sentido amplio, allí hay reproducción y circulación –y eventualmente creación– de cultura en variadas manifestaciones. Pero además allí se establecen, aunque a veces resulten tan efímeros como la permanencia de un post en la portada de Facebook, los cánones que con frecuencia influyen en el gusto musical, literario, fílmico, plástico, etcétera, de millones de usuarios de estas redes. Esos reconocimientos o reconvenciones que se acuñan en línea, experimentan rápidamente la prueba de la popularidad o el descrédito medidos en accesos a cada página y en ocasiones transitan a los medios de comunicación convencionales.

En tales redes se manifiesta una parte del interés social por la cultura en sus más misceláneas dimensiones. La utilidad que pueden tener en una estrategia de promoción y cooperación, parece evidente. Sin embargo, igual que en otros temas relacionados con la cultura y el entorno digital, resulta preciso no exagerar sus capacidades. En tales redes, salvo excepciones, es difícil propagar contenidos literarios o artísticos salvo que sean muy estruendosos o que se divulguen en pequeños circuitos de personas ya interesadas en ellos. En otros casos, los formatos a los que deben ajustarse los usuarios resultan refractarios a la deliberación o a la circulación de contenidos sistemáticas y amplias. Resulta difícil decir algo más que una exclamación cargada de dos o tres adjetivos en los 140 caracteres que, como máximo, se pueden difundir en cada entrada de Twitter.

Atisbos a la infraestructura digital en Hispanoamérica

Casi no hay áreas de la vida pública, así como de la privada, que no se desarrollen hoy en día en clave digital. La creación y el intercambio culturales, las transacciones y la especulación económicas, la propagación así como la trivialización de los asuntos públicos, la formación y difuminación de consensos políticos, la educación y las fuentes de su menoscabo cotidiano, las relaciones entre las personas, se realizan en buena medida con recursos de esa índole.

Las redes digitales, Internet antes que nada y como columna vertebral de ellas, propagan y facilitan –también jerarquizan, magnifican y en ocasiones enmascaran– contenidos de toda índole. Se trata de redes que conducen y comunican, pero cuyo efecto va más allá de informar y enlazar.

La expansión global de las telecomunicaciones ha creado un nuevo entorno digital. Su limitación más elemental se encuentra, precisamente, en las insuficiencias que aún experimenta esa infraestructura. En todo el mundo, e Hispanoamérica no es la excepción, la propagación de las telecomunicaciones reproduce desigualdades sociales y económicas. En el campo de la cultura y la educación, la disponibilidad o la ausencia de computadoras e Internet significa rezagos adicionales a los que ya padecen las zonas más desprotegidas de nuestros países y sociedades.

La brecha digital cambia constantemente, de la misma manera que se modifica la definición de ese concepto. La brecha digital ya no manifiesta solamente la diferencia entre los que están conectados a las redes digitales y quienes no disponen de tales servicios.

La apropiación que las sociedades de nuestros países hacen de estos recursos es diversa y también cambiante. Todavía prevalece el consumo de contenidos muy por encima de la producción de sus propios contenidos por parte de los usuarios, incluso entre los más jóvenes. La incorporación de los recursos informáticos sigue siendo una tarea que despliegan y aprovechan las empresas dedicadas a proveer tales servicios pero no parece que constituya una prioridad de los sistemas educativos en muchos de estos países.

Hay mucho por aprender acerca de estos nuevos y cambiantes hábitos. El diseño de cualquier estrategia para la cooperación en materia de cultura y comunicación tendría que partir de un diagnóstico puntual acerca de tales usos. El entorno digital podría favorecer la cooperación multilateral particularmente cuando los desajustes financieros, que son otra expresión de la interacción global, agobian a las sociedades de todo el mundo. Para ello hace falta identificar realidades y tendencias como las antes apuntadas y comprender al contexto digital no sólo como una plataforma tecnológica sino como un entorno que propicia interacciones y apropiaciones nuevas. Para aprovechar y entender ese contexto es preciso dejar de pensar de manera analógica.

El anterior artículo debe citarse de la siguiente forma:

Trejo Delarbre, Raúl, «La Red en sus circunstancias», en
Revista Mexicana de Comunicación, Num. 119, México, noviembre 2009/ enero 2010

Fecha de consulta: 12 de mayo de 2010

El tránsito a los ambientes comunicativos

Foto: "Free Internet" por Striatic @ Flickr

Numeralia de la Web en México durante 2009

Octavio Islas/ Amaia Arribas

Investigador de Proyecto Internet- Cátedra de Comunicación Estratégica y Cibercultura, Tecnológico de Monterrey, Capus Estado de México/ Doctora en Periodismo y Comunicación, egresada de la Universidad del País Vasco.
Investigadora en el Proyecto Internet- Cátedra del Tecnológico de Monterrey, Capus Estado de México
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El principal servicio informativo en torno al estado de Internet en el mundo, estima que la población de usuarios de la web en el planeta asciende a 1,733,993,741. La penetración mundial de Internet fue establecida en 25.6%.  De acuerdo con el “World Internet Usage Population Statistics”, del total de usuarios en el mundo, 42.6% se concentran en Asia; en Europa, 24.1%; en Norteamérica, 14.6%; en América Latina y el Caribe, 10.3%; en Medio Oriente, 3.3%, y en Oceanía/Australia,  1.2%.

La mayor penetración porcentual se presenta en Norteamérica (74.2%); en segundo lugar, en Oceanía y Australia (60.4%); en tercer lugar, en Europa (52%); en cuarto lugar, en América Latina y el Caribe (30.7%); en quinto lugar, en Medio Oriente (28.3%); en sexto sitio, Asia (19.45%) y finalmente África (6.8%).

Podemos pronosticar que en los próximos años se incrementará el número de usuarios de Internet en Asia. En la actualidad, la penetración de Internet en esa región es una de las más bajas (19.4%), apenas superior a África (6.8%). Sin embargo, en Asia se concentra el mayor número de usuarios en el mundo (738,257,230), que en la actualidad representan 42.6% del total. Asia es el principal mercado de Internet en el mundo, y lo seguirá siendo por lo menos durante la presente década.

La información que la World Internet Stats ofrece sobre América Latina y el Caribe, incluye 20 países, como podremos apreciar en la Tabla 1.

Tabla 1
Población y total de usuarios de Internet
en América Latina y el Caribe

País
Población estimada al 30 de septiembre de 2009 Total usuarios de Internet Penetración de Internet en la población
Argentina 40,913,584 20,000,000 48.9%
Bolivia 9,775,246 1,000,000 10.2%
Brasil 198,739,269 67,510,400 34.0%
Chile 16,601,707 8,368,036 50.4%
Colombia 43,677,372 19,792,718 45.3%
Costa Rica 4,253,877 1,460,000 34.3%
Cuba 11,451,652 1,450,000 12.7%
Ecuador 9,650,054 3,000,000 31.1%
El Salvador 7,185,218 826,000 11.5 %
Guatemala 7,185,218 1,960,000 14.8 %
Honduras 7,833,696 658,500 8.4 %
México 111,211,789 27,600,000 24.8 %
Nicaragua 5,891,199 185,000 3.1 %
Panamá 3,360,474 934,500 27.8 %
Paraguay 6,995,655 894,200 12.8 %
Perú 29,546,963 7,636,400 25.8 %
Puerto Rico 3,966,213 1,000,000 25.2 %
República Dominicana 9,650,054 3,000,000 31.1 %
Uruguay 3,494,382 1,340,000 38.3%
Venezuela 26,814,843 7,552,470 28.2%

Fuente: Internet World Stats

En Brasil, el país más poblado de la región, se concentra el mayor número de usuarios de Internet en la zona  (38.6% del total). México es la segunda nación con el mayor número de usuarios (15.8% del total de usuarios en América Latina y el Caribe).

Respecto a la penetración de Internet por país, el porcentaje más elevado se presenta en Chile (50.4%), y le siguen: Argentina (48.9%), Colombia (45.3%),  Uruguay (38.3%) y  Costa Rica (34.3%); Brasil ocupa la sexta posición (34%).La penetración de Internet en México se ubica entre las más bajas en la región (24.8%),1 que resulta .8 por ciento inferior al promedio mundial (25.6%), y 5.7% inferior al promedio regional (30.5%).

De acuerdo con los resultados del reporte The Global Information Technology Report 2008-2009, publicado en marzo de 2009,2

México fue ubicado en la posición 67 en la relación de 134 países evaluados. En América Latina y el Caribe recibieron mejores evaluaciones países como Barbados (posición 36), Chile (39), Costa Rica (56) y Brasil (59).

Si a las limitaciones en materia de regulaciones, normatividad e infraestructura añadimos la ineptitud y corrupción que ha exhibido la burocracia responsable de poner en marcha los programas orientados a acelerar el tránsito de México hacia la sociedad de la información y el conocimiento, tendremos como resultado un diagnóstico pesimista.3

Indicadores

A finales de marzo de 2009, investigadores en el Proyecto Internet-Cátedra de Comunicaciones Digitales Estratégicas del Tecnológico de Monterrey, campus Estado de México, dimos a conocer los resultados que arrojó el Estudio 2009 de hábitos y percepciones de los mexicanos sobre Internet y diversas tecnologías asociadas, coordinado por Fernando Gutiérrez, director del Departamento de Comunicación del mismo Tec.

El estudio es realizado por el World Internet Project-México con la misma metodología que es observada por los grupos de investigadores asociados al World Internet Project en 28 países.4

En nuestra investigación, el total de usuarios de Internet en México, de 12 a 70 años de edad, fue estimado en 25,217,500.
En la tabla 2 se concentra la información relativa al total de usuarios de Internet en México, estimados en 2007, 2008 y 2009 según los resultados que arrojaron algunos de los principales estudios.

Tabla 2.
Usuarios de Internet en México 2007, 2008 y 2009
(cifras en millones).

Estudio 2007 2008 2009
Asociación Mexicana de Internet (AMIPCI).*5 23.7 27.6
Internet World Stats (30 de septiembre de 2009).
World Internet Project México —- 25.2
Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Cofetel). 22.1 23.3
comScore World Metrix. *** 6 10.7 11.8
eMarketer 23.6 27.4
Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI). 20.8 27,2
International Telecommunication Union (ITU). 22.1 ——- ——-

Nota * Mayores de 6 años ** Mayores de 12 años ** Mayores de 15 años

Fuente: Elaboración propia, con base en la información resultante de estudios realizados por eMarketer: Mexico Online (2009) y el World Internet Project-México.

La penetración de Internet en México, estimada en el reciente estudio de la AMIPCI (29.7%), difiere 4.9% respecto de lo que maneja la Internet World Stats (24.8%).7 En cambio, la diferencia entre el dato ofrecido poe esta última y la que presentó el estudio del World Internet Project-México (23.6%) varía apenas 1.2%.
En la tabla 3 se ofrecen las estimaciones sobre la penetración de Internet en México, consignadas en los estudios referidos.

Tabla 3
Penetración de Internet en México

Estudio y fecha de la presentación de los resultados Porcentaje
Asociación Mexicana de Internet (AMIPCI), mayo de 2009 * 29.7
eMarketer (enero de 2009) 24.9
Internet World Stats (septiembre 30, 2009) 24.8
World Internet Project México** (marzo de 2009) 23.6
International Telecommunication Union (ITU) (2008) 20.8
comScore World Metrix (2008) 14.0

Nota  * Mayores de 15. ** Proyección Nacional: Base: 106.7 millones de mexicanos. No fueron considerados menores de 12 ni mayores de 70 años.
Fuente: Elaboración propia, con base en la información resultante de estudios realizados por eMarketer: Mexico Online (2009) y el World Internet Project-México.

El más reciente estudio de la AMIPCI –la fuente de información empleada es Select 8— estima el total de computadoras en México en 18.2 millones.9 De ese total, únicamente 11.3 millones disponían de la tecnología necesaria para permitir el acceso a Internet (62.8%); 51% de las computadoras con acceso a Internet se encontraban instaladas en los hogares, y 93% de las cuentas de acceso eran de banda ancha. El total de teléfonos móviles en uso se calculó en 73.6 millones. Existe un promedio de 3.5 computadoras por cada 10 hogares.

Los principales estudios sobre los usuarios de Internet en México coinciden en advertir la existencia de una marcada brecha por género en el acceso a Internet. De acuerdo con el estudio de WIP-México, 58% de los usuarios son hombres y 42% mujeres. Según el estudio de la AMIPCI, 56% son hombres y 44% mujeres.

Tabla 4
Penetración de Internet  por  edades

Edad Penetración del universo de internautas por edad Total relativo a la población nacional
12-19 63% 22%
20-24 55% 14%
25-34 35% 25%
35-44 24% 19%
45-54 19% 13%
55-64 10% 7%

Fuente: AMIPCI. Estudio AMIPCI. Hábitos de los usuarios de Internet en México (2009).

Tabla 5
Nivel socioeconómico de los usuarios de Internet en México, según el estudio del WIP-México

Niveles socioeconómicos 10 Porcentaje de usuarios Porcentaje no usuarios Porcentaje relativo considerando el total de usuarios
A,B, C+ 57% 33% 41%
C 45% 55% 22%
D+ 30% 70% 28%
D/E 21% 79% 9%

Fuente: World Internet Project México.

Tabla 6
Nivel socioeconómico de los usuarios de Internet en México, según el Estudio 2009 de hábitos y percepciones de los mexicanos sobre Internet y diversas tecnologías asociadas.

Niveles socioeconómicos Porcentaje de usuarios Población total
A,B, C+ 63% 22%
C 43% 17%
D+ 33% 33%
D/E 20% 29%

Fuente: AMIPCI. Estudio AMIPCI. Hábitos de los usuarios de Internet en México (2009).

De acuerdo con los resultados que arrojó el estudio coordinado por Fernando Gutiérrez, 69% de los usuarios indicaron que el principal punto de conexión a Internet son los cibercafés, casas de amigos y bibliotecas; 61% mencionaron el hogar, 43% la escuela, y 28% el trabajo.  En el estudio de la AMIPCI, el hogar es el principal punto de acceso a Internet (48%), y le siguen: cafés Internet y sitios de acceso público (34%), trabajo (19%), escuela y universidad (11%), entre otras.

El Estudio de consumo de medios digitales en México, realizado por Millward Brown México para la IAB, ubica a la casa como el principal punto de acceso a Internet en México (41%); en segundo lugar, el trabajo (36%), y en tercero, los cafés Internet.

De acuerdo con el estudio del WIP-México, las principales actividades de los usuarios de Internet en México son: revisar e-mail (93%); usar el MSN (83%), mandar documentos por e-mail (83%), trabajos de la escuela (80%), buscar noticias (78%), buscar definiciones (78%), bajar y escuchar música (77%), confirmar un hecho (75%), Información sobre salud (73%), Buscar bromas y caricaturas (48%), Información de viajes (44%), Leer blogs (42%), Navegar sin quedarse en un sitio (41%), Jugar (39%), Chatear en foros (37%), Trabajar en tu blog (33%), Tener acceso a redes (32%), Trámites fiscales (29%), Escuchar radio en línea (28%), Hacer o recibir llamadas (21%), Participar en cursos (16%), Visitar sitios peligrosos (14%), Visitar sitios de contenido social (9%),  y Visitar sitios de apuestas (3%).

La AMIPCI en su investigación refiere que las principales actividades de los usuarios de Internet en México son: Enviar-recibir e mail (70%), Enviar-recibir mensajes instantáneos (58%), Entrar en un “chat room” (41%), Subir videos o fotos en un sitio para compartirlos (34%), Enviar postales electrónicas (26%), Crear/mantener blog/bitácora personal (16%), Acceder a blog/bitácora personal (16%), Crear/mantener sitio propio (15%), Acceder a sitios de comunidad virtual (10%), Encuentros online (10%), y Crear y /o mantener sitios de comunidad virtual (9%).

Tabla 7
Actividades en línea de los usuarios
de Internet y de los jóvenes.

Actividad Usuarios Jóvenes
Enviar o revisar correos 87 82
Buscar información 77 78
Chatear/Mensajes instantáneos 41 63
Leer noticias en línea 54 28

Fuente: IAB. Estudio de consumo de medios digitales en México.

El reciente estudio de la AMIPCI aporta información relativa a las principales actividades de los usuarios de Internet en materia de entretenimiento: Bajar música (49%), Ver chistes o páginas de humor (32%), Jugar on line (30%), Visitar sitios deportivos  (28%), Astrología, horóscopos (20%), y Otras actividades (18%).

En el estudio de la AMIPCI además fue considerado el empleo en Internet de los medios de comunicación convencionales. Las principales actividades en línea fueron: a) Leer diarios/periódicos (22%), b) Escuchar radio (11%), c) Ver programas de TV (8%), y d) Leer revistas (6%).

El estudio de IBOPE aporta relevante información sobre el consumo cultural de los usuarios en México, analizando usos sociales. Así, los principales usos informativos de Internet fueron: Realizar investigación personal (63%), Visitar sitios de educación/aprendizaje (36%), Visitar sitios de salud (25%), y Consultar sitios de películas de cine (23%).

Los principales usos de Internet en materia de entretenimiento fueron: Bajar música (49%), Ver chistes o páginas de humor (31%), Jugar online (30%), y Visitar sitios deportivos (28%).

Los principales usos de Internet como medio de comunicación fueron: Escuchar música (48%), Leer noticias nacionales (34%), Leer noticias internacionales (29%), y Leer diarios (22%).

Las menciones a las principales actividades en línea además varían significativamente al considerar la variable edad. En el rango de 12-19 años, las principales actividades en línea fueron: Jugar a juegos “online”, Ver chistes o páginas de humor, y Escuchar música.

En el rango de 20-24 años, las principales actividades en línea fueron: Bajar música, Enviar/recibir mensajes instantáneos, y  Entrar en un “chat room”.

En el rango de 25-34 años, las principales actividades en línea fueron: Leer noticias nacionales, Leer noticias internacionales, y Visitar sitios de salud.

En el rango de 35-44 años, las principales actividades en línea fueron: Leer noticias internacionales, Visitar sitios de salud, y  Leer noticias nacionales.

En el rango de 45 a 54 años, las principales actividades en línea fueron: Consultar directorios de negocios y empresas, Leer noticias internacionales, y Leer noticias nacionales.

En el rango de 55 a 64 años, las principales actividades en línea fueron: Leer noticias internacionales, Leer noticias nacionales, y Visitar sitios de salud.

Tabla 8
Disposición al uso de nuevas tecnologías

Tecnología 2008 2009 Variación
Celular 86% 88% +2
Computadora 80% 86% +6
Cámara Digital 62% 70% +8
Reproductor MP3 54% 60% +6
PDAs/Handhelds 16% 13% -3

Fuente: IAB. Estudio de consumo de medios digitales en México.

Tabla 9
Atributos emocionales

Internet Televisión Radio Revistas Periódicos Exteriores
2008-2009 2008-2009 2008-2009 2008-2009 2008-2009 2008-2009
Disfruto utilizarlo 71%-77% 43%-47% 28%-31% 21%-31% 15%-20% 3%-4%
Es para alguien de mi edad 68%-74% 46%46% 34%-36% 31%-40 25%-26% 13%-14
Indispensable en mi vida 48%-54% 30%-30% 19%-22% 8%-12% 11%-15% 2%-3%
Lo amo 34%-41% 23%-24% 14%-15% 10%-16% 5%-8% 2%-3%

Fuente: IAB. Estudio de consumo de medios digitales en México.

Tabla 10
Atributos del medio

Internet Televisión Radio Revistas Periódicos Exteriores
2008-2009 2008-2009 2008-2009 2008-2009 2008-2009 2008-2009
Me mantiene actualizado 74%-81% 42%-45% 27%-30% 19%-25% 28%-31% 5%-8%
Estoy muy expuesto a este medio de comunicación 58%-64% 48%-50% 28%-29% 13%-18% 15%-18% 16%-22%
Marcan tendencias 50%-58% 48%-50% 16%-16% 24%-32% 9%-12% 8%-16%
Es el medio de comunicación más accesible 38%-45% 49%-51% 35%-32% 6%-10% 14%-19% 8%-13%

Fuente: IAB. Estudio de consumo de medios digitales en México.

Tabla 11
Atributos de relación

Internet Televisión Radio Revistas Periódicos Exteriores
2008-2009 2008-2009 2008-2009 2008-2009 2008-2009 2008-2009
Lo uso más que cualquier otro medio de comunicación 62%-71% 34%-33% 16%-17% 6%-8% 7%-10% 2%-3%
Me permite decidir lo que veo, leo, escucho 57%-65% 40%-41% 27%-27% 17%-23% 19%-21% 4%-7%
Es para distraerme de mis tareas habituales 53%-52% 51%-54% 25%-27% 23%-33% 10%-14% 4%-6%
Es más confiable 30%-34% 36%-33% 23%-26% 13%-20% 26%-33% 4%-4%

Fuente: IAB. Estudio de consumo de medios digitales en México.

Los usuarios en el ambiente comunicativo de la Web 2.0

En los ambientes comunicativos de la Web 2.0, los usuarios de Internet en México han descubierto formidables espacios de expresión. De acuerdo con los resultados que arrojó el reciente estudio de la IAB, 55% han subido fotos y/o videos a sitios como Hi5, Facebook y YouTube.
De acuerdo con el referido estudio de la IAB, en 2008, 51% de los internautas se habían registrado en alguna red social. En 2009, el porcentaje de usuarios  registrados en alguna red social se incremento a 70%.

Tabla 12
¿Cuáles son las principales redes sociales en las cuales participan o están registrados los usuarios de Internet en México?

Sitio 2008 2009
Hi5 58% 66%
Facebook 23% 55%
MySpace 34% 34%
Windows Live 31% 30%
Sonico 12% 22%
Metro Flog 11% 13%
Twitter 11%
Blogger 9% 5%
Flickr 8% 5%

Fuente: IAB. Estudio de consumo de medios digitales en México.

Apropiamiento político y social de Internet

En las llamadas elecciones intermedias, celebradas el primer domingo de julio de 2009, el presidente Felipe Calderón de nueva cuenta apostó a la propaganda negra. En esta ocasión, el blanco fue el Partido Revolucionario Institucional (PRI), que encabezaba las principales encuestas. 11. El 22 de febrero fue incorporado a YouTube un video en el cual Germán Martínez, entonces presidente del PAN, acusaba al PRI de no haber frenado el narcotráfico. El 30 de marzo se subió al sitio web del PAN el video interactivo Sopa de Letras, y además fue publicada en algunos diarios y revistas la versión para medios impresos, que incluía 13 asociaciones negativas al PRI . 12

En el marco de la campaña de confrontación” fue incorporado a YouTube el video Rata y cursi, adaptación del video de la canción Quiero que me quieras 13, interpretada por el actor Gael García, y utilizada como imagen promocional de la cinta Rudo y Cursi. La adaptación del referido video respondía al propósito de perjudicar la imagen pública de Fidel Herrera, gobernador de Veracruz, distinguido priista. YouTube fue convertido en el espacio idóneo para subir videos en la campaña de confrontación. De nueva cuenta sobraron descalificaciones y faltaron argumentos y propuestas.
En no pocas campañas a puestos de elección ciudadana, los candidatos decidieron replicar el éxito de Barack Obama al incursionar en el empleo proselitista de blogs, redes sociales y Twitter, con resultados definitivamente incipientes, debido al desconocimiento de las prácticas comunicativas y los códigos de comunicación empleados por los usuarios de los nuevos medios. En México, los partidos políticos no saben utilizar la Internet. Éstos solo se ocupan de “comunicarse” con el ciudadano cuando necesitan su voto. Tan pronto terminan las elecciones, los partidos políticos se olvidan de la gente.
La Internet 2.0 fue el ambiente comunicativo propicio para el desarrollo de un interesante movimiento social por la anulación del voto, el cual expresó la profunda decepción que hoy produce la partidocracia en no pocos mexicanos. Algunas redes sociales y blogs fueron creados ex profeso para persuadir al electorado sobre las ventajas que podría representar el anular su voto en las elecciones intermedias. Tales expresiones de inconformidad ciudadana fueron recuperadas por algunos medios de comunicación convencionales, los cuales les dieron difusión y algún seguimiento informativo. En un futuro inmediato, los movimientos sociales gestados en la red serán mucho más comunes. No todos conseguirán trascender la Internet 2.0 para convertirse en ONGs.

Internet  Necesario

Twitter fue el ambiente mediático propicio para que un activo sector de los usuarios de Internet en México expresara su rechazo a la iniciativa de Agustín Carstens, entonces secretario de Hacienda, por un nuevo impuesto a determinados servicios de telecomunicaciones, conocido como “Ley del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios” (IEPS). Los días 19 y 20 de octubre, el “hashtag” #Internetnecesario, 14 fue ubicado durante siete horas en los más altos niveles de mención (rank 7), según datos del analizador Trendistic, 15 con 0.94% de todos los mensajes (tweets) en Twitter en el mundo. El 22 de octubre una comisión de usuarios de Internet consiguió entrevistarse con algunos senadores de la República, a quienes explicaron la importancia que admite Internet en el desarrollo nacional. Los legisladores del PRD fueron los más sensibles e interesados en el tema. La ciberprotesta  –en la cual Alejandro Pisanty, ex titular de la Dirección General de Servicios de Cómputo Académico de la UNAM (DGSCCA) observó un relevante papel 16 –derivó en la conformación de un nuevo movimiento, denominado “Cuidemos Internet”.

Paralelamente algunas asociaciones que representan a grandes jugadores en la industria de Internet –la AMIPCI, por ejemplo–, contrataron los servicios de cabilderos profesionales, que se encargaron de persuadir a los legisladores sobre la necesidad de reducir el monto del impuesto propuesto por Carstens a la Internet y la telefonía pública y rural.

A rango constitucional el acceso a Internet

A fines de 2009, Tomás Torres Mercado, senador del PRD por Zacatecas, propuso reformar el artículo sexto constitucional para impulsar una iniciativa que permita elevar a rango constitucional el acceso a Internet en México.  Destacó que los servicios de banda ancha en nuestro país se ubican entre los más caros del mundo. El 26 de enero de 2010, senadores del PRD presentaron una iniciativa de Ley Federal para la Protección de los Derechos de los Usuarios de Internet, que promueve la no discriminación y prevé combatir la censura.

En México se cumplió el XX aniversario de los primeros enlaces a Internet. Tan relevante acontecimiento prácticamente pasó inadvertido. Efectivamente, el primero de febrero de 1989, 17 el Tecnológico de Monterrey campus Monterrey 18 estableció una conexión directa con la red de la National Science Foundation (NSFNET), hoy Internet. El 28 de febrero de ese mismo año, el Tecnológico de Monterrey campus Monterrey se convirtió en la primera institución en México que consiguió establecer un enlace dedicado a la red NSFNET bajo el dominio .mx: dns.mty.itesm.mx y con la dirección 131.178.1.1.

El anterior artículo debe citarse de la siguiente forma:

Islas, Octavio y Arribas Amaia, «El tránsito a los ambientes comunicativos», en
Revista Mexicana de Comunicación, Num. 120, México, febrero/ abril 2010

Fecha de consulta: 04 de mayo de 2010

Notas

1.- La desastrosa evaluación que recibió México en el reporte The Global Information Technology Report 2008-2009, sencillamente evidencia el pronunciado rezago de nuestro país en tecnologías de información. Las elevadas tarifas por servicios de banda ancha y telefonía 3G, marginan del acceso a Internet a la inmensa mayoría de los mexicanos. Además debemos destacar el rotundo fracaso de las políticas públicas emprendidas por los gobiernos panistas en lo relativo al tránsito a la sociedad de la información y el conocimiento. Un ejemplo: el lamentable fin que tuvo el Sistema Nacional e-México. Tras el rotundo fracaso de la gestión del señor Alejandro Hernández Pulido al frente del Sistema Nacional e-México (ni siquiera fue capaz de proponer la agenda digital de México para el tránsito a la sociedad de la información y el conocimiento) Luis Téllez, entonces aún titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), no solo se vio en la necesidad de “aceptar la renuncia” del señor Hernández Pulido como coordinador general del Sistema Nacional e-México, inclusive decidió hasta cambiar el nombre de la Coordinación General del Sistema Nacional e-México por la “Coordinación Nacional de la Sociedad de la Información y el Conocimiento”. La llegada de Hernández Pulido al Sistema Nacional e-México fue sumamente cuestionada. Durante los últimos años del gobierno del presidente Vicente Fox, el señor Hernández Pulido se desempeñó como tesorero de UNETE, organismo que participó en dudosas triangulaciones de recursos con el Sistema Nacional e-México y la Fundación Vamos México -con la cual la señora Marta Sahagún pretendió impulsar sus aspiraciones presidenciales-. Alejandro Hernández Pulido ha realizado su carrera política y profesional a la sombra de Claudio X. González Jr –con quien trabajó en la Dirección General de Comunicación Social de la Presidencia de la República durante el gobierno del presidente Ernesto Zedillo-. Actualmente el señor Hernández Pulido se desempeña como director general de Grupo Telecom, en Televisa, donde Claudio X. González Jr. precisamente se desempeña como presidente de la Fundación Televisa.

2.-El estudio puede ser descargado como documento PDF desde: http://www.weforum.org/pdf/gitr/2009/Rankings.pdf Fecha de consulta: 22 de enero de 2010.

3.-Con respecto a la importancia del desarrollo tecnológico en el progreso de México, Juan Alberto González Esparza, director general de Microsoft de México afirmó: “la importancia del avance de México en la tecnología se puede reflejar en el impacto que tendría un incremento de 10% en el uso de banda ancha en el país, lo cual representaría un 5.2% del Producto Interno Bruto (PIB) per cápita, 1.63 millones de empleos con beneficios por 158,000 millones de pesos, mejores escenarios en educación y ahorros en el gasto corriente de hasta 76,500 millones de pesos”. Véase: http://www.cnnexpansion.com/tecnologia/2009/10/07/mexico-tiene-estancamiento-en-ti-wef
Fecha de consulta: 22 de enero de 2010.

4.- Ese estudio forma parte de las investigaciones sobre hábitos culturales de los usuarios de Internet que realizan 28 centros de investigación o grupos de investigadores en 28 países: Argentina, Australia, Bolivia, Canadá, Chile, China, Colombia Chipre, República Checa, Francia, Alemania, Reino Unido, Hungría, Irán, Israel, Italia, Japón, Macao, México, Nueva Zelanda, Portugal, Rusia, Singapur, Corea del Sur, España, Suecia, Emiratos Árabes y Estados Unidos, que integran el World Internet Project [http://www.worldinternetproject.net/], iniciativa del doctor Jeffrey Cole, director del Centro para el Futuro Digital, de la Escuela de Comunicación de Annenberg en la Universidad del Sur de California, Estados Unidos. María Teresa Arnal, quien se desempeñó como presidente de la IAB México y de Prodigy MSN –actualmente es directora de Clarus Digital-, preside el comité directivo del World Internet Project México. El resumen ejecutivo del referido estudio se encuentra disponible en: http://wipmexico.org/2201.html

5.- El reciente estudio de AMIPCI sobre hábitos de los usuarios de Internet en México (Estudio AMIPCI. Hábitos de los usuarios de Internet en México) fue dado a conocer en mayo de 2009. Los estudios sobre hábitos de los usuarios de Internet en México, realizados por la AMIPCI, pueden ser consultados en: http://www.amipci.org.mx/estudios/

6.- comScore no consideró el acceso a Internet desde sitios públicos (cibercafés, por ejemplo), excluyendo, además, el acceso a Internet a través de teléfonos móviles o PDAs. No obstante, En una presentación disponible en http://www.scribd.com/doc/15485661/ComScore-State-Of-Internet-Mexico-Apr09, Jonathan Álvarez, en la pantalla número 7 establece que comScore reconoce 24.7 millones de usuarios de Internet en México, según el “universo extendido”, en el cual fueron incluidos menores de 15 años y personas que comparten una misma computadora.

7.- En las cifras que presenta comScore World Metrix no fueron considerados los denominados accesos compartidos (share access), que en el caso de México equivalen aproximadamente al doble de las cuentas registradas.

8.- La fuente de la información que presenta el Estudio AMIPCI. Hábitos de los usuarios de Internet en México (2009), en el apartado “Infraestructura tecnológica”, procede del Estudio trimestral de computadoras personales en México e Internet, abril 2009, realizado por Select.

9.- En el estudio correspondiente a 2008, el cual AMIPCI determinó retirar de su sitio web en Internet, fueron estimadas 17.8  millones de computadoras en México.

10.- En el congreso de la Asociación Mexicana de Agencias de Investigación de Mercados y Opinión Pública (AMAI), celebrado el 9 de septiembre de 2008, Heriberto López Romo, destacado investigador, explicó las modificaciones al índice de nivel socioeconómico, conocido como Regla AMAI 13×6, que desde 1994 es empleado como criterio de clasificación que emplea la Asociación Mexicana de Agencias de Investigación de Mercados y Opinión Pública (AMAI), para la investigación de mercados en México. La Regla 13×6 clasifica a los hogares mexicanos en seis niveles socioeconómicos, a partir de un árbol de asignaciones que considera, a partir de 2008, nuevos indicadores: número de televisores en color y computadoras (tecnología y entretenimiento); número de focos, número de autos y estufa (infraestructura práctica); baños y regadera (infraestructura sanitaria); tipo de piso y número de habitaciones (infraestructura básica); capital humano (educación del jefe de  familia). A las 10 variables referidas les asignaron puntos, considerando el coeficiente de cada uno de los calores en una regresión sobre el ingreso familiar. El nivel E –el menos favorecido- suma hasta 60 puntos; el nivel D, entre 61 y 101 puntos; el nivel D+, entre 102 y 156; el nivel C, entre 157 y 191; el nivel C+, entre 192 y 241; los niveles A/B entre 242 y más. Véase: http://www.amai.org/congreso/2008/memorias/ponencias/lopezromo.pdf Fecha de consulta: 22 de enero de 2010.

11.- Germán Martínez, entonces presidente nacional del PAN, justificó la “propaganda negra” desplegada por su partido al designarla como “campaña de confrontación” -término que también empleó Juan Ignacio Zavala, cuñado del presidente Felipe Calderón y uno de los principales “estrategas” del PAN en materia de comunicación política-. Por supuesto que Germán Martínez no procedía por su cuenta. El 17 de febrero de 2009, en una tensa reunión celebrada en la residencia oficial en Los Pinos –la casa presidencial-, a la cual asistió la cúpula nacional del PRI, el presidente Felipe Calderón declaró: “Y si no hacemos algo entre todos, el próximo con el que se van a sentar aquí a platicar va a ser un narco”. Las palabras de Felipe Calderón representaron el formal “banderazo” a la campaña de “propaganda negra” que el PAN desplegó contra el PRI. De acuerdo con Jesusa Cervantes, destacada reportera del semanario Proceso, la campaña de desprestigio que practicó el PAN en los recientes comicios fue diseñada en el mes de enero de 2009, y para ello el PAN de nueva cuenta contrató los servicios del consultor Antonio Solá, experto en el desarrollo de campañas de “propaganda negra”, a quien el gobierno del presidente Felipe Calderón inclusive decidió conceder la nacionalidad mexicana por la vía del fast track.

12.- La “campaña de confrontación” desplegada por el PAN tomó por sorpresa a Beatriz Paredes, presidenta nacional del PRI. La dirigencia del partido tricolor primero consideró no responder a la “campaña de confrontación”. Sin embargo, algunos simpatizantes del PRI decidieron desbordar a la dirigencia nacional de su partido y dar respuesta directa a la ofensiva desplegada por el partido de la derecha. A Paredes no le quedó más remedio que contratar a algunos de los consultores que asesoraron al presidente de España, José Luis Rodríguez Zapatero, quien en dos ocasiones contendió con Mariano Rajoy, candidato del Partido Popular, a quien precisamente ha asesorado Antonio Solá. De acuerdo con el diario El País, de España, Antonio Solá incurrió en el plagio de un video originalmente empleado para una campaña del PSOE, el cual con mínimas modificaciones adaptó para lacampaña de Fernando Elizondo Barragán, en Nuevo León. Véase:  http://www.elpais.com/articulo/internacional/partido/Calderon/Mexico/copia/anuncio/PSOE/
elpepuint/20090612elpepuint_9/Tes
Fecha de consulta: 26 de junio de 2009.

13.-Esa canción es un “cover” de la rola “I want you to want me”, interpretada originalmente por el grupo Cheap trick.

14.- Hashtags son etiquetas distintivas que son convertidas en causa de una determinada comunidad.

15.- http://trendistic.com/ con el cual se analiza el impacto de los diferentes tópicos catalogados como “trending topics” (lo cual implica temas con un alto grado de mención en la red)

16.- Véase “Ciberprotestas y consecuencias políticas: Reflexiones sobre el caso de Internet Necesario en México”, de Luis César Torres Nabel, en el número 70 de Razón y Palabra: http://www.razonypalabra.org.mx

17.- México fue el primer país de América Latina que logró establecer un enlace dedicado a la red de la NSF-Internet. Argentina estableció su conexión inicial en octubre de 1990; Brasil, en junio de 1990; Chile, abril de 1990; Colombia, abril de 1994; Costa Rica, enero de 1993; Ecuador, julio de 1992; Perù, noviembre de 1993; Venezuela, febrero de 1992. Inclusive México logró articular su enlace dedicado a la red de la NSF, anticipándose a algunas de las naciones del llamado “primer mundo”. Alemania, por ejemplo, estableció su conexión inicial en septiembre de 1989; Australia, mayo de 1989; Japón, agosto de 1989; Suiza, marzo de 1990.

18.- La UNAM, a través del Instituto de Astronomía, estableció el segundo enlace dedicado a la red de la NSF, hoy Internet. La conexión digital se realizó a través de un enlace satelital, a través del Centro Nacional de Investigación Atmosférica (NCAR), ubicado en Boulder, Colorado, Estados Unidos. La tercera institución que logró establecer un enlace dedicado a la red dedicado a la red de la NSF, hoy Internet, fue el Tecnológico de Monterrey Campus Estado de México, también a través de la NCAR.

Asesinato en San Francisco

Juego de Ojos

Miguel Ángel Sánchez de Armas

“Desesperado por conservar su modo de vida, David Sorensen ha decidido asesinar a su mujer, una rubia millonaria de piel tostada por el sol y costumbres insoportables. Fingir luego un secuestro y echarse a la bolsa un rescate de millones de dólares parecen cosa fácil para este arribista en quien el engaño se ha convertido, inconscientemente, en una forma de vida”.

 

Pese a los muchos ejemplos de autores de novela policíaca que por sus altos méritos han logrado sacudirse el adjetivo de subgénero –o de plano género menor– que tiene esa escuela, no ha sucedido así con el género mismo, que sigue considerándose inferior en términos amplios. Hay un novelista que podría de una vez y por todas, si la fuerza del mercado no fuese tanta, eliminar cualquier sombra de duda acerca de las enormes posibilidades literarias y de calidad que tiene el género negro al igual que cualquier otra creación artística.

 

Se trata de Fernando del Paso y su novela Linda 67. Historia de un crimen. “He aquí el punto de partida de una novela que parece, a primera vista, una ‘desviación’ en la carrera literaria de Fernando del Paso”, dice Dolores Carbonell en la presentación de una entrevista que hizo al escritor. “Quién hubiera pensado”, pregunta, “que el autor de José Trigo, Palinuro de México y Noticias del Imperio volvería la mirada hacia un género que algunos consideran menor, quizá porque no saben lo tremendamente difícil que resulta tramar un asesinato sin dejar cabos sueltos ni perder la claridad.  Por eso, la pregunta resulta inevitable: ¿por qué un thriller ahora?”

 

Y responde Del Paso:

 

-“Desde hace muchos años, particularmente cuando descubrí la existencia de la serie El Séptimo Círculo -colección de novelas policiacas publicadas por Borges y Bioy Casares-, y conocí a Álvaro Mutis, quien me orientó con respecto a ciertas lecturas de autores como Simenon, he sido lector -no fanático, pero sí esporádico- del género. Se me ocurrió entonces emprender yo mismo el reto que significaba construir algo así, aunque lo fui posponiendo a medida que trabajaba en mis novelas. De hecho, fue como hace 10 años cuando se me ocurrió el meollo, la anécdota de lo que sería Linda 67. Historia de un crimen.”

 

Quizá una de las pocas cosas reprochables a esta novela sea el título tan poco original al grado de que, para mi gusto, contrasta notablemente con la riqueza de la novela. Linda 67 es la nomenclatura de las placas del automóvil en el cual muere la esposa de Sorensen, su nombre y año de nacimiento, práctica muy frecuente entre las clases adineradas del estado de California, donde los propietarios de vehículos pueden personalizarlas. En este caso se trata de un Daimler Majestic de colección. El auto y la placa describen al personaje.

 

Fernando del Paso no es un autor de novela policiaca. Es decir, no se ha dedicado a escribir novela policiaca. Tanto así, que confesó a la Carbonell que el proyecto de la novela fue “un proyecto secreto” durante años, “porque no sabía si [le] iba a salir”. Seguramente para el escritor hacer una novela del género negro representaba un desafío que no podía ignorar. El resultado es una espléndida obra que se disfruta página a página. En cada palabra, en cada frase, en cada giro, se hace presente la mano de un creador sazonado que juega con el género, aunque no podemos afirmar que se trate de una novela experimental en la técnica narrativa, aunque sin duda se trata de una historia contada con originalidad.

 

Un narrador omnisciente se encarga de darnos a conocer la trama y desde el inicio nos informa que un crimen fue cometido, quién lo cometió y contra quién. Detalla la historia de David Sorensen, mexicano que vive en San Francisco, casado con Linda, una mujer estadounidense, de quien está a punto de divorciarse porque el padre de ella, un multimillonario, la amenaza con desheredarla si no se divorcia del yerno al que nunca quiso conocer.

A partir de una conversación con una persona, David comienza a acariciar la idea de matar a Linda, a quien odia, para simular un secuestro, pedir quince millones de dólares de rescate y regresar a México a disfrutarlos con Olivia, su amante mexicana.

 

La puesta a prueba del lector, la resolución del verdadero enigma, aparece al final de la novela y es manejada con verdadero ingenio. Los 24 primeros capítulos están dedicados a describir en detalle lo que el lector sabe desde el inicio.

 

Varios elementos son lo que dan riqueza a la novela. Uno de ellos es la erudita abundancia de información, que no resulta chocante o afectada, sino que fluye de manera natural, que va bien con los personajes y la historia. David Sorensen es un mexicano rubio, bien educado, hijo de un diplomático retirado y en la pobreza, pero que habituó a su hijo a vivir bien. En ese savoir vivre es que Del Paso da rienda suelta a una gran cantidad de datos y hace gala de conocer relojes, perfumes, pintura, literatura, vinos, autos, plantas, arte culinario, publicidad, cine, marcas de ropa de cama, diseñadores de moda, accesorios y varios etcéteras.

 

Se trata de la misma característica que ha colocado a Fernando del Paso como un autor intelectualista, sobre todo a partir de Palinuro de México, su segunda novela, aunque, como bien afirma John Brushwood, “para llamarla novela habría que ampliar la definición del género. Palinuro de México es enciclopédica en cuanto a la variedad de información que contiene y es virtuosa en cuanto a la variedad estilística”. Linda 67 es informativa, pero no es experimental en la técnica narrativa. Sin embargo no podemos dejar de ubicar a Del Paso como un maestro en la técnica de contar la historia presente e ir contando paralelamente los acontecimientos que llevaron al personaje a cometer el crimen, su vida pasada, sus sentimientos y cómo se desarrollaron las acciones mismas del crimen. Todo ello cargado de múltiples referencias

 

La acción se desarrolla fundamentalmente en la ciudad de San Francisco, lugar donde vive David Sorensen con su esposa norteamericana. Destaca en la novela el conocimiento de la ciudad de que hace gala Del Paso, lo cual, sumado al hecho de que el protagonista –mexicano- esté casado con una estadounidense y la presencia de una amante mexicana, sirve de marco para confrontar a las dos culturas. Una, la estadounidense, próspera, fría, calculadora y elitista. Otra, la mexicana, alegre, sincera, misteriosa, pobre y enigmática. Esta confrontación la hace un personaje que se dice mexicano, pero que en realidad tiene un serio problema de identidad y que ve a los dos lugares un tanto ajenos y rechazantes, como sucede a prácticamente todos los migrantes, con independencia del status con el que permanecen en latitudes distintas a las de la tierra que los vio nacer.

 

Esta característica de la novela resulta por demás interesante pues aunque haya un despliegue de conocimientos e información acerca de la vida en Estados Unidos, y en particular en San Francisco, y no obstante estar salpicada de referencias a otras ciudades estadounidenses, no deja de ser una novela muy mexicana. La mexicanidad está presente en la confrontación constante de David con Linda, en un esfuerzo permanente del protagonista por rescatar su identidad mexicana, sus recuerdos, sus preferencias y sus ancestros.

 

En el alud de información que es la novela, además de la vida en San Francisco se incluyen múltiples referencias a la vida en México, incluso la resta de los tres ceros al peso, lo cual ubica en el tiempo a la acción del libro. Sin embargo, el aspecto que le da el carácter contundentemente mexicano es la actuación del protagonista. El hilo que siguen sus razonamientos lo colocan como perteneciente a una sociedad específica. Las ideas que lo asaltan frente a la muerte, al amor, al dinero, a la amistad, dan cuenta de un personaje descrito y creado por un mexicano.

 

Otro elemento que llena pertinentemente muchas páginas de la novela es la vida interior del protagonista, aunque presentada de manera tan acuciosa que se llega a confundir al narrador omnisciente con el personaje. Al adentrarme en la estructura psicológica de David, me resulta inevitable asociar su apellido, Sorensen, con el nombre de pila del filósofo danés Soren Kierkegaard, un teólogo al que sin duda ha acudido con frecuencia Del Paso -cuya obra literaria incluye unos delicados “Nuevos Sonetos Marianos”- debido a la prioridad que dio a la existencia sobre la esencia, al pensamiento existencial sobre el especulativo.

 

Linda 67 es una novela negra que cumple con los cánones del género, pero que supera a éste porque es una obra que está a la altura de cualquier otra, con independencia del género, lo cual demuestra que para escribir novelas policiacas no hay que ser aficionado a ellas, sino simple y llanamente hay que ser escritor, y cuanto mejor escritor mejores novelas. En este sentido no puedo olvidar que Del Paso tiene un importante antecedente como trabajador de medios de comunicación, concretamente en la BBC de Londres, lo cual, pienso, pudo haberle facilitado estilísticamente esta incursión en el género policiaco. En cualquier caso, Linda 67 puede, sin obstáculo alguno, competir en calidad con el resto de la obra de Del Paso.

 

 

Profesor – investigador del departamento de Ciencias de la Comunicación de la UPAEP, Puebla.
Presidente honorario de la Fundación Manuel Buendía.
Correo electrónico: sanchezdearmas@gmail.com

El siguiente es un ejemplo de cómo debe de citar este artículo:

Sánchez de Armas, Miguel Ángel, 2010: «Asesinato en San Francisco»
en Revista Mexicana de Comunicación en línea, Núm. 119, México, Febrero. Disponible en:
http://www.mexicanadecomunicacion.com.mx/magsa.htm
Fecha de consulta:16 de abril de 2010

CSI a la mexicana

La política en tacones
Pilar Ramírez

Una nota perdida en uno de los diarios nacionales reportó el 12 de abril que en el municipio de Escuinapa, en Sinaloa, apareció muerta dentro de una maleta una menor de siete años. La pequeña –de quien ni siquiera se da un nombre completo, sólo se le identifica como Gloria N.- era hija de jornaleros agrícolas y se le vio con vida por última vez cuando jugaba con su hermano de dos años de edad, quien no aparece. Busqué más datos en los diarios locales de Sinaloa, pero no hay mucha más información, sólo se agrega que hay una detenida sospechosa de haber asesinado a la menor en un acto de magia negra y que la madre está en calidad de presentada porque no se sabe si participó en los hechos.

Para esclarecer el asesinato de Gloria no se ha invitado al FBI, no han ido a cubrir el asesinato los noticiarios estelares de las dos principales cadenas de televisión, tampoco se ha entrevistado a los padres. Claro, la pequeña era hija de unos jornaleros, no tenía –por supuesto- nanas que cuidaran de ella y su hermano, su muerte no es útil para golpear a personajes de la política nacional y no hay, como se dice en el argot periodístico, “carnita” en el caso para llenar horas en los espacios informativos.

El caso Paulette Gebara en cambio, ha resultado ideal para varios fines. Las televisoras se han cebado en un asesinato, dándole gran énfasis al drama familiar que encierra para construir una especie de reality show o CSI a la mexicana, con una cobertura que bajo la apariencia de periodismo de investigación repite una y otra vez la escasa información real que existe sobre el caso y que podría ser resumida en un par de cuartillas.  Se construyen notas artificialmente con entrevistas a los padres, a funcionarios, a las nanas, a las maestras, a los compañeros de las niñas, se aventuran hipótesis, se hacen resúmenes de los hechos y se reciclan informaciones a todo lo que dan para ofrecer los mismos datos con una envoltura diferente.

Carlos Loret de Mola entrevistó el 5 de abril al procurador de Justicia del Estado de México, Alberto Bazbaz, quien dijo lo que tenía que declarar o informar en los primeros tres minutos, la entrevista, sin embargo duró media hora, en la que el conductor intentó que el funcionario respondiera una y otra vez qué “pensaba” del caso, si tenía “alguna hipótesis”. El procurador mexiquense, que no se salió del guión, todo el tiempo respondió lo mismo, que las pruebas periciales arrojarían datos más próximos a la verdad y en tanto era precipitado adelantar juicios. Al día siguiente, en su columna “Historias de reportero”, Loret consignó y criticó el hecho de que el procurador hubiera pronunciado la palabra “ciencia” o sus derivados 38 veces, lo cual hizo a instancias del entrevistador que trataba de sacar una declaración distinta. Loret reconoce que este tipo de temas atrae la atención del público y desconoce el por qué, pero afirme que el problema no es cubrir estos casos dramáticos asociados con la muerte sino cubrirlos profesionalmente. Yo apuraría la hipótesis de que se crea interés en el público justamente por la carencia de ética profesional.

Adela Micha tuvo la tarea de entrevistar a la madre de la niña para que el público pudiera regodearse y obtener su propia interpretación acerca de si la madre es culpable o no, si la ven muy compungida o muy “fría”, si se le nota que tiene o no un amante, si es una mala madre por irse de viaje de “soltera”. La otra televisora ha hecho lo propio, pues tiene que “competir” informativamente; ha entrevistado a las nanas, al supuesto amante y se ha tejido todo un tinglado mediático y político de un caso del fuero común. En ambas empresas de televisión, el caso de la pequeña Paulette ha servido para llenar horas y horas de producción en prácticamente todos los informativos, especialmente los de horarios estelares.

Los errores que ya son legendarios en la procuración de justicia mexicana se han utilizado como artillería pesada para la batalla política y partidista; se aventuran interpretaciones como que el caso Paulette ya tiró a Peña Nieto, se filtra que Bazbaz es un recomendado del innombrable y se hace opinar a muchos personajes políticos sobre la ineficacia de las autoridades de justicia del Estado de México. La ancestral desconfianza hacia las autoridades sirve para acrecentar las conjeturas acerca del caso.

En youtube hay cerca de 500 entradas para el caso Paulette, la mayoría son videos presentados en los noticiarios televisivos, y los hay que tienen hasta cerca de medio millón de visitas; entre todos ellos, suman varios millones de reproducciones en menos de un mes. Ya existe incluso un grupo de Facebook llamado “Si no hace justicia en el caso Paulette no voto por Peña Nieto”.

La prensa escrita no se ha volcado con el mismo ahínco sobre el caso, pero no ha podido ignorarlo debido al interés creado entre la opinión pública por los otros medios; así, mientras éstos entretienen a la compasiva sociedad mexicana, que engolosinada con los pormenores del caso juega a ser Gil Grissom, el investigador estrella de CSI, pasa de largo el caso de la familia asesinada en Tamaulipas a manos de militares, se pierde la cuenta de la violencia generada por el narcotráfico, las críticas al gobierno federal sobre la manera de enfrentar al crimen organizado se vuelven anecdóticas, las muertes que a diario genera la miseria en la que viven muchos mexicanos desaparecen entre las aburridas estadísticas y muchos pescadores políticos gozan de las ganancias que les trajo el río con el asesinato de una pequeña inocente.


Periodista y colaboradora de la RMC

El artículo anterior se debe de citar de la siguiente forma:

Ramírez, Pilar, «CSI a la mexicana» en Revista Mexicana de Comunicación en línea,
México, abril.
Disponible en:
http://www.mexicanadecomunicacion.com.mx/politica.htm
Fecha de consulta 15 de abrilo de 2010.

La Ley Televisa y la lucha por el poder en México

Foto: "Televisa" por Sagolla @ Flickr

Sólo 17 grupos determinan el pensamiento y la cultura locales

Carmen García Bermejo
Periodista de El Financiero y colaboradora de la RMC

A pesar de que la Corte anuló la Ley Televisa, continúa vivo su espíritu. Por eso, es urgente formular un marco jurídico sobre telecomunicaciones, radio y televisión que permita establecer un nuevo orden de comunicación en México donde la figura del Estado recupere su papel rector y los poderes fácticos-mediáticos sean acotados y verdaderamente regulados.

El debate sigue abierto. El libro La «Ley Televisa» y la lucha por el poder en México (UAM-Xochimilco), coordinado por los académicos Alma Rosa Alva de la Selva y Javier Esteinou Madrid, mantienen viva la discusión sobre el tema. Son 34 ensayos escritos por quienes fueron actores o testigos de este suceso legislativo que se convirtió en un hecho político y, luego, en un movimiento jurídico-social que culminó con la sentencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que declaró, en junio de 2007, inconstitucional los puntos rectores de las leyes de Radio y Televisión, y de Telecomunicaciones (conocidas como la Ley Televisa) que, bajo presiones económico-electorales, aprobó la mayoría de los integrantes del Congreso de la Unión en la legislatura pasada.

El libro recupera esos sucesos a través de los testimonios escritos y también por medio de las ocho presentaciones públicas que sus coordinadores realizan por distintos estados. Empezó en la Universidad Iberoamericana, luego, en el Senado de la República, se proyectan otras dos presentaciones más en la ciudad de México para, después, hacerlo en Oaxaca, Puebla, Guadalajara, Veracruz y Colima. Distintas voces, diversos registros. Pero todos con una certeza en común: el espíritu de la Ley Televisa sigue vivo.

Expansión del monopolio

Alma Rosa Alva de la Selva, profesora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, explica que los análisis presentados en La «Ley Televisa» y la lucha por el poder en México revisan, reconstruyen y documentan un episodio fundamental para el problema del marco legal de la radio, la televisión y las telecomunicaciones en el país.

Sobre todo porque la revisión de la llamada Ley Televisa, desde sus orígenes hasta la etapa del dictamen emitido por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), ponen en evidencia los alcances de esa ley, un proyecto que -como lo prueban cotidianamente los hechos- está vivo y sigue actuando.

-Se trata -asegura- de un proyecto de expansión de los grandes consorcios de los medios electrónicos encabezados por la televisora que protagonizó la gestación de las reformas que han dado materia a este libro, de frente a los nuevos escenarios digitales donde, ahora, en el marco de la disputa por la nación, busca establecer su hegemonía. Este libro también es muestra de la capacidad de reflexión de sectores de la sociedad mexicana que se han involucrado en el tema y que, desde hace muchas décadas, han generado una discusión amplia sobre el marco legal de la radio, la televisión y las telecomunicaciones.

“Es un debate -continúa- que se ha sostenido a lo largo del tiempo ofreciendo innumerables ideas, propuestas, recomendaciones al Estado mexicano y que hasta hoy no han sido cristalizadas por el Congreso de la Unión en una nueva ley. Esto es una deuda de poder Legislativo con la sociedad mexicana. Una deuda que no ha sido cubierta en medio de un proceso en el cual la propia sociedad tendrá que involucrarse crecientemente porque más allá de los monopolios y de su acción como poder fáctico, lo que está en juego es la viabilidad del país y la libertad de expresión.”

Alva de la Selva reitera la necesidad urgente de una nueva ley. Pero advierte que sin una reforma democrática en esta materia es imposible pensar en un México distinto al que estamos viviendo. Por eso considera que los poderes públicos deben aprovechar la etapa actual para formular un marco jurídico avanzado sobre radio, televisión y telecomunicaciones de cara a la sociedad de la información que permita formar un nuevo orden de comunicación en México donde la figura del Estado recupere su papel rector en este ámbito y en donde los poderes fácticos-mediáticos -esos que generaron la Ley Televisa- sean acotados y regulados.

En tanto, Javier Esteinou Madrid, profesor-investigador de la UAM-Xochimilco, refiere que así como en siglos pasados las fracciones del poder dominante pugnaron, en su momento, por la expropiación del territorio nacional, la privatización del petróleo, el apoderamiento de la energía eléctrica y por la reasignación del subsuelo, ahora -paradójicamente en el marco de la conmemoración de los 200 años de la Independencia y 100 años de la Revolución- los sectores más fuertes de la gobernabilidad animan a efectuar la privatización del espectro radioeléctrico que, en términos de desarrollo, representa la moderna disputa por la nación.

Precisa que el libroLa «Ley Televisa» y la lucha por el poder en México es un texto colectivo elaborado por diversas personalidades y documenta -desde el ámbito de la economía, el derecho, la historia, la tecnología, la sociedad y la comunicación- el periodo más vergonzoso que ha sucedido en la historia moderna de la comunicación en México y que, por lo mismo, no debe volver a repetirse: “En esta etapa -asevera-, el monopolio de la información electrónica, en alianza con los poderes Legislativo y Ejecutivo, acordaron privatizar el espectro radioeléctrico de la República como nunca antes se había realizado, a través del proyecto jurídico conocido como la Ley Televisa para beneficiar la expansión del monopolio de la televisión del país violando los principios fundamentales de la Constitución, marginando las garantías comunicativas básicas de los ciudadanos y vulnerando la soberanía del Estado-nación.”

Esteinou Madrid recuerda que sólo la intervención de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), en junio de 2007, fue la que anuló los aspectos centrales de dicha ley y colocó el mandato de la Constitución por encima de los intereses fácticos que ya habían rebasado con exceso y prepotencia a la misma desde hacía varias décadas. Pero alerta que no obstante la intervención de la Corte, el espíritu de la Ley Televisa no ha muerto, continúa vivo en espera de nuevas condiciones sociopolíticas para conquistar los privilegios desproporcionados que les fueron cancelados.

-Con esto -apunta- constatamos que el monopolio de la información masiva en alianza con algunos sectores de la actual clase política continúa luchando sigilosamente en el país para lograr, a través de cualquier vía, el operar la comunicación electrónica como un negocio mercantil sin freno y no como un servicio público de interés social. Se trata de concentrar la estructura de la difusión masiva y de las nuevas redes de telefonía y televisión a escala oligopólica; privatizar crecientemente el espectro radioeléctrico y desconocer su naturaleza como bien público patrimonio de la nación; evitar la competencia abierta con nuevos actores en el sector de las telecomunicaciones; obstaculizar el surgimiento de nuevas cadenas audiovisuales que signifiquen otras alternativas de acción empresarial; presionar hasta sustituir las funciones del Estado-nación y de los poderes constitucionales de la República… En pocas palabras, mantener durante el siglo XXI la reproducción del viejo orden desigual de la comunicación colectiva que existió en el siglo XX a costa de lo que sea.

Esteinou Madrid reitera que así como, en 2007, los ministros de la SCJN le demostraron a la sociedad que estuvieron constituidos por la ética, la soberanía y la moralidad para cancelar la Ley Televisa, ahora, en 2010, la ciudadanía le demanda a los legisladores del Congreso de la Unión que también demuestren que están conformados por la ética, la soberanía y la moralidad aprobando nuevas leyes integrales de radio y televisión, y telecomunicaciones que, por encima de todo, defienda el espectro radioeléctrico como patrimonio de la nación, recupere las garantías comunicativas básicas de la población y fortalezca la rectoría del Estado mexicano en esta esfera.

¿Golpe de Estado?

En la presentación delLa «Ley Televisa» y la lucha por el poder en México son distintas las voces que participan. En su turno, Virgilio Caballero Pedraza -fundador y exdirector del Canal del Congreso de la Unión y actual titular del Canal 21, la televisión del Distrito Federal- también puso el dedo en la llaga al señalar que con el Artículo 16 de la Ley Televisa lo que se hacía en los hechos era entregarle a perpetuidad a las empresas el territorio de México por donde circulan las señales de radio y televisión. Lo que implicaba una enajenación de la soberanía del país, semejante y tan peligroso o peor que la que se hizo en el siglo XIX con el territorio nacional perdido en una guerra absurda y dispareja.

-México padece -asegura Caballero Pedraza- la concentración más abominable que existe en medios de comunicación. Ningún país del mundo tiene en 17 manos el poder de la radiodifusión y de la televisión. En México 17 grupos son los que determinan por dónde debe ir la orientación del pensamiento, de la vida, las costumbres, los hábitos, la cultura, las ilusiones, el esparcimiento… porque han demostrado que son verdaderos educadores de la sociedad mexicana. Educadores para malformar a la sociedad, para deformarla, devaluando la vida, la comunidad, la convivencia.

“Si no hay ciudadanos libres, no puede haber democracia. Pero la parte central de esa libertad es la posibilidad de disponer del conocimiento, de la reflexión, del análisis, para poder entender el mundo y contribuir en su transformación. Es ese análisis, esa reflexión y esa información los que nos han sido negados sistemáticamente, durante más de 60 años, por el monopolio de la televisión.”

El también antropólogo detalla que no es casual que de los 39 grandes empresarios que son prácticamente los dueños del país, 11 forman parte del consejo de administración de Televisa: “Aquí me atrevo a plantear -determina- que el apoderamiento de esa clase política-financiera y la sujeción, por parte de los legisladores, constituyó algo muy semejante a un golpe de Estado. No se cómo llamarle al apoderamiento ilegal sobreponiéndose de dos poderes constitucionales a los que, además, se les devasta, se les exhibe, se les atropella, se les inutiliza para ponerlos al servicio de un conjunto de privilegios que la Ley Televisa establecía. Nunca será excesivo hacer énfasis respecto a ese sometimiento de parte del duopolio Televisa-TV-Azteca sobre los poderes del Estado.”

Caballero Pedraza recuerda que van a ser ya casi tres años del fallo de la Corte y el poder Legislativo hace como que no existe esa sentencia. Y pregunta: “¿Qué pasa con esta legislatura que no sólo prorrogan la necesidad y la obligación que tienen de escuchar y obedecer el mandato de la Corte, sino que incluso hacen intentonas para recuperar y echar a andar la Ley Televisa?”

Aunque al periodista y abogado Miguel Ángel Granados Chapa le correspondió estar en una presentación del libroLa «Ley Televisa» y la lucha por el poder en México distinta a la de Virgilio Caballero, coincide con sus planteamientos y señala que con la decisión de la Corte de anular la Ley Televisa la mayoría del senado quedó derrotada. Pero eso poco importó a algunos grupos de senadores de la pasada legislatura que -al haber impulsado de manera enfática y, sobre todo, eficaz porque consiguieron la aprobación de la ley- recibieron su recompensa.

-Hoy -recalca Granados Chapa- todavía para consagración permanente del contubernio entre la mayoría del Senado de la República y el poder que decretó la Ley Televisa, el presidente de la Comisión Federal de Telecomunicaciones, el órgano regulador de la materia a la que se refiere la reforma que conocemos como Ley Televisa, es el senador que en la pasada legislatura presidía la Comisión de Comunicaciones: Héctor Osuna Jaime. Sin rubor alguno, el senador que presidía la comisión que encausó el dictamen legislativo preside, desde junio de 2007 al día de hoy, la Cofetel. Eso quería quien hizo la ley Televisa: tener una ley y un órgano regulador a modo y eso consiguió.

El periodista explica que no basta la decisión de la Corte. Se requiere la acción del Senado y, una vez rehecha la ley con forme la sentencia de la Corte, se deben reestructurar las leyes de Radio y Televisión y la de Comunicaciones para que ensamblen con las reformas a que obliga la sentencia judicial. Pero esto no se ha hecho. El Senado, que está en deuda con la sociedad, podrí haber aprovechado la necesaria acción legislativa a que lo obliga la Corte para abordar en toda su amplitud la legislación en materia de radio, televisión y comunicaciones. Pero estamos casi a la mitad del mandato de los senadores y no se ha movido un milímetro la reforma a que está obligado, por una sentencia judicial, el Congreso.

En ese sentido, Granados Chapa considera que el Senado, en particular, ha incurrido en desacato a una sentencia judicial porque no la cumple. En vez de proceder en el sentido que la Corte ha intentado reformar la legislación vigente que va en sentido contrario a la sentencia de la Corte porque pretende asegurar el refrendo de las concesiones automáticamente, aspecto que es uno de los contraprincipios aprobados en la Ley Televisa y reprobados por la sentencia constitucional.

Oficio de la telebancada

Por su parte, el historiador Lorenzo Meyer comenta que antes de la televisión, la fuente insustituible de la información que se necesita para ser ciudadano era la prensa escrita. Pero, ahora, el ciudadano mexicano -según una encuesta de Gobernación de 2006- apenas el diez por ciento toma su información principalmente de los periódicos, mientras que para el 72 por ciento de los mexicanos la mayor parte de su información o la única fuente de su información es la televisión.

-Por razones históricas -confirma Meyer- la televisión en México nació sin compromiso con la democracia. Surge justo cuando el régimen autoritario posrevolucionario está alcanzando la cúspide de su poder, con Miguel Alemán. En un principio, hay varias posibilidades, todo dentro del círculo alemanista. Pero poco a poco se va convirtiendo en una sola. Un sólo grupo controla la televisión. Y la televisión dentro de un sistema autoritario es, en realidad, la secretaría de propaganda y la secretaría de la cultura popular en México. Está al servicio del régimen autoritario. Así nace la televisión mexicana y este sello particular, que no tienen otras televisoras del mundo, hace tan difícil la situación en que se encuentra ahora la ciudadanía mexicana frente a esta fuente privilegiada de información.

El también autor de Liberalismo autoritario. Las contradiccones del sistema político mexicano explica que la democracia real es una poliarquía; esto es, una serie de centros de poder a los que se les llama fácticos. Y la poliarquía, para no ser algo negativo para la democracia, necesita de la pluralidad. Los grupos de interés y los grupos de poder, los grupos de presión, son parte de la democracia. Pero cuando estos grupos no tienen contraparte, cuando los poderes públicos, en este caso el Congreso, se dejan dominar por un grupo de interés que se convierte en grupo de presión y que está todo el tiempo en los corredores del poder y que, como ahora es el caso en México, tienen a sus representantes dentro de las instituciones que, se supone, representan a la sociedad en su conjunto (la ‘telebancada’) entonces estos grupos excesivamente poderosos impiden la democracia.

Meyer indica que cuando existe una situación de dominio tan abrumador, como es el caso en México, de dos cadenas de televisión que son las que guían la información y la interpretación al ciudadano, cuando el 72 por ciento de los ciudadanos abrevan de ahí para tener conocimiento sobre lo que está ocurriendo en la política del país, entonces tenemos derecho a preguntarnos si México es realmente una democracia. Y podemos concluir que no, mientras persista esta peculiar forma de influir en la formulación de la información y de las ideas políticas que sirven al ciudadano para tomar sus decisiones.

Otro de los autores deLa «Ley Televisa» y la lucha por el poder en México es Raúl Trejo Delarbre -presidente de la Asociación Mexicana del Derecho a la Información-, quien expresa que este libro es de gran utilidad porque, justo en estos meses, en el Congreso de la Unión se discuten iniciativas que tienden a revindicar la Ley Televisa. Por ejemplo, en la Cámara de Diputados hay una iniciativa del diputado Andrés Maciel Fernández, del PRI, para penalizar a las radios comunitarias y propone cárcel para quienes instalen radios comunitarias, para quienes trabajen en ellas, para quienes vendan publicidad e incluso para los proveedores de equipo técnico.

Asegura Trejo Delarbre que ese mismo diputado, junto con otro del PRI, han presentado una iniciativa que repite la del senador Manlio Fabio Beltrones en el Senado para que las empresas de radio que ya tienen una frecuencia en AM consigan automáticamente una frecuencia en FM: “Y en el Senado de la República -apunta-, el senador Carlos Sotelo del PRD, en alianza con varios senadores del PRI, presentaron una iniciativa en diciembre pasado que tiene cierta complejidad técnica y legislativa. Entre otras muchas cosas prevé que las concesiones de radio y televisión que se venzan sean refrendadas de manera automática. No hay bandera que entusiasme más hoy a los cabilderos de Televisa que esta ‘oferta’ de estos senadores.”

¿Designios del chavismo?

En la presentación del libro que se hizo en el Senado de la República, el legislador Carlos Sotelo, presidente de la Comisión de Radio, Televisión y Cinematografía, aprovechó para contestar a alusiones y explicar el contenido de la iniciativa de Ley de Radio y Televisión que presentó en diciembre de 2009. El senador refiere que dicho dictamen fue calificado por algunos grupos como la reedición de la Ley Televisa, mientras que la Cámara Nacional de la Industria de la Radio y la Televisión, en un desplegado público, lo acusó de legislar con los designios del chavismo (Hugo Chávez) en México.

Sin embargo, Sotelo comenta que ese dictamen, en realidad, le daba acta de nacimiento a los medios públicos; se eliminaba de la legislación el concepto de medios oficiales; se establecían los consejos consultivos ciudadanos, como órganos rectores para todos los medios públicos; se establecían órganos públicos descentralizados no sectorizados; administradores de las frecuencias otorgadas a los medios públicos, organismos con autonomía editorial e independencia técnico-financiera; se instituía el defensor de la audiencia por ley y se planteaba la autorización para que nuestro país contara con una televisora pública en señal abierta de carácter nacional y una radio pública nacional en señal abierta.

También se otorgaba un marco legal a los medios comunitarios, se eliminaba toda la discrecionalidad que actualmente tiene el gobierno sobre los permisos para estas radios y se les daba reconocimiento jurídico: “Después de casi ocho años -anota el senador- se establecía la vía para que las comunidades y los pueblos indígenas pudieran acceder al uso y disfrute de frecuencias de radio y televisión. Asimismo, en el dictamen se establecía un fondo público para apoyar la transición a digital de todos los medios públicos, comunitarios e indígenas.”

Sotelo dice que donde sigue el debate es en el tema de los refrendos en las concesiones a medios privados: “En la acción de inconstitucionalidad que algunos senadores de la legislatura pasada hicieron ante la Corte -precisa-, pedían que se incluyera la figura del refrendo administrativo y en la iniciativa del pasado diciembre se incluyó. Yo sostengo que la vía de licitación para las concesiones que vencen fortalece la concentración. Ahí sigue el debate. El dictamen de diciembre nos permitía avanzar. Pero con el desplegado de la Cámara de la Industria de la Radio y la Televisión todo quedó en stand by.”

El siguiente es un ejemplo de cómo debe de citar este artículo:

García Bermejo, Carmen, «La Ley Televisa y la lucha por el poder en México»,
en Revista Mexicana de Comunicación on line. México, abril 2010.
Disponible en: http://www.mexicanadecomunicacion.com.mx/rmc_leytelevisa_bermejo.html
Fecha de consulta: 12 de abril de 2010

Marketing territorial

Estrategia para el desarrollo de las regiones

Dora María Montoya Pineda
Comunicadora Social, Especialista en Mercado/ Bogotá, Colombia

 

Se denomina marketing territorial al conjunto de decisiones económicas, sociales y culturales para la creación y consolidación de cadenas productivas en relación con la marca propia, la competencia de otros territorios, las tendencias sociales –demográficas, económicas, culturales, ideológicas, asociativas y tecnológicas– y la influencia de las fuerzas gubernamentales, políticas y legales en el desarrollo de una región y de su área periférica. Su  aplicación en el desarrollo rural permite identificar los mercados objetivos o targets diferentes entre sí: aquellos segmentos de compradores potenciales muy distintos, en los cuales debe enfocarse la estrategia de marketing territorial; por ejemplo, los residentes y los no residentes del territorio consumen o pueden consumir la oferta del territorio rural, pero al considerarlos dos segmentos diferentes deben asumirse sus necesidades y deseos particulares, así como el criterio de valor que tiene cada uno; los dos segmentos buscan mejorar su calidad de vida, pero usan criterios propios para definir “el valor de la calidad”. Mientras  los residentes esperan incrementar su nivel económico y su estándar de vida, los no residentes esperan mayor contacto con la naturaleza, conocimiento y acercamiento a sus tradiciones, paisajes maravillosos, remansos de paz y descanso.

 

El panorama continental y externo nos da una imagen clara de la situación potencial de desarrollar las regiones a través del marketing territorial: 77% de América latina está urbanizado (25% más que Europa); 70% del tejido urbano es residencial, con una sociedad y una economía basadas en alta concentración de renta y bajos ingresos; Brasil y Portugal presentan resultados exitosos en marketing territorial, con más del 90% de las ciudades y las regiones planeadas para generar cadenas productivas de impacto global; en Brasil, más del 70% de los planes directores de desarrollo incluyen las zonas periféricas de vocación económica, social y cultural para su promoción externa, partiendo del cambio en el uso del suelo e introduciendo las zonas especiales de interés asociativo en los planes locales de desarrollo.

 

En general, los mejores lugares de nuestras ciudades urbanizadas –aptas, más lejos y centrales– están reservados por la zonificación para la producción de los mercados de medianos y altos ingresos, sin pensar en los micro-segmentos de compradores de productos a bajo precio que pueden ser fieles a las marcas regionales. Las ciudades no realizan frecuentemente sus POT (Plan de Ordenamiento Territorial) conectados con las ofertas y demandas de las regiones cercanas y áreas periféricas; el marketing territorial, entonces, les ayudaría a ello ya que se soporta en varios conceptos fundamentales:

 

Un acertado posicionamiento de los productos, marcas y servicios.

Una reputación clara de la imagen corporativa frente a los mercados locales, regionales y globales.

Principios claros de “branding” o acción comercial de la marca.

Planeación, aplicación y desarrollo de nuevas tecnologías para incidir directamente en el desarrollo de la marca.                                                                                                        

 

Toda actividad empresarial y la gestión de proyectos de tipo económico, social y cultural que tienen lugar en una localidad o región, requieren una cuidadosa estrategia de marketing, con miras a la creación de cadenas productivas y redes sociales que permitan garantizar su competitividad e inserción en otros mercados locales, regionales y mundiales.

 

La marca ciudad o marca país, por ejemplo, estudiadas en el city marketing o marketing de ciudades, influyen en el modo de ver esa región y en las decisiones de inversión que se tomen en ella; de tal manera, la gestión de marca es un proceso que se debe concebir de manera integral, con la combinación de técnicas de investigación, relaciones públicas, lobby, promoción de ventas, estrategia de e-marketing y el modelo e-commerce, así como un fuerte sistema de comercialización del plus o valor agregado enfocado en la diferenciación.

 

La creación y gestión de la marca ciudad requiere, además, el apoyo de los representantes del gobierno, de los empresarios, los medios de comunicación y los promotores de cultura, educación y ciudadanía. Desarrollar un sistema para que los distintos actores y las organizaciones involucradas trabajen coordinadamente, también es fundamental en el marketing territorial; en estos casos, el gobierno debe figurar como impulsor de la iniciativa, conectado con las necesidades de los distintos entes comprometidos en el desarrollo de la región. Un ejemplo exitoso de marca ciudad lo encontramos en la ciudad de Valencia, España, caracterizada por romper paradigmas y avanzar seriamente en su enfoque tecnológico: se ha concentrado en fortalecer la capacidad organizativa y en movilizar al conjunto de los actores de la ciudad, para conseguir su competitividad y liderazgo en Europa como ciudad destino turístico, trabajo que ha realizado a través de su “Centro de Estrategias y Desarrollo”. Valencia es una ciudad que nos ha enseñado, además, cómo la comunicación de una marca regional se logra a través de los canales naturales de la región misma: los habitantes, la inversión e inmigración, la política interior y exterior, el turismo, la cultura y la herencia del lugar.

 

Tenemos mucho por hacer aún en Colombia para el desarrollo de nuestras regiones; tal vez debamos escuchar a más expertos, como esta experta en competitividad de las áreas periféricas y rurales, la profesora Anabela Dinis, Directora del Departamento de Gestión y Economía de la Universidad de Beira, Portugal:

 

“algunas actividades y productos que usualmente constituyen la “economía visible” de las áreas rurales y periféricas (especialidades de la gastronomía de la abuela, el pan casero, los bordados y tejidos manuales hechos en casa, las conservas de frutas y hortalizas de la granja) son situaciones informales que pueden constituir una buena oportunidad de negocio, toda vez que son trabajos casuales hechos con la pasión y el descanso necesarios para que queden perfectos; productos como éstos, provenientes del mundo específicamente rural, son imposibles de imitar y eso representa la característica única (plus) de cada región, convirtiéndose finalmente en una fuente de ventaja competitiva para las regiones rurales y sus agentes”.

 

Otro sería el destino de Colombia si considerásemos alternativas más originales para “vender” la imagen del país: bocadillos veleños, mazamorra paisa, queso boyacense o mochilas arhuacas son productos que esperan una estrategia más especializada que la comunicación de su plus o valor agregado como oferta gastronómica regional. Podría desarrollarse una campaña cultural para cambiar el hábito de consumo de postres en las comidas diarias de los bogotanos o los manizalitas, incluyendo el bocadillo veleño en su almuerzo como parte de una campaña solidaria con el consumo interno; además de deliciosa, la solución impulsaría la industria del famoso dulce santandereano, que para sorpresa de muchos, no se consume habitualmente en el país. Como sucede con el café colombiano: lo disfrutan más los neyorquinos, japoneses y centroamericanos, que nosotros mismos.

 

El marketing territorial también promueve la identidad cultural de un pueblo, un detonante del desarrollo del territorio; se habla, así, de productos con identidad, patrimonio material e inmaterial, patrimonio cultural e intangible. Las estrategias y acciones de marketing territorial ayudan a rearraigar lo desarraigado por la globalización, preocupación varias veces expresada por el conocido sociólogo Zygmunt Bauman, entre otras publicaciones en su ensayo sobre “Obertura, o bienvenidos a la comunidad elusiva”: “tenemos el sentimiento de que la comunidad es siempre algo bueno”. Ayudan, también, a comunicar el acervo cultural de una nación (su conjunto de prácticas y hábitos culturales e históricos). Promueven, así mismo, la expansión de las libertades humanas, mencionada por el Premio Nobel de Economía 1998, Amartya Kumar Sen, cuando afirma: “estas libertades, entre ellas la fundamental de participar en la economía, son tanto los fines como los medios principales para el desarrollo”, en tanto “las comunidades se forman y transforman sus valores al intercambiar bienes y servicios con otros valores y culturas”. El Comunicador Organizacional tiene aquí la oportunidad de gestionar redes sociales con las prácticas de comunicación para marketing territorial, promoviendo la unión entre los Estados y las sociedades, los movimientos sociales y el surgimiento de dichas redes como formas asociativas de información y colaboración en el marco del cambio que vive el mundo. Debe responder, además, a su rol de creador de mensajes, campañas, programas y estrategias de comunicación que fortalezcan las tendencias en el campo de la producción de bienes y servicios territoriales, las sociedades locales y los procesos regionales de generación de riqueza.

 

En consecuencia con los principios de la comunicación educativa y para el desarrollo, el Comunicador tiene aquí el escenario perfecto para crear y recrear estrategias comunicacionales que consoliden la democracia, los espacios públicos, la integración armónica multiétnica y cultural, y la gestión de espacios de corresponsabilidad en la comunicación de marcas territoriales; esto le implica poner la mirada juiciosa y atenta sobre los actores convocados a la co-participación: los tipos de comunidades, sus interacciones comunicativas, sus formas de construcción de sentido mediante la comunicación, el diseño de la oferta y la demanda de las marcas regionales, entre otros aspectos. En cuanto a su papel como gestor de la comunicación de los movimientos sociales, el profesional de la Comunicación Organizacional puede, además, aplicar investigaciones sociales productivas, preguntándose y analizando cómo se configuran nuevos movimientos sociales, su evolución histórica y la forma como se entrelazan con el orden político mundial, para insertarlos también en los ambientes virtuales y físicos de la comunicación social para el desarrollo. Así, hay mucho trabajo por hacer desde la comunicación en los planes de marketing territorial en Colombia.

 

El siguiente es un ejemplo de cómo debe de citar este artículo:

Montoya Pineda, Dora María, «Marketing territorial»», en
Revista Mexicana de Comunicación on line. México, abril 2010.
Disponible en: http://www.mexicanadecomunicacion.com.mx/rmc_marketing_territorial.html
Fecha de consulta: 12 de abril de 2010